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Esta es la
tugra del Sultán Suleimán el Magnífico,
hecha hacia el final de su mandato.
hecha hacia el final de su mandato.
Está escrito Suleyman
Sah,
Ibn
Selim
Sah,
Han,
Al-Muzaffer
luego por lo general termina con Dimen, que significa "victorioso para siempre".
Pero lo divertido es que es verdaderamente difícil de leer.
Esta firma se adjuntaba a todo documento administrativo.
Uno puede leerla como un símbolo real del propio Sultán,
representando su poder.
Cuando era niña
siempre
me perdía
en estas flores.
Siempre me intrigaron.
Mirándolas de cerca
descubrí que verdaderamente
son un sistema.
Son una belleza.
Hay incluso una especie de música
en cómo se combinan estas flores.
Además de todo esto, por supuesto hay un contexto histórico.
No es sólo un lenguaje artístico,
sino un mundo humano.
Es un mundo de guerreros poderosos
rivales de Europa.
La caligrafía se parece un poco
a una gran
serpiente.
Todo esto va en conjunto con estas flores, que para mí es más
el símbolo de una mujer que el símbolo del sultán en el poder.
Las flores están descontroladas,
pero para dibujarlas con tal detalle
en esta obra de arte todo está bajo control.
Es el arte de controlar.
Y cada sección es diferente.
Están las hojas Sadz,
la palmeta,
los claveles
y se ven por todas partes.
Y toda la vibración
del oro
los ojos tratan de
imaginarse qué parte está delante y cuál detrás
De repente la imagen se torna tridimensional. A medida que la miras más y más los colores comienzan a cobrar vida.
Puedo volver y descubrirla de un modo diferente.
Todavía tengo un poco de esa percepción ingenua
de estar perdida,
que realmente no es muy académica
pero que al fin y al cabo es lo que nos hace disfrutar del arte y que vaya con nosotros.