Tip:
Highlight text to annotate it
X
EN ALGÚN LUGAR DE ATENAS
MAYO, 1969
Ésta es la Corporación de Radiodifusión Helénica.
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo.
Amén.
Padre Celestial...
Espíritu Santo y Espíritu de la Verdad...
que eres omnipresente y llenas todas las cosas.
Tesoro de dones generosos y creador de vida...
ven y mora con nosotros.
PAPÁ, ¿POR QUÉ TE FUISTE?
UNA PELÍCULA DE PENNY PANAYOTOPOULOU
¡Despierta! ¡Despierta!
¡Regresó! ¡Papá regresó!
¡Despierta, despierta! ¡Papá regresó!
Déjame en paz.
Tengo sueño.
¿Por qué los guardas?
Porque quiero.
-Nos llenaremos de cucarachas. -¡No te metas!
Es mi cuarto.
Ahora es mío también.
Sólo por un tiempo.
Estarás aquí hasta encontrar una casa más grande.
Mi mamá me dijo.
¿Cuándo?
¿Cuando el negocio de papá mejore?
-¿Se eleva el globo? -¡No!
Escucho un sonido como si fueran olas.
El mar está debajo de nosotros.
Tu pobre madre está debajo de ti.
¡Por la borda con todo el lastre!
¡Todo!
Ciro está en el mar. ¡Vamos a salvarlo! ¡Salvémoslo!
¿Qué miran? Hagan algo.
Yo ya no quiero leche.
Estaba frente a ti.
Odio el olor a leche quemada.
-Cálmate, no es para tanto. -Entonces límpiala tú.
Déjala.
¿No me soportas ni unos días al mes?
Nuestro hijo mayor es cada vez más hostil.
Ven, papá, vámonos.
Te extrañan.
¿Y tú?
¿Me extrañas?
Primero el derecho.
¿Por qué debo meter siempre el derecho primero?
No es la primera vez.
Dije que es para la suerte.
Esta es la tienda de papá. No es sólo un auto.
Es una herramienta.
¿Dónde desearías estar ahora?
¡Tú primero!
¿Por qué yo?
Porque eres mayor.
Estoy en un pueblito junto al mar.
¿De viaje?
No, tenemos una preciosa cabaña en la playa...
y vivimos ahí todos juntos.
¿Mamá también?
Mamá también.
¿Y el padrino?
El padrino.
No lo dejaremos solo.
También tengo una tienda.
¿Qué tipo de tienda?
Cosas curiosas...
que no encuentras...
en otros lugares del mundo.
¿Televisores?
Televisores.
Cuando cierras la tienda, ¿te vas derecho a casa?
No lo creo.
Creo que daré un paseo en lancha.
¿No te lo dije?
Nosotros también tenemos una lancha preciosa.
¿Cómo se llama?
Elías.
¡Elías no!
Llamémosla Apolo...
como las naves espaciales.
Ahora te toca a ti.
¿Dónde estás?
Había sólo un hombre que no quería admitir...
que la situación era desesperada.
Sólo él tenía confianza. Julio Verne
Y ese fue su devoto amigo J. T. Maston.
Ni bien la luna se elevaba por encima del horizonte...
él la enfocaba en el campo de su telescopio y observaba...
incansablemente el pasaje del proyectil.
Y el hombre digno tenía comunicación...
con sus tres amigos...
a quienes no perdía la esperanza de volver a ver.
"Eso son hombres listos," decía.
"Verás que un día...
les irá bien."
En un rato...
los hombres caminarán allá arriba.
¿Es cierto lo que los libros decían?
Sí. ¿No sucedió lo mismo con submarinos?
La mente viaja más rápido que la acción.
¿Te irías sin mí?
¿Me dejarías?
Primero iría a ver cómo es...
pero luego enviaría por ti.
¿Me prometes que un día iremos juntos?
-¿No tendrás miedo? -Sólo las niñas tiene miedo.
¿Cuándo empezaste a fumar?
Ni siquiera mirabas un cigarrillo.
Desde que es la única cosa que me hace compañía.
¡Papá! ¡Papá, no te vayas!
¡Papá! ¡Espera!
¡Espera! Iré contigo.
¡Papá, no vueltas a irte!
¡Iré contigo!
¿No me escuchas?
Voy contigo.
¡No! ¡No te vuelvas a ir!
1, 2, 3...
4, 5, 6, 7...
8, 9...
10, 11, 12, 13...
14, 15, 16...
17, 18, 19, 20, 21...
¿Te vas de nuevo a trabajar?
Aún no.
¿Por qué te rasuras?
Nunca salgo de casa sin rasurarme.
A mí me gustas más con barba.
Da comezón.
¿Vas a besar a alguien?
A ti.
¿Y a mamá?
-Lo hiciste. -No era mi intención.
El viento sopla...
y una luna oscura...
ya sobre la colina.
¿Dónde estás?
¿Dónde estás, mi amor?
Quiero tomarte en mis brazos.
-Tu primera rasurada. -¿También me enseñarás?
-¿Cuándo crezcas... -¿Cuándo tengo mi primer empleo?
Cuando te llegue el momento.
Nuestro sendero está cubierto...
de mala hierba...
las noches vacías en que te echo de menos...
mi joven perdido.
¡Michalis!
¿Cómo estás, Michalis?
No es Michalis, mamá.
Es Christos.
¿Cómo estás, Christos?
¿Cómo están tus hijos?
Aquí está uno de ellos... el más chico.
La inútil de tu esposa nunca me los trae.
Es dirícil ahora con la escuela.
¿Qué escuela?
¿Cuándo crecieron?
Los bebés son de Michalis. Los míos van a la escuela.
Soy Christos, no Michalis.
¡Sé que eres Christos!
Me deja morir de hambre.
¿Quién?
Tu hermano.
Todo el día sin comer.
No creo que Teodosio haga algo así.
Te quiere.
Siempre me está hablando de ti.
Está mintiendo.
No he comido en tres días.
Quiere matarme.
Su esposa también quiere matarme.
Soy un estorbo para ella.
Teodosio no es casado, mamá.
Ustedes dos están solos. Él te tiene que cuidar.
Se divorció hace años.
Aún le hace caso a ella.
Hablan por teléfono en secreto.
Creen que soy sorda...
pero escucho todo.
¿Por qué no me llevas a tu casa?
Eres todo lo que tengo.
"Querida madre: No te he olvidado.
"Acabo de llegar a Naupactus en el transbordador.
"Estoy tomando café en una cafetería debajo de los muros...
"y me voy a Arta de inmediato.
"Ahora que tengo mi propio auto, la vida es más fácil.
"El negocio mejorará. Estoy seguro.
"Dale un beso a Teodosio de mi parte...
"y no olvides tus medicinas.
"Tu hijo Christos."
Viajo con frecuencia...
y la casa es pequeña.
Échala.
¿A quién?
A tu esposa.
No te ama.
Siempre dije que tu esposa no te amaba.
¿Lo recuerdas?
Vámonos, papá. Mamá estará preocupada.
¿Por qué dices esas cosas, mamá?
Porque sé.
Soy tu madre.
¡Vamos! Vámonos, papá. Mamá se preocupará.
Nunca has probado algo así.
No nos quedaremos, Teodosio. Comeremos en casa.
Éste tu hogar también.
¿No somos tu familia?
¿Por qué no comes, mamá?
Siempre lo hace y cuando no la veo, se lo devora.
Es como un juego.
Esconde comida debajo de la cama.
Yo lo vi, padrino.
Esto a ti no te importa.
¡Te llenarás de cucarachas! ¡De cucarachas!
Algo debe haber sucedido.
Nada sucedió.
¡Come!
Quizá se quedaron a cenar con ellos.
No estés enojado, hijo.
No es correcto. Es tu padre.
-Come. -¡No tengo hambre!
Anda, sólo un poquito para acompañarme.
¿Te lo caliento?
No importa.
Me molesta verte trabajar tanto sin resultados.
Podría abrir mi propia tienda con todo lo que me deben.
Eso hizo nuestro padre.
Le dio crédito a muchos y perdimos todo.
No recuerdo que nos faltara nada.
¿Bromeas?
No lo recuerdas.
Yo te crié. Eras pequeño. Con mi sueldo.
Pude meterte a la compañía...
pero eras demasiado salvaje.
Cállate, Teodosio.
No es culpa de su cerebro.
Es su esposa.
No empieces, mamá.
¿Por qué le mandaste postales a abuela?
Cada vez que nos ve no recuerda quiénes somos.
Porque cuando le escribo recuerdo cómo era ella.
Algunas cosas se hacen por uno mismo, no por los demás.
¿Trajiste los chocolates para mí o para ti?
¿Somos una familia?
Entras y sales como visita.
Nunca estás en casa.
También es mi familia.
¡Siempre me cargas con tu familia y la anciana!
No hables así de mi madre.
1, 2, 3, 4, 5, 6, 8...
¡Cuando nos casamos sólo eras tú, no los tres!
11, 12, 13, 14, 15, 16...
18, 19, 20, 21, 22...
25, 26, 28, 28, 29...
-¡Déjalo! -¡Dije que lo apagaras!
Así no los escucho.
Ya se callaron.
-Sólo por un rato. -¿Por qué sólo por un rato?
Porque volverán a empezar.
¿Cómo lo sabes?
Es estadística.
¿Qué son las estadísticas?
No lo entenderías si lo explicara.
-Entenderé. -En otro momento.
En fin, esta vez no duró tanto...
la pelea.
¿Ah, sí? ¿Las cuentas?
Sí, las cuento.
¿Qué importa si llevas la cuenta?
Importa y mucho.
Cada vez será menos y menos...
hasta que al final ya no pelearán.
Así no es como funciona y lo sabes.
¿Funciona con estadísticas?
Te engañé. Nunca llevo la cuenta.
Mi papá tiene uno igual.
Sí, pero éstos son míos. Mi papá me los dio...
porque él se compró una rasuradora nueva...
que hace todo.
Ni tienes barba todavía. ¿Qué harás con eso?
Puedes rasurarte aunque no tengas barba.
-¿Cómo? -Te enseñaré durante el recreo.
-¿Quién te enseñó eso? -Mi papá.
-Tu papá es un idiota. -Dije que podías hacerlo.
¡No, no puedes!
¿Para qué necesitabas esto en clase, Manolopoulos?
-Mi papá me lo dio. -¿Para qué los cargas?
Quiere rasurarse durante el recreo.
¡Ustedes cállense!
Guárdalos y no los traigas a la escuela.
La próxima vez, los confiscaré.
No tuve tiempo.
¿Has visto mi estuche para rasurar?
-¿No está en el baño? -No.
Quizá no recuerdas dónde lo dejaste.
¿No te despides de mí?
Esto no durará mucho más.
Alguien siempre te está alejando de mí.
¡Quédate!
¡Quédate!
¿Dónde estabas? Estaba preocupada.
-¿Y papá? -Se fue. Ya es tarde.
¿Se fue sin sus cosas para rasurar?
¿Adónde vas? Ven aquí.
Ven aquí y come tu comida. Eres piel y huesos.
-No quiero nada. Ya comí. -¿Qué significa eso?
Comí un pastelito de crema.
-Eso no es comida. -Pero estoy lleno.
¡Come, maldición! Me basta con mis propios problemas.
Tengo que lidiar contigo y tu falta de apetito.
Tu padre volverá.
Ahora come.
"Esta vez me iré por un tiempo.
Pero regresaré antes del alunizaje.
Recuerda que tu papá siempre cumple lo que promete.
En mi próximo viaje, te llevaré conmigo.
Es culpa de mamá que papá nunca esté en casa. "
-No es culpa de mamá. -Es que tú no lo ves.
Los vi besándose antes de que él se fuera.
No te creo.
Mamá se despertará.
¿Hola?
No está aquí en este momento.
Su hijo.
Veintiuno.
Llegará tarde. Puede dejarme el mensaje.
¿Cuándo?
¿Y dónde está él ahora?
¿Y el auto? ¿Y sus cosas?
No, no es necesario.
Yo se lo diré.
Por supuesto.
Veintiuno, le dije.
¿Qué significa "accesibilidad"?
Cuando te acercas.
Papá se fue.
Lo sé. Puedo verlo, ¿no?
Se fue para siempre.
No se fue para siempre. Regresará.
Sufrió un accidente en auto.
No regresará.
Me dejó una nota, te digo. Léela tú mismo.
Lo dice claramente. Mira si no me crees.
La escribió antes del choque.
También me escribió a mí.
¡Estás mintiendo!
¿Dónde está? ¡Muéstramelo!
-No lo tengo. -¡Mientes!
Estás celoso porque no te dejó nada...
-y quieres lastimarme. -¡No tengo nada!
Te digo que papá murió.
Está muerto.
¿Cómo lo diremos a mamá?
Demorará...
pero va a regresar.
Lo prometió.
¿Por qué tantos gritos?
¿Ya no puedo dormir?
Estaba leyendo en mi cuarto y él vino y me dijo...
que papá se ha ido y que no volverá.
Que está muerto y no volverá.
¿Por qué está mintiendo?
¿Por qué? ¿Por qué?
Aris, ¿qué pasó?
¿Qué pasó, Aris?
Dime, hijo.
¿Qué pasó, hijo?
¡Habla, hijo!
51, 52, 53, 54, 55, 56...
60, 61, 62, 63, 64, 65, 66...
80, 81, 82, 83...
88, 88, 89, 80...
No lo crees...
pero es cierto.
Papá está muerto.
Se ha ido para siempre...
y no regresará.
Eso no significa que haya dejado de quererte.
Sólo que ahora te lo mostrará de otra manera.
"Esta vez me iré por un tiempo.
Pero regresaré antes del alunizaje.
Recuerda que tu papá siempre cumple lo que promete.
En mi próximo viaje, te llevaré conmigo."
¡Levántate y límpialo!
Te digo que se cayeron solos. No es mi culpa.
¿Cómo que se cayeron solos? Limpia eso.
¡Basta!
¿Voy a ir a la escuela hoy?
-¿Qué quieres hacer? -Quisiera ir.
¿No preferirías que habláramos?
Te digo que se cayeron solos. No es culpa mía.
Está bien, anda. Es tarde.
La palabra "espejismo"...
significa...
ver cosas que no existen...
en el lugar de otras...
que existen.
Por ejemplo...
...en el desierto dicen que los viajeros...
¡Algo le pasa a Manolopoulos!
Salgan del salón, todos.
En silencio.
Dense prisa.
¿Qué te sucedió, hijo?
¿No dormiste bien anoche?
-No pude dormir. -¿Por qué no?
¿Hay problemas en casa?
No, ninguno. Simplemente no pude dormir.
¿Tus padres están de viaje?
-Mi padre sí. -¿Y tu madre?
Ella está con él. Nunca lo deja solo.
-¿Quién se quedó contigo? -Mi hermano.
-¿Solos, ustedes dos? -Con mi padrino.
Cuando regresen tus padres, quiero verlos.
No han venido en mucho tiempo.
Puedes quedarte aquí hasta que alguien...
venga por ti y te lleve a casa.
No, no quiero irme a casa. Quiero quedarme en clase.
¿Qué pasó? ¿Qué te hizo? ¿Te castigó?
No, nada.
Sabía de los espejismos y me aburrí...
escuchando cosas que ya sé, así que me quedé dormido.
Me preguntaron, les dije y no me castigaron.
Sí, cómo no, ya sabías.
¡Silencio!
-Te digo que ya las sabía. -Está bien.
Dime por qué sólo sucede en el desierto.
No sólo sucede en el desierto.
Para eso, debía hacer mucho calor.
¡Baklatzis! ¡Dije silencio!
Si deseas mucho algo, los ves vívidamente frente a ti.
Cierras los ojos, los vuelves a abrir, y ahí está.
Frente a ti. En cualquier parte.
No está frente a ti.
Crees que sí, pero no es así.
Eso es un espejismo. El calor hace que veas cosas...
-que no existen. -¿Quieren callarse?
Cuando lo ves, es real.
En el desierto, cuando tienes sed, no hay agua...
pero la ves frente a ti.
Mi papá bebió agua en el desierto.
-¿Ha ido al desierto? -Una vez, por trabajo.
¡Baklatzis! ¡Manolopoulos!
Los mandaré afuera.
Te equivocas.
Te lo explicaré después de clases.
No insistas.
¡Sabihondo!
Bueno, niños, no olviden el ensayo para el lunes.
"¿Qué estación del año me gusta más y por qué?"
¿Por qué viniste por mí?
-¿No te gusta mi compañía? -Claro que sí.
¿Qué es lo que más te gusta de mí?
-Papá te quiere mucho. -¿Sólo eso?
Me llevas a pescar y arreglas mis juguetes rotos.
¿Sólo eso?
Te dije tres cosas. ¿Qué más quieres?
No, con eso basta.
Ahora tú dime por qué te gusta ser mi padrino.
Piensa en tres cosas.
Me gusta que me cuentes lo que sueñas.
Me gusta que me ayudes cuando vamos de pesca.
Me gusta que no le dices a nadie lo que serás...
cuando crezcas. Eso es lo que más me gusta.
-Sí. ¿Qué pasó? -No dijo nada al respecto.
¿Y tú?
No pude.
Algún otro día... después del funeral.
No creo que entienda lo que pasó.
No lo presiones.
Lo entenderá gradualmente.
Mi estación favorita es el invierno.
Me gusta que afuera esté nevando y haga frío...
pero adentro esté cálido, muy cálido.
Esta Navidad mi papá trajo a casa un árbol enorme.
Como una nave espacial. Ocupaba toda la sala.
Era tan alto que perforó el techo...
e intentó llegar al cielo.
"Ahora colocaremos la estrella arriba, " me dijo...
y comenzó a trepar la escalera para alcanzarla.
Quedaba muy, muy lejos. No se podía ver la punta.
Le tomaría mucho tiempo alcanzarla.
Desde abajo lo vi trepar y a medida que trepaba...
se veía cada vez más pequeño, muy pequeño...
aún más que yo.
Yo no podía ver la punta...
pero él gritó que ya la veía.
Un poquito más y la alcanzaría.
Se convirtió en un puntito y desapareció.
Yo ya no lo veía.
Se desvaneció.
Esperé a que bajara. Largo rato.
No podía soltar la escalera.
Pero no podía mantenerme despierto.
Me quedé dormido.
-Ven aquí. -¡No quiero ponérmela!
La tía dijo que debemos usarla por 40 días.
¡Es fea! Se burlarán de mí.
Nadie se burlará de ti.
Si te la pones, el maestro no te hará parar en clase.
¿En serio?
Y si te portas mal. no te castigará.
Tienes mi palabra.
¡Póntela!
Me la pondré cuando vaya a la escuela. ¿Por qué ahora?
¡Elías!
Ven, Michalis.
¿Dónde desearías estar ahora?
Estoy en un barco llamado Apolo.
Me subo y zarpo.
En poco tiempo, las luces de la ciudad se desvanecen.
-El cielo está lleno de estrellas. -¿ Y eres feliz?
Sí, soy feliz. Ahora te toca.
¿Dónde estás?
-En una nave espacial. -¿Cómo es tu nave?
-Como nuestro auto Birbilo. -¿ Y adónde te diriges?
A la luna. Llegaré en cualquier momento.
Piso el freno y me detengo. Pongo el freno de mano.
Abro la puerta y me bajo.
¿No te están dando instrucciones por radio?
Me las dieron antes. Ahora doy mis primeros pasos en la luna.
-Espera. Creo que te veo. -¿Desde dónde?
-Desde mi barco. -No es posible.
No traes tus binoculares.
Aquí los tengo.
Los llevo a todos lados.
-¿Y qué ves? -Te veo a ti.
-Un punto *** en la luna. -Yo no te veo a ti, papá.
¿Por qué la apagaste?
Es lo único que tengo.
No entiendes lo que dice.
Lo entiendo todo.
¿Dónde está la chica que te cuida?
Le permití retirarse.
¿Por qué haces lo que quieres?
Porque todas roban.
Deberías quedarte en casa y vigilarlas.
Dime.
¿Por qué estás vestido de novio?
¿Qué tramas?
ENCICLOPEDIA ESPACIAL LA GRAN AVENTURA ESPACIAL
ALUNIZAJE
¿Dónde estuviste estos días?
Fuimos de viaje al lugar donde nació mi papá.
El maestro dijo que tu papá está muerto.
No está muerto. Regresará.
¿Por qué traes esa banda negra en el brazo?
-Es mi nuevo truco. -¿Qué clase de truco.
Si te la pones, el maestro no te hace parar en clase.
Y si te portas mal, no te castiga.
Es para engañarlos.
Mi papá la usaba cuando mi abuela murió.
Tal vez quería engañarlos en el trabajo...
y tú crees que se la puso por tu abuela.
Eso es distinto.
¿Ves? Todo este tiempo hemos estado hablando en secreto...
y él no ha dicho nada.
Funciona.
Primeros tres pupitres...
al pizarrón.
Tú no, Manolopoulos. Hoy no harás examen.
Mi papá me trajo una cachorrita...
de uno de sus viajes y la llamamos Gagarin...
como el astronauta.
¿Por qué le pusiste a una perra un nombre de hombre?
Cuando eres un héroe no importa...
si eres hombre o mujer. Eres ambos.
¿Cómo puede ser?
Puedes ser. Lo eres todo.
No eres una cosa o la otra. Eres ambas.
No recuerdo que laguna vez hayas tenido un perro.
-La atropelló un auto. -¿Murió?
No se murió. Se perdió.
-Pero la atropelló un auto. -¿Gagarin está muerto?
Sí. Murió en un accidente aéreo.
No, no murió. Se perdió en el espacio.
Me tienes harto. Si chocas en un auto, te mueres.
Si se estrella el avión, te mueres...
y los periódicos lo publican.
-¿Cuánto cuesta una TV? -Te daré buen precio.
Mi papá está en el mismo negocio.
Tenemos muchas cosas como éstas en la casa.
¿Dónde andabas a esta hora?
¿Quieres matar a mamá?
¿Quién te crees que eres para gritarme? ¿Mi papá?
-¡No eres mi papá! -¿Dónde estuviste?
Salí temprano porque los demás niños...
no querían jugar conmigo...
fui a caminar y se me fue el tiempo.
También fui a una tienda y pregunté cuánto cuesta una TV.
Una tienda como la que tenía papá.
Papá no tenía una tienda. Él viajaba.
-¿Y qué era su auto? -Eso no es una tienda.
Es como una tienda. Me lo dijo muchas veces.
¿Qué te importa cuánto cuesta una TV?
No tenemos dinero para comprarla.
¿Por qué trajiste eso aquí?
Tenemos que arreglar el auto.
El taller no las guardará.
¿Por qué no a tu casa?
Porque mamá se dará cuenta.
Debe darse cuenta.
Tarde o temprano lo hará.
Todavía no sé lo diré.
Ni siquiera sabe quién es quién.
No estará aquí mucho tiempo.
Se lo venderé a algún colega.
Sé que les interesa.
Dáselo para las viudas y huérfanos.
-¡No hables así! -Conseguiré empleo.
No necesitamos ayuda de nadie.
¡Dije que no!
Teodosio, no quiero esas cosas aquí.
Llévaselas a tu madre, escóndelas...
-y miéntele. -Se dará cuenta.
Se comporta rara, pero comprende.
Entenderá.
Hoy me preguntó:
"¿Por qué no escribe?"
Sólo esto.
El resto, llévatelo.
¿Por qué no lo subimos al cuarto de lavado?
Querida madre:
No estoy harto de ti.
Te veo cada vez menos...
pero de hoy en adelante no te veré para nada.
No significa que no te quiera.
Sólo te lo demostraré de otra manera.
Me mudé. Con los niños. Vivimos en una isla...
en una casita en la playa.
Es de madera.
Café oscura. Con grandes troncos de árboles cortados.
Hay puertas con mosquitero por toda partes...
que crujen cuando las abres o la cierras.
Desde que era niño, adoro ese sonido.
Y cuando se levanta viento, la arena forma dunas.
Debes cerrar los ojos fuerte para poder ver después...
cuando el viento deja de soplar.
Los niños no han aprendido a cerrarlos con rapidez...
y corren por gritando, con los ojos llenos de lágrimas.
Pero cuando les pregunto si quieren volver...
al departamento y a su antigua escuela, dicen que no.
Y me miran con lágrimas en los ojos.
No lágrimas verdaderas, sino lágrimas por la arena.
Su madre está más calmada.
Ya no peleamos como antes.
Y cuando lo hacemos, no peleamos frente a los niños.
Cada vez que llega con enormes bolsas de papel...
que hacen un bonito ruido cuando hurgas dentro de ellas...
y saca muchas latas, carne y vegetales...
y fruta y mariscos y pescado y huevos... "
Háblame.
CHRISTOS MANOLOPOULOS
Te ayudaré a empacar todo.
No. No quiero que toquemos nada todavía.
¿Por qué? No lo entiendo.
Porque no quiero que toquemos nada todavía.
¡Y yo no quiero recordarlo ya!
Perfecto, entonces dime.
¿Qué quieres que hagamos?
¿Esto lo que quieres?
Lo siento.
Dame un poco de tiempo. Lo superaré.
No soporto verte así.
Me sentiré mejor si sé que estás en la escuela...
y todo está como era antes.
No quiero regresar a la escuela.
Buscaré empleo.
Ni se te ocurra a tu edad, ¿me escuchas?
Recibimos una carta.
-¿De quién? -¿Cómo que de quién?
-De tu hermano. -lmposible.
-Aquí la tengo. -Déjame ver.
Ábrela.
Léemela.
¿No puede esperar, mamá? Ahora estoy cansado.
¡Léemela ahora!
¿Dónde estabas?
Trabajando.
Dije que me la leyeras. ¿Adónde vas?
Tenemos mucho trabajo hoy.
Estoy encerrada aquí todo el día, sola, como prisionera.
¿Qué haces aquí arriba?
Baja y hagamos tu tarea.
Estoy escribiendo.
Me gusta más estar aquí. ¿A ti, qué te importa?
Baja y te leeré una historia.
-¿No te gustaría? -Sabes que no lees bien.
Hagamos el intento. Si no te gusta mi voz, me detendré,
Te lo digo de una vez:
No me gusta tu voz.
¿Por qué no te gusta mi voz?
Es muy aguda, como de niña.
¿Qué tienes contra las niñas?
¡Me molestan!
Toma, ponte esto.
Con toda esta charla, olvidé qué estaba escribiendo.
-Ya te acordarás. -¿Crees que es tan fácil?
¿Me lees lo que escribiste?
Tu maestro dice que escribes ensayos muy hermosos.
Eres muy malo en matemáticas, pero escribes buenos ensayos.
-¿Cuándo te lo dijo? -Ya hace tiempo.
Sólo lo dices para que te diga qué estoy escribiendo.
Te torturaré hasta que me lo digas.
Tú ganas.
Voy a bajar.
Pero baja antes de que llegue a 40.
¿De acuerdo? Si no, estarás en serios problemas.
La casa vecina está muy lejos y las tiendas también.
"Luego el niño infla las bolsas de papel...
las revienta contra la pared y se ríe."
"No deja de reírse."
"Todos estos años y jamás se cansa del mismo juego."
"Tiene mucho apetito y come todo el tiempo."
"Si lo vieras, no lo reconocerías."
"Ha crecido tanto que ya le quedan mis trajes."
¿Cuánto cuesta una TV?
¿En cuotas o en efectivo?
En cuotas.
Me das un pequeño pago inicial, te llevas la TV...
para que puedas ver el alunizaje...
y cada mes, me pagas lo que puedas.
No lo sé. Debo preguntarle a mi esposo.
Su esposo no se opondrá. Bueno, si la quiere...
Da igual, nunca está en casa y no tiene ni voz ni voto.
Mis hijos me dice que es el mejor regalo que les he dado.
¿Es casado?
Muy casado. Y tengo dos niños.
El más chico es más listo.
No los compare.
No es correcto.
¿Qué te pusiste?
¿Has estado revisando mi ropero?
No es tuyo. También es de papá.
Deberíamos llevarlo para que te lo ajusten.
No quiero que le hagan nada a este saco.
Creceré y me quedará.
Tendrás que esperar un rato.
No me molesta esperar.
Papá también los usa sueltos.
No puedo respirar aquí.
Quiero que me lleves a caminar.
Pero está oscuro.
¿Adónde iremos? No veremos mucho.
-¡Vamos! -¿Estás segura, mamá?
¡Sí!
Regresemos, mamá. Estamos bastante lejos de casa.
No, un poco más.
Dime...
-¿cómo está mi hijo? -Bien.
Acabamos de leer su carta.
Yo soy la que lo alejó.
Tú eres todo lo que me queda.
-¿Qué pasa, Aris? -Nada.
¿Y por qué vino el padrino?
-Te estoy hablando. -Y te estoy contestando.
¿Qué harás con el auto de papá?
Trataremos de venderlo. Tenemos necesidades.
Birbilo le pertenece a papá.
¡Cuando vuelva, los mandará a la cárcel, a todos!
¿Qué vamos a hacer con el chico?
No quiere creerlo.
¿Y tú?
¿Yo, qué?
Estoy a punto de enloquecer.
Papá está muerto y no regresará.
Ha estado muerto por dos semanas.
Venderemos el auto, te guste o no.
Debes aceptarlo.
Ya que quieres saber, papá se fue de viaje.
¡Y sólo me lo dijo a mí!
¿Me escuchas?
¡Sólo me lo dijo a mí!
¿Sigues aquí?
La anciana te buscará.
Tu tío está intentando ayudar. No le hables así.
Sácanos una cerveza del refrigerador.
Lo siento.
También es difícil para mí.
Era la única compañía que tenía.
¿Alguna vez te hablaba de mí?
Querida madre:
Los chicos no me dejar vender el auto.
El pequeño más que nadie.
Dice que lo pintará de colores brillantes...
y le quitará las ruedas para que no se lo roben.
Meterá un colchón para dormir en él.
Le pondrá una maceta encima para que de afuera...
parezca un balcón.
Le pegará sus clásicos ilustrados...
favoritos en el techo...
para no tener que contar ovejitas para dormirse...
o para no tener que sostener un libro.
Mirará el techo...
mientras sus ojos estén abiertos, leerá...
y tarde o temprano, se quedará dormido.
Compré un barco.
Le metí cosas y voy a trabajar en él.
Aquí hay mar por todas partes y las casas están en la playa...
¿qué haría yo con un auto? Es mucho más rápido así.
Cuando el mar esté agitado, ya veré qué hago.
¿Elías?
Aris.
Aris...
Despierta.
Teodosio, despierta. Elías ha desaparecido.
¿Qué le dijiste?
¡Dime!
Le dije la verdad. Le dije que papá estaba muerto.
¿Por qué no me llevas a casa? Estoy cansado.
Vamos con tu abuela.
No quiero ir con abuela.
Le dará gusto verte.
¡No me reconoce! Me confunde con otros chicos.
No te reconocerá de inmediato, pero le dará gusto...
igual que las cartas que le envias.
¿Qué postales? No lo mandé ninguna carta.
Bueno, tu abuela ha estado recibiendo cartas bonitas.
Papá escribe cartas bonitas. Puedo mostrarte una.
Tú también escribes bien.
A tu abuela le gusta.
No soy yo.
¡Bájame!
¡Dije que me bajes!
¡Mamá!
Ven, cariño, déjame verte.
Te has olvidado de tu madre.
Estás tan delgado.
Tienes que comer.
Come mantequilla.
Te prepararé unas rebanadas para que te lleves a la escuela.
Me las comeré, mamá, pero mañana.
No es Christos, mamá. Es su hijo Elías, tu nieto.
Nuestro Christos murió en un accidente automovilístico.
¡No murió!
Lo sabía.
Lo supe desde el principio.
¿Quién te los dio?
Fueron regalo de mi papá. Regresó de su viaje.
-¿Tantos? -Ayer fue mi cumpleaños.
Toma otro.
Están rancios.
Querida madre:
Algo muy malo sucedió...
aquí en la isla, que sé que te afectará.
Pero no te lo puedo ocultar, porque te digo todo.
Entraron ladrones a la casa y me robaron.
Se llevaron casi todo.
Todo lo que he coleccionando todos estos años...
ahora está en manos de otras personas...
...pero no te aflijas.
Por primera vez, me doy cuenta de algo.
Me he dado cuenta de que puedo vivir sin estas cosas.
¡Abuela! ¡Abuela, olvidaste algo!
¡Abuela! ¡Abuela, olvidaste algo!
Puedo vivir sin tener nada...
nada...
porque guardo todo en mi mente.
Lo guardo ahí y de ahí nadie se lo puede llevar...
porque me doy cuenta de que es el mejor escondite.
¿Me leerías esta carta de nuevo, por favor, hija?
Y si alguna vez quieres esconder algo realmente bien...
guárdalo ahí para que nadie pueda tocarlo.
Claro que debes tener cuidado de no esconder muchas cosas.
Pues no cabrá todo.
Y lo que está amontonado se saldrá y se perderá.
Te he extrañado todo este tiempo.
y te prometo que volveré. Siempre cumplo lo que prometo.
ALUNIZAJE
IREMOS A LA CABAÑA DE VERANO DEL PADRINO.
YO NO QUERÍA IR.
QUISE ESPERARTE, PERO ELLOS NO QUISIERON.
SI VIENES, AHÍ NOS ENCONTRARÁS.
TU HIJO (EL MENOR).
A LAS 3:32 VAN A LA LUNA POR PRIMERA VEZ
Me alegra que no lo vendiéramos.
Aprenderé a manejarlo.
¿Y mientras?
Lo guardaremos en la casa.
Nos iremos a un viaje largo...
a otras tierras, aguas desconocidas.
Te quedas solo en el muelle.
Mi mente siempre estará en la isla.
Ahora, el barco ha zarpado...
y la tierra se desvanece de la vista.
¿Cómo lo tomó tu mamá?
Prefiero no hablar de ello.
En fin, como lo veo yo, finalmente maduraste.
Como eras, ninguna mujer te iba a tomar en serio.
¿Qué significa madurar?
-Cuando alguien crece. -¿Cuando se pone alto?
Hay otras maneras de crecer.
Como meter a tu mamá a un asilo.
Quiero verlo.
Quiero que te detengas. Nos queda de camino.
Como quieras.
-¿Dónde nos detendremos? -Hay niños en el auto.
-No puedes beber y manejar. -Sé lo que hago.
-Ya lo vemos. -¡Aris!
Bueno, yo no me siento bien en el auto.
No es tu auto.
No. El nuestro era azul.
Paremos. Quiero ir al baño.
Sí, y yo estoy mareado.
No leas en el auto. Por eso te mareas.
Esperaré en el auto con los niños.
Me voy a bajar.
Yo no. Aquí me quedo.
CHRISTOS MANOLOPOULOS 20.1.1924 11.6.1969
Tu papá nos está mirando desde el cielo.
¿Cuál te gusta más?
Me gusta éste.
No hagas eso.
Se están tardando mucho.
¿Por qué llora mamá?
No te preocupes. A eso vino: a llorar.
¿Están durmiendo boca abajo o boca arriba?
Boca arriba para poder ver el cielo.
Y si no se pueden dormir boca arriba...
¿por qué no los acuestan boca abajo?
Ya estaban dormidos cuando los acostaron.
No te preocupes. Todo saldrá bien.
¿Por qué sólo yo? Espera a los niños.
Ven, Aris.
La familia Burrón...
menos uno.
Dame, déjame tomar una.
¡Yo contigo, padrino!
Que la tele salga en la foto, mamá.
No te preocupes.
¡Ten cuidado!
Cierro los ojos y escucho el mar.
Las olas fluyen por la arena y me hacen cosquillas en los pies.
Ahora veo una estrella fugaz y pido un deseo.
Pero no te diré qué es para que se cumpla.
Nunca debemos decirle a otros los deseos que pedimos...
porque el viento se los lleva y se cumplen...
en otra parte y no con quien los pidió.
-Hagan lugar para mí. -¡No!
-Recórranse. -¡No!
Veo que empezaste a trabajar bien temprano.
Tengo que irme en un rato. Tenía que hacerlo ahora.
Acabamos de llegar. ¿Adónde vas?
Me da lástima que esté sola allá.
No me iré mucho tiempo.
Sólo un ratito.
¿Qué le dirás a Elías?
-Piensa en algo. -¿Por qué nos trajiste aquí?
Tengo los peores recuerdos de este condenado lugar.
Padrino, ¿adónde vas?
¿Por qué se fue y nos dejó solos?
No estás solo, hijo.
Estás conmigo y con tu hermano.
Vete.
Ya no te necesito.
¿Cuánto falta?
Media hora.
Aris, ¿cuánto falta?
¿Cuánto falta?
Diez minutos.
¿A quién llamas a estas horas?
A mi amigo Andreas. ¿A ti, qué te importa?
¿Te memorizaste el teléfono de Andreas?
Sí, lo recuerdo.
21 de julio de 1969: un gran día para la humanidad.
En pocos minutos, las primeras imágenes en vivo...
Ven a sentarte con nosotros.
No quiero. Ya somos muchos aquí adentro.
Entra para que te pueda explicar.
No quiero. Puedo entenderlo.
Hijo...
esperaste tanto por esto, ¿y ahora estás molesto?
¿Por qué?
-¿Tienes miedo? -¡Déjame en paz!
¡Déjenme todos en paz!
Hola.
Espera, padrino.
Míralo en la tele. ¿Para qué encendiste eso?
Quiero todo encendido.
Radio Helénica interrumpe una vez más su programación...
para transmitir las palabras del astronauta desde la luna.
Un pequeño paso para el hombre.
Un gran salto para la humanidad.
Déjalo, prefiere estar solo.
¿Adónde te vas?
Tengo prisa. Me voy a la luna.
Si tienes tanta prisa...
¿Por qué tardas tanto en rasurarte?
Nunca salgo de casa sin rasurarme.
Hablas tanto que me corté.
¿No te despedirás de mí?
Ya soy grande. No necesito besos.
Es para decirte si pica tu barba.
Cuando regrese, habré crecido aún más.
Haz una marca para que te crea.
¿No saldrás a decir buenas noches?
Léeme el final.
Creí que no te gustaba mi voz.
¿Prefieres que lea tu hermano?
Quiero que tú lo hagas.
¿Entro?
Hazlo desde afuera.
"Había sólo un hombre que no quería admitir...
que la situación era desesperada."
"Sólo él tenía confianza."
Más rápido.
"Y ese fue su devoto amigo J.T. Maston."
"No los perdía de vista."
Más fuerte.
"Ni bien la luna se elevaba por encima del horizonte...
él la enfocaba en el campo de su telescopio y observaba...
incansablemente el pasaje del proyectil...
en su disco plateado. Y el hombre digno...
"permanecía en comunicación perpetua...
"con sus tres amigos...
"a quienes no perdía la esperanza de volver a ver.
"Esos son hombres listos, decía.
"Verás que un día, saldrán bien."
Intenta dormir.
-Buenas noches. -Buenas noches.
Elías...
No puedo verte, papá.
¿Y eso te asusta?
Sí.
Trata de escucharme.
Te escucho.
¿Hace calor ahí donde estás?
Mucho calor.
¿Por qué tienes miedo de abrazarme?
Porque estoy lejos y mis brazos no te alcanzan.
Si estás tan lejos, ¿cómo es que puedo oírte?
¿No dijimos eso ya?
La voz viaja más rápido.
¿Tu voz llegará primero y después tú?
QUERIDA ABUELITA:
PAPÁ MURIÓ AYER VIENDO EL ALUNIZAJE.
NUNCA VI UN HOMBRE TAN FELIZ.
ATTE: ELÍAS
A MIS PADRES...
QUE ME ENSEÑARON TODO EXCEPTO A DECIR ADIÓS.