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Uno de los precios que pagas por estar sin dios es que la gente
siempre amenazará en rezar por ti, lo que podría ser un poco aterrador,
pues como sabes no están rezando para que seas feliz y pleno,
sino para que te vuelvas religioso, que dista de ser lo mismo.
Están rezando para que sus creencias tengan influencia en tu vida.
En otras palabras, no están rezando por ti en absoluto; están rezando contra ti.
Así que puedo decirles a las personas que dicen estar rezando por mí
por favor no lo hagan. No están haciéndonos ningún bien,
y francamente están perdiendo su tiempo.
Estoy más allá de la redención. Rechazo categóricamente a dios.
Niego rotundamente al espíritu santo, estoy totalmente resignado a la condenación eterna,
y estoy absolutamente en paz con ello.
Estarías mucho mejor rezando para ti, pues eso estás haciendo de todos modos,
y nunca se sabe, puede que tengas suerte.
Verán, creo que rezar, como la religión misma, está en la mente,
que puede ser un gran lugar, en muchos casos.
Tenemos mucha suerte de vivir en una época en la que sabemos tanto de la mente,
aparte de lo que es, dónde está, y cómo funciona, obviamente.
Pensamos que vive en el cerebro. Bueno, estamos bastante seguros ello.
El hecho es que apostaríamos a que está ahí, pero no podemos estar absolutamente seguros
porque, tristemente, aún no es posible abrir el cerebro,
sacar la mente, matarla, y mostrarla en un aparador,
pero estoy seguro de que es sólo cuestión de tiempo por el avance de la ciencia.
Una cosa que sí sabemos sobre de la mente es que es en extremo poderosa
y en extremo maleable - una combinación no siempre ideal.
Sabemos que es lo suficientemente potente como para hablarse a sí misma sobre casi cualquier cosa,
asi que cuando la religión reclama el crédito por las cosas buenas
y haciendo las malas culpa tuya, se vuelve muy fácil
convencerte de que eres un pecador indigno,
que es exactamente en lo que te convertirás si sigues diciéndote eso,
porque así es como funciona la mente.
Así que serás un pecador indigno, pero sólo porque seguiste diciéndotelo como idiota,
y ahora vas a pasar toda su vida luchando contra tu propia naturaleza para seguir siendo "virtuoso".
¿Es eso estúpido o es loco? Tiene que ser una cosa o la otra.
Bueno, he oído decir que el rezo es también una especie de auto-hipnosis,
una forma de programación del subconsciente para operar bajo el agua en tu nombre.
Y de alguna manera eso tiene mucho sentido, porque sabemos que
el cuerpo y la mente no son, de hecho, cosas separadas.
Sabemos que si piensas cosas angustiosas, por ejemplo,
tus músculos se tensarán sin que te des cuenta,
y si continúas entonces rápidamente diferentes químicos se producirán
hasta que, antes de que lo sepas, hay toda una fiesta en marcha
en tu cuerpo sólo por lo que estás pensando.
Es bien sabido que los optimistas tienden a recuperarse de las enfermedades
mucho más rápido que los pesimistas, porque sus mentes está trabajando con ellos
y para ellos, no contra ellos.
Así que, si estás rezando por algo, pero te das cuenta de que no lo estás obteniendo,
tal vez no es porque lo sobrenatural te haya defraudado,
sino porque tu subconsciente cree que no lo mereces.
Y tú que pensabas que dios juzgaba.
¿Pero dónde crees que tu mente podría haber sacado una idea así?
Por eso que creo que es más probable que tú reces con éxito
sin religión que con ella, porque la religión no quiere que sientas que lo mereces.
La religión quiere que sientas que te mereces estar de rodillas
en penitencia y sumisión, suplicando misericordia.
La religión quiere que la vida sea un destino peor que la muerte.
Por eso hace de la miseria una virtud.
Sufrir para ser santo, ¿no? Quieres ser como Jesús, ¿no?
Claro que quieres, de lo contrario ¿cómo te salvarías de toda esa tortura eterna?
Comparado con ese destino, un poco de sufrimiento terrenal es de hecho una buena inversión.
Es como dinero en el banco, y todo lo que va a costarte
es un dolor en las rodillas y un complejo de culpa paralizante. Qué buen trato.
En serio, reza por ti. Eres quien lo necesita.
Y si quieres rezar exitosamente, para ti mismo,
y asumiendo que eso quieres,
entonces sugiero que lo primero por hacer es desechar la religión.
Y luego tendrás que convencerte de que lo mereces.
Sabes que es así, pero tienes que creerlo. Tienes que tener fe.
De lo contrario, estarías perdiendo tu tiempo.
Y realmente espero que te funcione, pero no tienes que preocuparte por mí.
Yo lo llamo farsa religiosa, y estoy feliz yéndome al infierno en una carretilla
con mis pies por delante y fumándome un cigarro.
Que venga, nene, que venga. Paz.