Tip:
Highlight text to annotate it
X
Día Uno
6:30
Dios los perdonará.
Los va a perdonar y dejará
entrar en el cielo.
No puedo vivir con esto.
Anthony, no juegues en la fogata.
¡Anthony! Muy bien. ¡Chico!
Vamos, ¡entra!
¡Anthony! ¿Todo bien?
Hazme un favor, necesito que
vayas un momento a la tienda.
- Tengo que ir ver al tío Lenny.
- Son sólo cinco minutos. Ven aquí.
Ese es uno, hermano.
- ¿Todo bien?
- Bien.
Tengo unas tabletas muy buenas.
Dos por 15 libras.
Es un buen producto.
Que lo disfrutes.
Estupendo, hombre. Hasta luego.
- ¿Necesitas algo?
- ¿Cómo?
- ¿Qué mierda estas mirando?
- ¡A ti, hijo de puta!
Nos vemos.
No puedo hacer esto.
No puedo.
Está bien. Nos vemos.
Sonny.
- Quieres una raya de coca.
- No, estoy bien.
Yo probaría la cerveza
antes de beberla.
- Vi a Gina.
- ¿De veras? Buen tipo. Reparte...
Tenía la falda bien corta.
Iría mejor desnuda.
Esa falda va a estar en
el suelo esta noche.
Nos vemos luego.
- No dejes que te pillen.
- Está bien.
Disculpa lo que sucedió hace un rato.
Perdí la cabeza.
No sé por qué lo hice.
- Estoy avergonzado. Estuve mal.
- Está bien.
- ¿Cómo te llamas?
- Herbie.
- No, ¿cómo te llamas?
- Así. Me llamo Herbie.
No era yo. Disculpa.
Estoy avergonzado por haber
perdido el control.
- Déjalo correr.
- Sí.
Olvídalo.
Me pusieron sobre un espejo
y me filmaron.
- La vida es dura.
- ¿Aún está viva?
A Jamie y Rebecca les gusta gozar en la
ducha y quieren que te unas a ellas.
- Yo me uniría, si tuviese ducha.
- Escucha esto: "Adoro los penes ingleses".
Tienen unos penes muy ricos.
- Hoy no Frank, gracias.
- Herbie, estúpido.
Es Herbie.
A Janet le encanta disfrutar al fresco.
¿Por qué no unirse mientras
se abre al aire libre?
¿Al fresco? Es por atrás, ¿no?
¿No es ***?
- "¿Te gustaría joder tetas?"
- No, gracias.
Adoro comerme su polla y
sentir sus bolas en la cara.
- Hey, estoy tenso, tengo algo de mercancía.
- Bien, cuida esto.
- Vamos a probar la mercancía de Sonny.
- Necesitas relajarte un poco.
No te pases.
- Ya es suficiente.
- Prueba la mercancía.
- Yo no quiero, tío.
- Yo no quiero ácidos. Es una mierda.
Hoy estuve en el pub.
Escucha, Tuff, estuve en el pub.
Estoy escuchando, estoy escuchando.
Haciendo negocios.
Dejé a alguien fuera para que vigilara.
Entonces entré y vi a un
tipo mirándome.
Le fui a preguntar que quería.
El me miró furioso, realmente me
asustó. Después yo le digo:
¿Qué estas mirando?
Y él me dice: A ti, hijo de puta.
- ¡No te creo!
- En serio, hombre.
Fui hasta el club a hablar con Sonny.
Y cuando salí, por atrás,
donde están las escaleras,
iba a hablar por teléfono y, de repente,
el sujeto está enfrente de mí.
Me quedé de piedra.
Me asusté. ¿Entiendes?
- Y qué, ¿le diste una paliza?
- No, porque me pidió disculpas.
Espera. ¿El tipo fue a hablar
contigo, te amenazó y...
después de un rato...
Os dais la mano?
- Sí que es raro, ¿no?
- No, el raro eres tú.
- ¿Sabes quién es ese tipo?
- ¿Quién?
Pasé todo el día pensando en eso.
¿Sabes quién era?
- Un loco de atar, ¿no?
- No.
El hermano de Anthony.
Era el hermano de Anthony.
- Me quiero ir a casa.
- Dije que no. Haced sitio.
Así, no me pongas nervioso.
- Tengo que irme.
- Ni lo pienses.
No me gusta que las personas
sean maleducadas.
Disculpa que te haya golpeado.
No quise hacerlo.
- Ya lo sé, no me hiciste daño.
- No sangro, ¿no?
Él está bien, ¿no lo está?
Es un hijo de puta ignorante.
Esto te va a ir bien. Vas a quedar
como un caballo.
Me tengo que ir, Sonny.
No quiero eso.
- No, no, hazlo por mí.
- ¡Hijo de puta!
Escúchame. ¿Crees que
yo te haría quedar mal?
No soy como esos cerdos mugrientos.
Está bien. ¿No es cierto?
Espera, no quiere mas.
No, él no quiere mas. ¿Quieres?
No.
Estás viendo todo oscuro, ¿no?
¿Estás viendo todo oscuro, Anthony?
El retrasado está paranoico.
Saca las manos de la gorra.
Fue extraño, hoy, ir a la ciudad.
¿No es cierto?
- No ha cambiado, ¿verdad?
- No, sigue siendo una cloaca.
Ya sabía que no iba a cambiar.
- ¿Qué son esas rayas en el pelo?
- ¿Esto?
- Tú me las hiciste.
- Estoy seguro de que yo no las hice.
- Las hiciste.
- No las hice.
- Cuando me lo cortaste.
- ¿Quieres parecer un gangster?
- No. Lo voy a dejar crecer de todas formas.
- ¿Hasta dónde?
- No lo sé. Largo.
- ¿Cómo Bon Jovi?
¡No!
Tengo que volver a la ciudad
a resolver unos asuntos.
No quiero ir, Richard.
No tienes que hacerlo.
¿Esto es la mercancía de Sonny?
Se va a poner furioso.
No vi nada.
Piensa en Sonny y Cher.
Espera. Vamos a hacer
un experimento con la mezcla.
Fuiste elegido como el
astronauta principal.
Danos tu opinión de experto.
Vamos, prueba.
¿A qué sabe? Vamos. Déjame
entrar en tus pensamientos...
- Es interesante.
- Dilo rápido, sin pensar.
Tal vez... ¿Imperio Bizantino?
- ¿Del Imperio Bizantino?
- Te doy una pista: Italia.
Italia... Ahora que dice eso,
tengo un...
- Es para los italianos.
- Aires de montaña.
- Piensa en pizza. Aceitunas.
- ¡Queso parmesano!
¡Hijo de puta!
Bien, me voy.
- ¿Seguro que estás bien?
- Si, todo controlado.
- ¡Cuidado con mis cortinas!
- ¡Estoy bien! Nos vemos.
- Hasta luego. Tened cuidado.
- Está bien.
- Dale un abrazo a Sonny.
- Está bien.
¿Este chico está mal?
¡Joder!
¡Mierda!
¡Mierda! ¡Tuff! ¡Tuff!
Hay un hombre en la puerta con unos ojos
enormes. Parece un elefante.
¡Estaba ahí en la puerta!
¡Mierda, vamos!
Aquí había un hombre.
Ven aquí.
Tenía una cara extraña. Con unos
ojos enormes. ¡Parecía un elefante!
- ¿Dónde estaba?
- Ahí, en la puerta.
Con uniforme completo
y unos ojos enormes.
¿Crees que es divertido, Herbie?
Nos hiciste correr como tontos.
- Estás completamente loco.
- ¡Mira como estoy yo!
- ¡No lo estoy inventando!
- ¡Parad!
¡No lo estoy inventando! ¡El estaba ahí,
con unos ojos enormes!
- Hoy voy a dormir aquí.
- Tú no te quedas en mi casa.
Vamos, deja que me quede aquí.
No haré nada malo.
¡Toma tus cosas y lárgate!
- ¡Mierda!
- ¿Qué mierda es esto?
¡Mirad el apartamento!
¡Te vamos a encontrar!
- Dónde está la mercancía de Sonny?
- ¡Eso es lo que no sé!
¡Vamos a encontrarte!
- ¿Dónde está? Estaba encima de la mesa.
- ¿La mercancía de Sonny?
Escuchad. ¡Estamos jodidos!
- ¿Estás seguro de que no está aquí?
- ¡Busca en tus bolsillos!
- ¡Yo no me la llevé!
- ¡Busca en tus bolsillos de nuevo!
Tal vez se cayó entre
las almohadas del sofá.
- ¿Cómo se llama?
- Cynthia.
No, Ruby. ¡Ruby!
Tiene un diente roto.
Es un perro.
¡Hablé dos horas y media con ella
y dejé que se fuera!
¡Te quedaste dormido, te dormiste!
No dormí nada.
- Así fue, entró y te dormiste.
- No, estaba descansando los ojos.
Día Dos
7:30
- Apágalo.
- A mí me estaba gustando.
- Es mejor hablar con él, Herbie.
- ¿Es necesario que le cuente?
- Es tu historia.
- Lo sé, pero otro se lo puede contar.
- ¡Nosotros no sabemos la historia!
- La mercancía desapareció.
Fin de la historia. Punto final.
- Va a pensar que lo engaño.
- Cuéntale primero las malas noticias.
- No puedes hacer nada.
- Háblale de la droga. - Se pondrá furioso.
Dile que desapareció. Que asaltaron
la casa de Tuff y que pintaron las paredes.
- Háblale del elefante. - ¿El elefante?
- No hables del elefante.
No hables del elefante, Herbie.
En serio.
Llama. Está ahí.
Sonny, hubo un problema.
Tengo que contarte una cosa.
Está enojado por algo.
- Volved mas tarde.
- No vamos a volver.
¿Quién estaba aporreando la puerta?
¿Qué sucede?
Yo no estaba aporreando la puerta.
¿Y bien?
- ¿Estás bien?
- Lo estoy. ¿Qué queréis?
- Necesitamos hablar de un asunto, dentro.
- ¿Hablar? ¿De qué?
- ¿Podemos ir adentro?
- Mejor entramos.
- No tardamos nada.
- Entrad.
- ¿Quién golpeaba la puerta?
- No sé. Yo no fui.
- Herbie, ¿estabas golpeando la puerta?
- No, no di puñetazos en la puerta.
- Voy a preguntarte otra vez.
- No fui yo. No di en la puerta.
Malditas píldoras y todo eso.
¿Cuántas píldoras? ¿Qué son?
¿Tomaste algunas?
¿Sabes por qué les dan
drogas a los niños?
Para poder controlar sus mentes.
Esa gente tiene debilidad mental.
No son ni animales. Al carajo.
Pondré todo adentro...
Escúchame.
¡Eso es ácido, mierda!
- ¿Qué vas a hacer con eso?
- Voy a darles una dosis extra.
Los voy a mandar al espacio.
A un espacio de donde
no van a volver, chico.
- Bastardo. Entró en la casa.
- ¿Viste lo que le hizo a la cara de Sonny?
Entró aquí y le puso así la cara.
¿Cómo es que pudo hacerlo? Es extraño.
Si consiguió entrar aquí y hacerlo...
Puede hacer lo que quiera. Está
entrenado, hombre. Te lo dije.
- Sonny no nos creerá la historia.
- Está furioso.
¡Ahí viene!
Desapareció todo.
Ahí queda un poco.
Pensé que teníamos un acuerdo.
¿Cómo, un acuerdo?
- No fuimos nosotros.
- ¡No lo hicimos nosotros!
Alguien entró en mi casa
y lo destruyó todo. Pintaron las paredes.
Rompieron las lámparas.
¿Tocaste mi mercancía?
¿Usaste mi mercancía?
Salimos, dejamos la mercancía encima de la
mesa y cinco minutos después...
No fue eso lo que pregunté.
Pregunto si tocaste la mercancía.
No, no usamos tu mercancía.
¡Nosotros vendemos! Yo no la toqué.
- ¿Tuff?
- Yo no la toqué.
Él le vio la cara. Habla, Herbie.
Eso es lo que digo. Este tipo
nos sigue todo el día.
Salí de la casa de Tuff,
y vi un elefante...
¿Elefante? ¿Crees que soy
estúpido? ¡Un elefante!
Habla, deprisa.
Estábamos en el club, dijo eso
y otras cosas, y me siguió...
- ¿Y qué te dijo?
- Me llamó hijo de puta.
Y lo vi más temprano ese día, compadre.
En el club, cuando fui a hablar contigo.
- ¿Él estaba en mi club?
- Estaba. En el fondo.
- ¿El mismo tipo?
- El mismo tipo.
Estuve pensando en eso el día
entero, porque es extraño.
Fui a la casa de Tuff para relajarme,
para pensar mejor.
Cuando bajé, vi una cosa enfrente.
Ahí mismo, en el cristal.
- ¿Qué era?
- Como un elefante.
¡Basta de elefantes! Te dije
que dejaras de hablar de elefantes.
Mi problema es que mi mercancía
desapareció. Y tú hablas de elefantes.
Despacio, con calma,
dime de qué se trata y lo arreglamos.
¿Quién es el elefante?
Es el hermano de Anthony.
Te juro, hombre. Te juro que
es el hermano de Anthony.
Vienes a mi casa, hablas conmigo
y te haces mi amigo.
¿Y luego dejas a estos jodidos idiotas
que te toquen y te usen?
¿Cuál es tu problema? ¿Sabes por qué
tu hermano se fue de aquí?
Porque eres un retrasado.
Eso le dijo al vecindario.
"Mi hermano Anthony es un retrasado."
"Por eso, me voy al servicio,
para alejarme de él lo más que pueda."
Eres muy difícil de tratar, Anthony. Si
estás aquí, tienes que seguir las reglas.
No puedes hacer esas estupideces,
no es justo. Me perjudicas.
Ahora el juego es éste: Anthony
chupa la polla de Sonny.
Pongo esta gran polla en tu
boca y la chupas. ¿Quieres jugar?
Si no quieres, ganas un premio
sorpresa. ¿Qué prefieres?
Tienes tres segundos para responder.
O me la chupas o ganas un premio
sorpresa. ¿Qué es lo que quieres?
- Uno, dos… ¿Qué prefieres?
- Quiero el premio sorpresa.
Eres un maldito idiota.
- ¿Funciona?
- No, es una mierda.
- Es una pena.
- No te subas.
- ¡Mira esto!
- Creo que podría usarlo... para algo.
- No está afilada.
- Es vieja.
¿Lo viste?
Bueno, no, en realidad no lo vi.
Pero Herbie lo vio. Estaba muy asustado.
- ¿Lo viste?
- Yo no lo vi.
Cuando lo hizo, nosotros estábamos
fuera. Herbie fue el único que lo vio.
¿Cómo entró aquí?
¿Me entiendes? Es un hombre inteligente.
¿Cómo entró? Entró y salió
de la casa de Tuff en tres minutos.
Disculpad por entrar así.
¡Sólo quiero hablar unas palabras
con estos tres!
- ¿Cuál es vuestro problema?
- Teníamos un trato.
- No hemos hecho nada.
- ¿Entonces, que significa esto?
- ¿Cuál es la gracia?
- No sé qué es eso.
¡Cuesta 500 libras!
¡Espera!
Escuchad, calmaos. ¡Callad!
- ¿Qué fue lo que pasó?
- Yo voy a contar lo que pasó.
Herbie dice que tenemos una visita
en la ciudad. Diles de quién se trata, Herbie.
El hermano de Anthony ha vuelto.
Espero que estés mintiendo.
No. Es como un comando, hombre.
Salió por la ventana.
Espera. ¿Es eso cierto, Sonny?
¿Es verdad, o no?
- ¿Quién tendría el valor de hacer esto?
- ¿Qué es lo que pone?
- No me interesa lo que pone.
- ¡Para, pedazo de mierda!
¿Y la chica?
- ¿Patti?
- ¿Patti?
- ¿Dónde está?
- ¿Alguien la ha visto?
Pues alguien abrió la boca.
Debes estar bromeando. No voy
a joder con un retrasado.
Sólo una vez.
No, no lo haré.
¿Ahora, puedo bajar?
Si es esa tu decisión, ¿qué puedo hacer?
- Le diste mis llaves a alguien. - ¿Qué
llaves? - ¿Qué hacía él en mi casa?
¿De qué estás hablando?
Sal ya de mi casa.
Si le haces algo a mi hija...
Vas a hacer lo que te digo.
Dime la verdad.
Sin rencor. Por favor...
- Tuviste suerte.
- ¡Púdrete!
Está diciendo la verdad.
- ¡Vaca! ¡Es sólo un *** polvo!
- Un *** polvo con un...
Déjanos en casa.
Vosotros no vais a ninguna parte.
Tenemos cosas que hacer.
¡Para el coche! Para, ahí está.
Ve para allá, hermano.
¡Vuelve, vuelve!
Quedaros aquí, ¿de acuerdo?
Yo lo haré.
Hey, hombre, ¿Cómo estás, Rich?
¿Todo bien?
- Los chicos tuvieron una idea ridícula...
- Sí, fui yo.
¿Tú? Ya me parecía.
¿Y qué estás haciendo?
- Ando por ahí.
- ¿Por ahí? ¿En mi casa?
¿Pintas siempre a los hombres,
como a las mujeres?
¿Y qué estás haciendo?
- Eso es problema mío.
- No cuando entras en mi casa.
- ¿Dónde te estás quedando?
- En la hacienda de los Motsons.
- Me vendrás a ver, ¿verdad?
- Tal vez vaya.
No me tienes miedo, ¿verdad?
- ¿Por qué no le pega?
- Lo está probando. Cállate.
- Me estas poniendo nervioso, Richard.
- Y deberías estarlo.
Si yo fuera tú, entraría
en el auto y saldría de aquí.
Y reuniría a todos los sicarios y todo
lo que pudiera ayudarme…
… porque voy a acabar con todos vosotros.
- No me gusta que me amenacen. Richard
No son amenazas. No se trata de palabras.
Te observé mientras dormías,
te miré el maldito cuello,
y estuve así de cerca de cortarlo.
Te tengo aquí.
Así que entra en el coche y lárgate.
Ven a buscarme tú primero.
Quizá lo haga.
- ¿Qué está pasando?
- Ya viene para acá.
¿Sólo eso?
No se va a ir, muchachos... Es simple.
Lo vi. Lo miré directo a los ojos…
… no es el mismo tipo que cuando se fue.
- ¿Nos mencionó?
Si. Nos invitó para
que lo visitemos cuando queramos.
Dijo: "Ven a visitarme.
Y trae a los muchachos."
- Poético, ¿verdad?
- ¿Nos invitó?
- ¿Dónde está?
- En lo de Motsons.
¿La granja?
- ¿Qué quiere que hagamos?
- No sé. Creo que deberíamos ir y...
lo sacamos de la maldita casa,
y yo disparo.
¿Vas a matarlo?
Si alguien tiene una idea mejor,
me gustaría oírla.
¿Cómo vamos a hacerle salir?
Puedes decirle: "Por favor, sal,
te voy a disparar". Dímelo tú.
Dile que queremos un trato, ofrécele
dinero. Creo que sólo llamaré a la puerta...
Lo sacaré, y le dispararé. Así de simple
- Esto es grave, Sonny.
- ¿Y qué podemos hacer?
- Advertirle o algo.
- No se va a ir. Tiene que morir.
No puedo creer esta mierda, hombre.
Llevo mucho despierto.
¿Tienes algo de comida o sándwiches, John?
- Coge algo del bar.
- Tráeme también, ¿quieres?
Bueno, lo haré.
Sabes que estoy contigo, Sonny.
Siempre.
Esto está jodido.
Oh, maldita sea, hagamos algo.
Me voy a volver loco, maldito.
Hombre, vamos. Hay que hacer algo,
cualquier cosa. ¿Cartas? Vamos.
Sonny, ¿una partida?
- Arreglado. Vamos, John.
- ¿Por qué no?
Dadme cinco minutos.
Tengo algo que hacer.
¡Sonny! ¡Sonny!
¡Es Gypo! ¡Richard!
¡Tiene que haber venido!
UNO MENOS
Oh, Dios.
¡Sonny! ¡Sonny! ¡Vamos!
Lo siento...
¡Mirad la puerta! ¡Mirad la puerta!
¡Lo haremos!
Día Tres
8:00
- Buena suerte, Al.
- Nos vemos enseguida, Al. ¿De acuerdo?
Buena suerte, Al.
- Hola, cerdo...
- ¡Tiene un hacha! ¡Una maldita hacha!
- Vamos a solucionar esto, hombre.
- Yo diré cuándo está solucionado.
Podemos resolver esto,
sólo tenemos que discutirlo.
Tienes valor para venir
a mi puerta de esta forma.
Tengo dinero para ti.
Sonny, maldita sea, clávalo, ¿quieres?
Voy a agarrar tu panza gorda
y la voy a arrastrar por el barro...
¡Le disparaste a Al! ¡Cabrón, imbécil!
¡Estúpido!
¡Arranca!
¡Al! ¡Alan!
¡Estás loco, Sonny!
¡Al! ¡Mierda, Sonny!
¡Alan! ¡Alan!
Vamos, chupa, chupa, chupa.
¿Cómo te sientes?
Quítate de mi sitio, Anthony.
Él se está recuperando.
¿No es así?
Me quedaré con él.
No, yo me quedo con él.
Estoy cuidándolo.
Vamos, quítate la ropa. ¿Quieres?
La caja de cambios se estropeó.
Estamos perdidos.
Estamos atrapados aquí, hombre.
Vamos a tener que caminar
de regreso al pueblo, ¿verdad?
¿De qué hablas, tío? Nos está esperando.
Nos va a matar, maldita sea.
- ¿A dónde quieres ir?
- Para allá.
- ¿Para dónde?
- Allí, adonde sea. No me importa, tío.
Estamos en el fin del mundo, Tuff.
¿Qué mierda es esa?
Estamos en el fin del mundo, con él.
¡Le diste a Al!
- Fue un accidente.
- Tú lo viste, Herbie. ¡Lo viste!
Herb, ven conmigo, maldición.
Herb, vamos, hombre.
- Herb, ven conmigo.
- Estamos mejor en la ciudad.
- Vamos, Soz. Vamos, carajo...
- Tuff, hombre, ¿qué voy a hacer aquí?
- Es mejor tirarse de un precipicio.
- ¡Maldita sea, vamos!
Tuff, contrólate.
Vuelve a la ciudad con nosotros.
Vámonos. Nos va a matar.
Vámonos. ¡Vamos a morir!
¡Tuff!
¿Recuerdas cuando viniste a nuestra escuela
e hiciste aquella carrera, Richard?
- Me acuerdo.
- Aquel fue un buen día.
Eras el mejor.
Hiciste más dinero que nadie, ¿verdad?
Como 300, creo.
- ¿Te acuerdas cuando jugabas al fútbol?
- Me acuerdo.
También eras el mejor, ¿verdad?
¿Quién era ese chico que enseñaba
el trasero cada vez que tenía la pelota?
Era Michael. Michael Parks.
Querían darme la mano,
¿verdad compadre?
Sí, ¿verdad? Todos te querían dar la mano.
Yo no.
Sé que tú no.
No lo necesito, ¿verdad?
Vamos a revisar la casa.
Asegurarnos de que no hay nadie.
Sonny, ¿tienes otro más grande, hombre?
Ese es el punto.
Es un cuchillo pequeño.
Nadie lo puede ver. ¿Lo tienes?
¿Sabes lo que quiero decir? Sólo ponlo aquí.
Nadie sabe que lo tienes.
Está hecho para el ejército.
- ¿Vamos a mirar arriba?
- Él está en el maldito ejército, ¿verdad?
- ¿Todo bien, Soz?
- No hay nadie aquí.
Sonny, ¿todo bien?
Aquí, no hay nadie aquí.
- Aquí no hay nada...
- ¿Estás seguro?
Maldito Tuff, hombre.
¿Para qué correr? Qué tonto.
- ¿De veras crees que vendrá al pueblo?
- Sí, te apuesto a que aparece en un rato.
No debimos dejar al maldito, ¿verdad?
No caminaría tan lejos, ¿verdad?
- ¿Quieres más, Gage?
- Sí, sírveme más.
Hasta la línea. Ves la línea.
No puedo dejar de pensar en esto.
- Este soldado está podrido, hombre.
- Se le nota el gusto...
Maldito infierno. Lo siento en mi cerveza.
- No me siento bien aquí sentado...
- No voy a ir abajo solo.
¿Tienes más que lavar?
Bueno, eso es para reciclar.
¿Quieres lavar todo esto?
- Esos son para lavar.
- Están limpios.
- Están limpios.
- No huelen, compadre.
Oh, no. Ese huele mal.
¡Esta mierda sí que es pesada!
Podrías, si quisieras. Se guardan
las latas...
Las lavas y podrías usarlas.
- Para cerveza.
- Venga.
Solía hacer esto todo el tiempo, sabes.
¡Vamos!
Si tienes el plástico, ves,
el plástico es 5...
No, 3 peniques, y el vidrio es 5. Si pones
el de 3 en el 5 pierdes tu maldito dinero.
Debes poner los de 5 y los de 3 por separado.
Recuerda, el vidrio es 5.
- ¿Diste de comer a los peces?
- Les di esta mañana.
¿Mi cara se ve bien?
No me siento bien, tío.
Sácalo. No lo quiero.
Sonny, ¿cómo se ve mi cara?
La noto... como floja.
¿Está manchada o algo?
Está un poco rojo, el ojo.
Yo que tú me cuidaría ese ojo.
- ¿Diste de comer a los peces?
- Les di esta mañana, hombre...
¿Adónde vas?
Ayuda. Socorro.
- ¿Eres el diablo?
- Desearía serlo, maldita sea.
- ¿Jesús?
- No.
¿Eres un demonio?
¿Jesús?
¡No me toques!
¿No te gustan las fiestas?
Levántate y baila.
Levántate y baila en mi
fiesta. ¡Mueve las caderas!
¿Creíste que te saldrías con la tuya?
Lo hiciste, maldita sea, hombre.
Ven conmigo.
Arriba. ¡Siéntate!
Siéntate, hombre.
Presta atención.
¡De pie, ahí!
¿No sabes quien soy?
- ¿Puedo ir?
- Bueno, irás.
Irás.
- ¿Tú vas a ir?
- No.
Lo voy a hacer todo por ti.
Te voy a quitar todo.
Mírame así. Así, compadre.
Así. Quédate ahí y no te muevas.
Te voy a matar, maldita sea.
Quédate ahí sentado.
Hay algo que quiero mostrarte.
Entre nosotros.
Quédate ahí.
Límpiate la nariz.
Ábrela.
Ábrela.
¿Qué es?
Ábrela.
¿Quién es?
No es Tuff.
Cuesta creerlo, ¿verdad?
¿Quieres darle un beso?
No.
Dile cualquier cosa.
Es tu última oportunidad.
¿Tienes miedo?
- ¿Quieres que la cierre?
- Lo siento, hombre.
Sí. Es duro perder a alguien
tan cercano, ¿verdad?
- ¿Quieres que te lo muestre?
- Sí...
- ¿Por qué hiciste eso?
- Trató de escapar.
¿Sabes por qué estás vivo?
- Eres un buen hombre.
- Sí.
Hagamos un trato. Me dices lo que yo
quiero saber y te dejo vivir.
¿En serio?
Hay otro más.
¿Dónde está?
No sé dónde vive.
¡No, chico!
Son ellos, ahí.
¿Dónde estás tú? ¿Dónde estás?
- Estoy aquí.
- Sí.
- Estás aquí.
- ¿Si te lo digo, me puedo ir?
- ¿No es lo que te digo?
- Está bien.
- No sé la calle.
- No importa.
Weston.
- ¿Estás mintiendo?
- No.
- Mira que vendré a por ti.
- En serio. Sé que está en Weston.
Sabes que vendré a por ti, ¿verdad?
¿Lo sabes?
Por eso sé que
me dices la verdad.
- Ahora voy a vivir, ¿no es así?
- Te lo prometí.
- Lo hiciste, ¿verdad?
- Yo no rompo mis promesas, compadre.
¿En serio?
Ponlo ahí.
Esta vez no, chico.
Muy bien, hombre.
¿Esto era para mí?
No.
- Dime la verdad.
- No.
- No importa de todas formas, ¿verdad?
- ¿No?
No. Ahora, ya no.
- No lo hubiera hecho.
- Lo sé.
Maldita sea... Ven aquí.
Día Cuatro
7:00
¡Niños!
Venid aquí. Os dije que no tardarais
mas de una hora. ¿Dónde habéis estado?
¿Qué es eso?
- Es una máscara.
- Quítatela.
¿Qué estás haciendo con eso?
- ¿De dónde lo sacaste?
- Un soldado me lo dio.
- ¿Un qué?
- Un soldado.
- ¿Qué es eso?
- Es un cuchillo.
Sé que es un cuchillo. ¿Pero qué
estás haciendo con un cuchillo?
- Un soldado me lo dio.
- ¿Cómo que un soldado te lo dio?
- Dijo que conocía a papá.
- ¿Conocía a tu padre?
¡Mark!
Mark. ¡Ven aquí ahora mismo!
Vamos. Vamos a ir ahora.
¿No os tocó a ninguno?
- ¿Lo conocerías si lo ves?
- Tenía una camisa verde.
- Hola. ¿En que puedo ayudarlo?
- ¿Está Mark?
- No, salió con los niños.
- Qué pena.
¿Me puede decir su nombre?
Richard. Soy un viejo amigo.
¿Era usted en el parque esta mañana?
- ¿Estuvo con mis hijos?
- Sí, estuve.
Son unos niños estupendos.
Lo son. Hoy han sido regañados...
Llegaron a casa con una máscara
y un cuchillo. No me gustó nada eso.
Estaba romo.
Lo sé, pero fue irresponsable.
Me quedé muy preocupada.
- Es una buena madre.
- Si, soy una buena madre.
Una buena mujer.
Disculpe, ¿cómo dijo
que se llamaba?
Richard.
Le diré que estuvo aquí.
- Sí. Estaré por aquí de todas maneras.
- Está bien.
- Soy el hermano de Anthony.
- El hermano de Anthony. Está bien.
Gracias.
- ¡Hola!
- ¿Qué haces sentada ahí en la oscuridad?
Os estoy esperando.
¿Estáis bien?
Id arriba a jugar con el ordenador
antes de la cena.
- No encontramos a nadie.
- No. Él estuvo aquí.
- ¿Qué él estuve aquí?
- Apareció al poco de iros.
- ¿Y entró?
- No, no entró.
- Fue bien extraño.
- ¿Qué fue lo que dijo?
- "Dígale que Richard estuvo aquí".
- ¿Y tú no lo conoces?
Nunca lo había visto. Nunca.
Pero él preguntó por ti.
Dijo que hace unos años eras amigo
de su hermano, Anthony.
Déjalo.
¿Qué pasa?
¿Qué sucede, querido?
- ¿Qué sucede?
- Yo lo conozco.
Sé quién es.
¿Anthony?
Era sólo un chico.
Sólo un... muchacho.
Quiero decir, era un chico simple. No era...
Tenía poca cabeza,
no sabía lo que hacía.
Después de que Richard se fuera al ejército…
Anthony comenzó a juntarse con nosotros.
Sólo nos divertíamos con él,
sólo nos divertíamos, pero Sonny...
Se tomaba todo muy en serio.
Muy en serio.
Anthony no sabía lo que estaba
pasando, no sabía ni dónde estaba...
No era como nosotros,
no entendía nada. Él sólo...
No entendía nada.
Nos subíamos a una camioneta y...
repartíamos ácido y...
Y Sonny le dio un poco...
Luego vi que lo estaba pasando mal.
Podía ver la cara de Anthony,
y estaba... Estaba ido.
- Creía que no os caía bien.
- No, lo pasamos bien contigo.
Es mi amigo.
¡Es la casa del diablo!
¡No quiero ir a la casa del diablo!
¡Es la casa del diablo! ¡No!
Levántate ¡Deja de hablar del diablo!
¡Levántate!
Anthony, para de gritar. Siempre
que grites, tu madre se pondrá enferma.
Y a Richard le pueden meter una bala
en la cabeza. Y nosotros no queremos eso.
¡Si te mueves, está muerto!
¡No te muevas!
Yo fui el último en salir. Pude
haberme quedado con él.
Pero todos volvieron a la camioneta.
Lo dejamos...
Yo no quería dejarlo.
Después lo encontraron.
Se había matado.
Día Cinco
5:00
¡Levántate!
No hagas ruido.
¡Levántate!
Coge las llaves del coche.
Sin hacer ruido,
o te meto esto en la columna...
¿Te acuerdas de mí?
Sí.
¿Por qué te traje hasta aquí?
Aquí es donde Anthony fue...
¿Fue? ¿Fue qué?
Vamos, ten el valor de decirlo.
Donde se ahorcó.
¿Por qué? ¿Por qué era débil?
- ¿Por qué era un retrasado?
- No era un retrasado.
Sí. Sí lo era.
"Richard, voy contigo.
¿Adónde vas, Richard?"
Era un jodido retrasado.
Él te admiraba.
Bueno, era una vergüenza para mí.
¿Qué le hiciste?
¿Qué hiciste?
Nos...
Dije tú. ¿Qué le hiciste tú?
No las otras bestias.
No los detuve. No los detuve.
Ojalá lo hubieras hecho...
Habrías evitado una carnicería.
¿Qué quieres decir?
Están todos muertos.
Los ejecuté a todos.
Y tú eres el último.
Ahora, el monstruo soy yo.
¿Me llamaba?
Cuando lo torturabais, ¿me llamaba?
Sí.
¿Gritaba mi nombre?
Sí.
Aún lo hace.
Te quiero, Anthony.
Te quiero mucho, pero no lo puedo hacer.
No soy capaz.
Lo siento.
Toma esto.
- No.
- Tómalo.
No quiero.
Si no tomas este cuchillo voy a
hacer algo horrible con él. Tómalo.
Tómalo.
Tú tenías que ser el monstruo.
Ahora soy yo la puta bestia.
Hay sangre en mis manos.
Mira lo que me obligasteis a hacer.
Vamos.
Clávame ese cuchillo.
- No puedo.
- Por favor. No sé de lo que soy capaz.
Tengo niños.
Tengo hijos.
Sólo quiero estar con mi hermano.
¿Dónde estás?
Está bien. Está bien.
Vamos, por favor.
Mira en lo que me convertí.
Hice una cosas horribles. Por favor.
Piensa en tus hijos.
Eso es, vamos.
Vamos.
Clávame el maldito cuchillo.
No hay otra manera de acabar con esto.
Piensa en tus hijos.
Clávamelo, por favor. Vamos.
Ayúdame, por favor. Por favor.
Vamos. Está bien. Ya terminó.
Sí, sí, sí.