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Por lo que recuerdo, a los 20 años, yo ya tenía algunas experiencias, por supuesto,
pero especialmente, una sed de conocimiento simbólico, espiritual;
en el sentido de la vida, en el sentido de la muerte... muchas interrogantes.
Una característica, que fue el primer elemento unificador, debía centrarse en el simbolismo
y el tarot.
Me encontré en unas circunstancias un poco particulares, en casa de una amiga que era
médium-tarotista y que respondía a preguntas gratuitas;
ella respondía a preguntas de desconocidos después de haber pasado una prueba en una
revista astrológica. Encontré eso apasionante, mientras yo estaba
en la medicina. Un día, ella me dijo: "Tu vas a responder
al teléfono". "Voy a estudiar medicina." Le dije: "¿Que quieres que responda?
" Ella dijo: "Ya lo verás. ¡La respuesta vendrá por si sola!"
Lo recordaré toda mi vida. Una mujer, que yo no conocía de nada, comenzó a hablarme
por teléfono. A medida que ella me hablaba, yo veía su
casa, las flores en su jardín, el automóvil dentro del garaje, la placa de matrícula
del auto. Entonces se lo dije como a la medida, ¡y me di cuenta de que todo era exacto!
Se reforzó dentro de mi, la atracción por lo invisible.
Puedo decir que tengo una doble función; a la vez científica (necesidad de pruebas)
y mística. Entonces, cuando ya fui médico, un cierto
número de procesos se desencadenaron. Un ejemplo muy querido para mi corazón: Tenía
casi 30 años (fui médico muy joven, diplomado a los 23 años).
Esta es la historia de una pareja a la que traté durante mucho tiempo en mi consulta
de París. El hombre desarrolló un cancer de tímo que
le hizo perder la vitalidad rápidamente y falleció.
Su esposa vino a verme, llorando. La hice entrar en una cabina (soy médico-acupuntor),
luego fui a la cocina para tomar un café. Volviendo a la sala, vi una forma azul. "¿Que
es esto, esta cosa?" Esa forma azul me atravesó y, entonces, escuché la voz de mi paciente,
fallecido hacía dos días, que me decía: "Dile que se acuerde de los 'trois sous'."
Me quedé perplejo. Entré en la cabina para ponerle las agujas.
La presencia me dijo: "Díselo", e insistía. Le dije, algo sorprendido: "¿Ésto te dice
algo, 'trois sous'?" Ella me respondió: "No, en absoluto", llorando.
Él volvió: "¡Díle que es de cuando era joven!" No muy aficionado a este tipo de cosas
que no entendía, le dije a la paciente: "¿Cuando eras joven, no te dice nada 'trois
sous'?" Entonces, las lágrimas se detuvieron, los ojos se abrieron, y ella me dijo:
"Pero, sí, mi marido siempre me decía: "¡Te amo como a 'trois sous'!" Habían estado casados
50 años. Esta fué una de mis primeras experiencias,
hace de esto, 30 años. Después, cada uno de mis pacientes fallecidos,
venían a verme y me contaban cosas. Así, que todo esto se trata de una especie
de interfaz del más allá, porque siguen siendo todavía mecanismos concernientes a
los humanos fallecidos.
Poco a poco, hubo fenómenos más místicos, relacionados con dimensiones no humanas, invisibles.
Escribí un libro en 1989, "Contacto con los mundos de la Luz", donde explico estos fenómenos
de trans-comunicación. ese momento, tenía la necesidad de comprender,
de explicar. Tuve la oportunidad de frecuentar al Padre
Brune, muy conocido en la actualidad, que hace trans-comunicación instrumental;
él utiliza radios, televisores, viejos magnetófonos a cassette, para registrar las voces de los
desencarnados. Entonces me interesé por los estados próximos a la muerte.
Formé parte de la "Asociación Internacional para los Estudios Cercanos a la Muerte", fundado por el Dr. Moody de
los Estados Unidos. Tomé parte activa en la búsqueda de estados
cercanos a la muerte, con una orientación más y más, basada en la experiencia personal,
tanto de mecanísmos místicos muy fuertes, incluso prévios a la canalización.
Tuve la oportunidad de confrontar mi experiencia con aquellas descritas dentro de diferentes
corrientes tradicionales, ya sea en la India o con personajes taumaturgos en Francia, incluso
con santos de la Iglesia Católica.
Así que puedo correlacionar, comparar, lo que he vivido personalmente, con otras experiencias.
¡Eso es todo! Después de la publicación de los primeros mensajes de este libro publicado
en 1989, "Contactos con los mundos de la Luz". En esa época, nadie sabía lo que era "canalizar",
¡la palabra ni siquiera existía!