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Saben, recibí una llamada, que me cambió la vida
y que comenzó cuando conocí a esta mujer hace unos años.
No mucha gente la conoce.
Nació en Puerto Rico en 1924.
Creció en un hogar muy estricto y religioso.
Se mudó a EE.UU.cuando tenía 17 años,
fue a la universidad, se casó con un médico, tuvo un par de hijos
y fue maestra de escuela.
Por fuera, dirían que tuvo una buena vida.
Lo que quizá no sepan de ella
es lo estricta y controladora que fue con sí misma,
con su pareja y sus hijos.
Como maestra de escuela
tuvo una reputación de ser bastante dura y en ocasiones cruel.
A los 86 años, sufrió un derrame que le afectó la capacidad de hablar.
De hecho, en los 8 meses entre su derrame y su deceso
sólo pudo decir dos palabras.
En el hospital, un día, me agarró el brazo
me miró y me dijo, "¡Estoy deseperada!"
Y esas palabras aspiraron todo el aire de la sala.
Éramos sólo yo, ella y ese sentimiento de desesperación
Ya saben, luchó cada día.
Nunca aceptó su situación.
Y fue en verdad dolorosover a mi madre tan infeliz.
La Navidad se acercaba y quise cantarle un villancico de regalo.
Así que memoricé "Noche de paz" y yo...
en Noche Buena, una vocecita me dijo,
"Debes ir a cantar esta noche. No esperes hasta mañana".
Empaqué mi iPod, altavoces, porque cuando era niño
mi mamá decía que si estaba en mi habitación cantando
tenía que ir a ver si estaba cantando o llorando. (Risas)
Necesité de apoyo vocal.
Estaba con medicamentos, tomé sus manos y le canté la canción.
Luego le dije, "Mami, has sido una buena mamá para mí y mi hermano.
nos has amado y a nuestras familias y quiero que sepas
que cuando estés lista para partir,
Dios te recibirá en sus brazos y te amará por siempre.
Luego quise soltar sus manos y me di cuenta
que se aferraba a los mías.
Y algo pasó en ese momento, hubo una energía que inundó la sala,
me dio escalofrío como me está dando ahora y dije, "Guau, es maravilloso".
Le di las buenas noches y me fui a casa.
Cuando el teléfono sonó horas más tarde, supe que mi mamá había tomado su decisión.
Jalil Gibran dice que elegimos nuestras penas y alegrías, mucho antes de que ocurran.
Vi cómo mi mamá eligió una vida de desesperación sin darse cuenta.
Y creo que nos dormimos en muchas de nuestras elecciones
y en muchas de nuestras decisiones hacia nosotros mismos.
Pero creo que podemos estar conscientes de esas decisiones que nos definen,
quiénes somos y cómo seremos en la vida.
Suena fácil, ¿pero cómo le hacemos?
¿Cómo mantenernos atentos a nuestras elecciones,
cómo lidiamos con esa sombra nuestra,
y cómo seguimos cultivando nuestros puntos fuertes?
Bueno, una forma es visualizarlo.
Una simple es, "Ah, puedo escoger tener
el lado positivo y ser útil para mí y los demás
o puedo escoger el lado negativo y sabotearme a mí y a los demás.
Pero quise ver todas mis opciones de una vez, así que esta idea de una tabla periódica,
con actitudes como elementos, me vino a la mente.
Me dio mucho sentido debido a mi formación médica
y mi trabajo con líderes, en su mayoría ingenieros y científicos.
Lo que hice fue poner todo eso en lo que llamo
"los cuatro grupos que alimentan el alma", del lado derecho.
Ya saben, tener una visión y dirección,
ser capaces de tomar acción hacia esa visión,
ser capaces de conectarse con la gente de forma significativa
y ser capaces de reflexionar y llevar sabiduría a nuestras vidas.
Puse aquello que nos causa desgaste
y apabulla de la vida, en el otro lado.
Luego, llené la tabla con actitudes simétricas.
Entonces me encontré a mí mismo en la zona roja,
Podía ver del otro lado y ver a dónde dirigirme.
Así podía ya fuera estar frustado o comprometido,
podía estar enojado o apasionado,
sarcástico o en verdad jocoso.
Podía, ya saben, culpar o responsabilizarme.
Podía ser un adversario, que tendría la razón
y hacer lo correcto o podría ser un activador.
Recorrí cada renglón hasta completar la tabla.
Y entonces, "¡Guau!"
"Esto serviría bien como tabla optométrica". (Risas)
Lo que empezó como un simple y real proceso,
se fue complicando, porque entonces empezó a ocurrir que
"Mmh, qué es todo eso, ya saben, neurofisiología total,
y qué hay de todas las diversas formas que pensamos,
y todo en verdad se fue expandiendo y creciendo.
Y resulta irónico, porque odiaba la tabla periódica
cuando era adolescente. (Risas)
Entonces vi surgir estos patrones de mi persona y de otros
y como con mi hija, pude ver cómo, mi hija tiene 24 años
pude ver lo controlador, arrogante y crítico que podía ser.
Quiero decir, sólo quería que tuviera una buena vida ¡a mi manera!
O bien, podía tener la confianza de estar siendo un buen padre
podía ser más agradecido y apoyarla más
y saber que ella tiene que tomar sus propias decisiones.
Y entonces estas moléculas empezaron a aparecer.
En el trabajo, las compañías tienen problemas y tener la capacidad de ver
dónde están esos problemas, a dónde quieren ir
y qué necesitan hacer para crear la cultura que en realidad quieren tener,
podrían usar esta herramienta en ese sentido.
Las relaciones personales son todas otra dimensión
donde nos podemos ver a sí mismos y hacer nuestras elecciones.
Todavía sigo trabajando en lo que ocurre cuando estoy atrapado en el tráfico.
(Risas)
Esa no está fácil.(Risas)
A veces es fácil cambiar del rojo al verde.
pero a veces me encuentro atrapado.
Ocurre que cuando estoy frustrado, cuando estoy enganchado,
me quedo pensando lo mismo, una y otra vez
y es aquí cuando la pausa de 90 segundos entra
porque la mayoría de las emociones duran 90 segundos.
Y si me permito una pausa de 90 segundos, permito que mi sistema se calme.
Entonces todo lo que haría es dejar de pensar que aquel es un completo idiota
por 90 segundos y luego podría elegir seguir adelante. (Risas)
En ocasiones necesitamos una forma un poco diferente para lidiar con nosotros mismos.
Solía tener una pesadilla recurrente.
Había un cíclope que me perseguíay yo tenía una gran espada
con la que mataba al cíclope; tan pronto como me daba la vuelta
volvía a la vida y empezaba a perseguirme otra vez.
Sueño tras sueño, lo mataba, me volvía,regresaba a la vida y me perseguía.
Esto ocurría una y otra vez
Un día, estaba en la entrada de mi casa, lo maté, lo hice pedazos,
lo puse en el bote de la basura; tan pronto me volvía
la tapa se abría y allí estaba otra vez, justo ante mí.
Pero esta vez, lo confronté y le dije,
"¿Qué quieres de mí?"
Una enorme lágrima salió de su ojo y con una voz de lo más suave me dijo
"Sólo quiero que me ames".
En ese momento me di cuenta que intentaba matar mis miedos
para hacerme valiente y que eso nunca funcionaría.
Pero si podía acoger esos aspectos de mi persona
entonces toda mi vida se transformaría.
Cuando se trata de puntos fuertes y de funcionar con ellos
Pam Boney, que creó Tilt 365, dice que necesitamos equilibrar nuestros puntos fuertes,
que nuestra naturaleza humana nos inclina a
que sólo usemos uno de nuestros puntos fuertes
y que podemos de hecho sacarnos de nuestro propio equilibrio
y puede convertirse en un lastre.
Si tomamos la dimensión del pensamiento donde tenemos ideas nuevas
necesitamos equilibrarlo con datos e investigación.
Si tenemos la dimensión del sentimiento,
necesitamos equilibrarlo con la toma de acción considerando a los demás.
Entonces si nos equilibramos en estas dos dimensiones,
crearemos el ambiente óptimo para nosotros mismos y los demás.
Aprendí mucho de esto de mi mamá en los últimos momentos de su vida.
Los invito a que sean conscientes de aquellas decisiones que los define.
Los invito a que tomen esa pausa de 90 segundos.
Los invito a que acojan esas parte de Uds. mismos que quizá han estado rechazando
y que equilibren sus puntos fuertes.
Quiero concluir con una pregunta que les dejo y me hago a diario:
Cuando lleguen al final de su vida,
¿Qué historia contarán Uds. de su vida?
¿Será un drama? ¿Será una tragedia?
¿Será una comedia? ¿O será una aventura emocionante?
Esa decisión depende de Uds.y empieza justo ahora
Gracias.(Aplausos)