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Una Carta es un documento, como la Declaración de Independencia o la Carta Magna, donde se jura respetar y defender ciertas ideas o creencias.
La Carta por la Compasión es un documento escrito por personas de todo el mundo, que representan cada país y cada fe.
Personas como el Arzobispo Desmond Tutu, en Gran Muftí Sheikh Ali Gomaa and Karen Amstrong.
Miles de personas han aseverado la Carta como la Reina Rania, Sir Richard Branson e incluso Su Santidad el Dalai Lama.
La compasión es básicamente... bueno, es la Regla de Oro.
Es una idea que ha existido durante siglos y es el núcleo de todas las creencias y religiones del mundo.
La Carta por la Compasión es una declaración para restaurar la compasion como centro de nuestras tradiciones morales y religiosas.
Lo que empezó como un deseo en TED Conference, ha inspirado un movimiento.
En San Francisco hay estudiantes que se reúnen para hablar sobre lo que significa para ellos la Regla de Oro.
Seattle comenzó la Carta y así se convirtió en la primera Ciudad Compasiva oficial.
Compasiva Seattle: ¡depende de nosotros!
Y en EEUU se ha unido la Iglesia Presbiteriana, lo cual es genial.
Los irlandeses hicieron un Festival por la Compasión y en Sudáfrica el Reverendo Peter Storey dio a conocer la Carta en el Mundial.
La Carta por la Compasión se ha difundido en instituciones tan diversas como la Ópera de Sidney, la Catedral de Washington, el Karachi Press Club, la Chautaqua Institution y el Jardín del Perdón en Líbano.
De Amsterdam a Pakistán, de México a Dubai, de Lahora a Londres, de Toronto a Tel Aviv, es decir, en todas partes, millones de personas en todo el mundo se unen para hacer de la Carta algo suyo.
Y ahora, te estamos esperando.
¿Quieres que tu colegio, comunidad, ciudad o país sea más compasivo? Entra en charterforcompassion.org y averigua cómo hacerlo.
¿Por qué no empezamos todos ahora mismo?