Tip:
Highlight text to annotate it
X
En 1609 las luces de la ciencia
empezaron a brillar.
En una modesta casa de Padua...
Galileo Galilei
se dispuso a probar...
que el Sol está quieto...
y la Tierra es la que gira,
la Tierra es la que gira.
La Tierra es la que gira.
1609, GALILEO GALILEl, PROFESOR
DE MATEMÁTICAS EN PADUA,
DEMOSTRÓ EL NUEVO SISTEMA
DE COPÉRNICO.
- ¿De dónde lo has sacado?
- Lo ha traído el cochero.
- ¿Quién lo envía?
- La Corte de Nápoles.
No quiero sus regalos,
manuscritos iluminados,
una estatua de Hércules enorme...
Nunca dinero.
¿No es
un instrumento astronómico?
Una antigüedad muy cara.
¿Para qué sirve?
Es un mapa del cielo
según los sabios de Grecia.
Podemos vendérselo a la
universidad, ahí aún enseñan eso.
- ¿Cómo funciona?
- Es complicado.
Creo que podré entenderlo.
Quizá.
Primero lo primero:
Descripción.
Hay muchos aros metálicos.
¿Cuántos?
Ocho.
Correcto. ¿Y?
Hay palabras escritas.
¿Qué palabras?
Los nombres de los astros.
¿Cómo por ejemplo?
Aquí pone "Sol"
y en la de dentro pone "Luna".
Los aros representan
ocho esferas de cristal.
Enormes globos concéntricos
donde se sujetan los astros.
Haz girar el Sol.
- ¿Ves la bola del centro?
- Sí.
Es la Tierra.
Durante dos miI años...
el hombre ha creído que el Sol
y los astros giran a su alrededor.
Papas, cardenales, príncipes,
sabios, mercaderes y pescaderas...
han creído estar en tal situación.
- ¿Encerrados?
- Sí
Es como una jaula.
¿También lo crees?
Pronto prescindiremos
de este armatoste.
¿Cómo?
Empezó con los barcos.
Antes bordeaban la costa
hasta que se lanzaron a los mares,
y se pusieron en movimiento
incluso las mentes de los hombres.
Empezaba una nueva era.
En Siena, cuando era joven,
unos albañiles trataban
de mover un bloque de granito.
Después de discutir cinco minutos,
desecharon
un método centenario...
y descubrieron un modo más eficaz
de colocar las cuerdas.
Pensé: "El milenio de la fe acaba,
empieza el de la duda".
Todo se pone en duda.
Los alumnos quieren
saber el por qué y el cómo.
Averigüemos nosotros
lo que dicen los libros.
Predigo que la astronomía
se discutirá en la plaza pública,
que los hijos de las pescaderas
irán a la escuela...
y aprenderán que la Tierra
gira alrededor del Sol...
y que los Papas, cardenales,
príncipes, sabios, mercaderes...
y las pescaderas, sus madres,
giran con ella.
Debe quedar claro que los astros
giran en la oscuridad del espacio.
Está claro que la Tierra gira
a una velocidad inconcebible,
¿nos asusta? No, nos beneficia.
¿Qué dice el poeta?
"Oh, alba temprana... "
"Oh, alba temprana del comienzo,
viento que llega de nuevas costas. "
Pero yo veo que el Sol
sale por un lado...
y se pone por otro distinto.
No está quieto, puedo verlo.
Tú sólo miras. Mirar no es ver.
Esto es el Sol.
Siéntate.
- ¿A qué lado está?
- A mi izquierda.
- ¿Y cómo llegará a la derecha?
- Poniéndolo allí, claro.
- ¿Ahora dónde está?
- A la derecha.
- ¿Se ha movido?
- Me he movido yo.
- No, se ha movido la silla.
- Pero yo estaba en ella.
Claro. La silla es la Tierra
y tú estás sobre ella.
¿Qué hace con mi hijo,
Sr. Galilei?
Tú no lo entiendes.
Y tú sí, ¿verdad?
Ayer me dijo que una pluma
cae tan rápido como una bala.
Entramos en una nueva era.
Espero que en esta nueva era
podamos pagar la leche.
Un caballero quiere recibir clases.
No le asuste como a los demás.
No pierda el tiempo con Andrea.
No le engatuses
para que te dé clases gratis.
No puede permitírselo.
¿Puedo acabarme la leche
aunque no la haya pagado?
Andrea, yo no hablaría
de nuestras ideas ahí fuera.
- ¿Por qué?
- Las autoridades no lo aceptarían.
Pero es la verdad.
El universo
de los nuevos astrónomos...
está aún basado en conjeturas.
Así que...
Quiero ser astrónomo.
- Esta casa es como un mercado.
- Buenos días, soy Ludovico Marsili.
Un momento.
¿Viene de Holanda y su familia
tiene tierras en la Campania?
Clases a diez escudos al mes.
Está bien, señor.
- ¿De qué?
- Caballos.
- Entonces serán 15 escudos.
- Muy bien.
Andrea.
Tendrá que tener paciencia.
Las ciencias no son lo mío.
Como ese instrumento
que vi en Amsterdam,
un tubo de piel
con una lente a cada lado.
Una de ellas sobresalía
y la otra era así.
Parece que una reduce
y la otra aumenta.
Cualquiera pensaría
que una cancela a la otra,
pero lo aumenta todo cinco veces.
¿Qué tipo de cosas aumenta?
Campanarios, palomas, barcos,
cosas lejanas.
- ¿Usted lo probó?
- Sí, señor.
El tubo...
¿tenía dos lentes?
- ¿Así?
- Sí.
¿Es un invento nuevo?
Debe de serlo,
empezaron a venderlo
hace unos días en Holanda.
¿Por qué quiere aprender ciencias
y no se limita a criar caballos?
Mi madre dice que es necesaria
para conversar.
¿Por qué no aprende
latín o teología?
- Venga el martes por la tarde.
- Gracias, señor.
Buenos días.
No me mire así,
le he aceptado, ¿no?
Porque me ha visto justo a tiempo.
Está aquí
el Tesorero de la Universidad.
Sr. Priuli.
- Buenos días, Sr. Galilei.
- Buenos días. Présteme un escudo.
Sra. Sarti, mande a Andrea
al óptico a por dos lentes,
estas son las medidas.
Sr. Galilei,
traigo la respuesta a su petición
de aumento de sueldo.
Siento no haber podido
conseguirlo.
Estimado señor,
¿cómo viviré con 500 escudos?
¿Y sus alumnos?
Si sólo enseño,
¿cuándo aprenderé?
Estoy en el umbral
de nuevos descubrimientos.
Mis descubrimientos
sobre la gravedad...
podrían costar 200 escudos.
Cualquiera de sus manuscritos
tiene un valor infinito.
Sólo pido 200 escudos.
Si quiere dinero y ocio
vaya a Florencia.
De Medici le subvencionará...
pero acabarán prohibiéndole
pensar en nombre de la Inquisición.
En Venecia es feliz
pero necesita dinero.
Es normal.
¿Puedo sugerir
una solución simple?
Los senadores de la ciudad
son hombres de negocios.
¿Por qué no inventa algo útiI,
que les dé beneficios?
Con las tablas
que hizo para el ejército,
hasta el general Gritti
podía hacer raíces cúbicas.
Maravilló al gobierno.
Ya veo.
Priuli,
puede que tenga algo.
Aún no está acabado.
Es usted un gran hombre,
aunque insatisfecho.
Si fuera inteligente
me pagaría por mi insatisfacción.
Principalmente
estoy insatisfecho de mí.
Tengo 46 años y no he hecho nada
que me satisfaga.
No le molestaré más.
Gracias. Buenos días.
Costaban más de un escudo,
he tenido que dejarles mi chaqueta.
¿Qué vas a hacer
sin chaqueta en invierno?
Ya nos la devolverán. Dámelas.
¿Para qué son?
Para el Senado.
Ven a ver.
Puedo leer la inscripción
de la campana:
"Gratia Dei. "
Apártate.
Nadie tiene una virtud completa,
a Galileo le gusta comer.
Esperemos que a nadie le moleste
la verdad sobre su telescopio.
GALILEO PRESENTA
SU NUEVO INVENTO...
A LA REPÚBLICA DE VENECIA.
Señores del Senado,
señores del Arsenal de Venecia,
soy profesor
de la Universidad de Padua...
e ingeniero jefe de su gran Arsenal.
Como servidor suyo...
he tenido el privilegio de poner
mis inventos y descubrimientos...
al servicio de los artesanos
y mercaderes de Venecia.
Así que les entrego
mi tubo óptico, o telescopio,
construido
en su Gran Arsenal...
de acuerdo con los principios
científicos y cristianos.
El producto de 17 años
de paciente investigación.
- Qué pérdida de tiempo, Sagredo.
- Podrás pagar al carnicero.
Sí, con esto harán dinero.
iSeñores!
Nuestra república
está de enhorabuena.
No sólo porque esta adquisición
es un triunfo para nuestra cultura,
no sólo porque el Sr. Galilei
les ha ofrecido este producto...
de su incansable cerebro...
para que puedan producir
tantos como quieran...
¿Se han dado cuenta
de que con este instrumento...
veremos a la flota enemiga...
dos horas antes
de que nos vean a nosotros?
Señores,
acepten el instrumento de manos
de la hija del Sr. Galilei, Virginia.
No sé si podré seguir
con esta farsa.
Es más que un instrumento
para hacer dinero.
Ayer observé con él la Luna.
La astronomía se ha atascado
durante tres generaciones...
por falta de algo así.
Sr. Galilei,
es extraordinario, veo
las fortificaciones de Santa Rosita.
¿Y la Luna?
Resulta que no emite luz propia.
Santo cielo.
Mi mujer dejará
de bañ*** en la terraza.
Podría costar
diez escudos la pieza.
Ludovico
ha venido a felicitarte.
- Felicidades, señor.
- Lo he mejorado.
Sí, veo que el estuche es rojo.
¿Sabes de qué está hecha
la Vía Láctea?
- No.
- Yo sí.
Felicidades, Sr. Galilei.
Con esto se asegura
los 500 escudos más al año.
Claro, los 500 escudos.
¿No es una pena
que una república...
necesite excusas para pagar
a sus grandes hombres?
¿Qué incentivo tendrían si no
los grandes hombres?
Sr. Galilei.
Felicidades.
Bien hecho.
Maravilloso.
- ¿Lo he hecho bien?
- A mí me lo ha parecido.
Están contentos con mi padre.
Ya entiendo
más cosas sobre la ciencia.
Diez de enero de 1610.
Galileo Galilei...
abole...
el Paraíso.
GRACIAS AL TELESCOPIO,
GALILEO DESCUBRE
FENÓMENOS...
QUE PRUEBAN
EL SISTEMA DE COPÉRNICO.
El borde de la curva es irregular.
A lo largo de la zona oscura
cerca de la iluminada...
aparecen puntos luminosos,
uno cerca del otro,
que se van agrandando hasta
fundirse con la parte iluminada.
¿Cómo explicas
estos puntos de luz?
No puede ser.
Es verdad, son montañas.
¿En la Luna?
Sí, montañas enormes.
Los puntos de luz son las cimas
bañadas por el Sol.
Las laderas siguen a oscuras.
Vuelve a mirar...
y verás la luz del Sol
bajando hacia los valles.
Pero...
eso contradice la astronomía
de los últimos dos miI años.
Sí. Lo que ves no lo ha visto
nadie antes, excepto yo.
Pero la Luna no puede ser
una Tierra con montañas y valles,
igual que la Tierra
no puede ser un planeta.
La Luna tiene montañas y valles...
y la Tierra es un planeta.
Otro astro más, uno entre miles.
Nosotros vemos la Luna
igual que ella nos ve a nosotros.
Nos ve a veces en cuarto
creciente, o como un semicírculo,
a veces llena y otras no nos ve.
Galileo, esto me da miedo.
He descubierto algo más,
algo aún más impresionante.
Ahí está,
su milagroso tubo óptico.
Su producto de 17 años...
de investigación...
se venderá mañana
a dos escudos la pieza.
En estos momentos
un barco holandés...
está desembarcando
un cargamento.
¿Tiene algo que decir?
Y los caballeros venecianos...
pensaban que tenían
los derechos exclusivos.
Al mirar a través de él
no tuvieron la suerte...
de ver a un vendedor ambulante
vendiéndolos en la esquina.
Sr. Priuli, gracias al telescopio
ha hecho descubrimientos...
que cambiarán
nuestro concepto de Universo.
El Sr. Galilei proporcionó
una bomba de agua a la ciudad...
y su sistema de irrigación
funciona muy bien.
¿Cómo iba a esperar esto?
No tan rápido, Priuli.
Puede que esté
tras un instrumento sensacional.
Las estrellas parecen tener
movimientos regulares.
Si existiera un reloj celeste
podríamos verlo desde aquí.
Eso podría resultar
muy útiI para los navieros.
No oiré más.
Por culpa de mi amistad por usted
soy el hazmerreír de la ciudad.
Ríase, ya tiene su dinero,
pero sepa que usted
ha destruido mi fe...
en muchas cosas, Sr. Galilei.
Este mundo me da asco.
Es muy gracioso cuando se enfada.
¿Has oído?
Un mundo sin negocios le da asco.
¿Conocías
los instrumentos holandeses?
Sí. Pero el que hice
es mucho mejor.
Además, necesitaba dinero.
El recaudador
no deja de incordiar...
y mi hija no se casará sin una dote.
Además, me gustan los libros
y si no como bien no puedo pensar.
Pienso mejor frente
a una buena comida y vino.
Si dispusiera de cinco años
únicamente para investigar...
¿Qué piensas
de la teoría de Copérnico...
de que la Tierra
gira alrededor del Sol?
Pude observar algo
con el telescopio...
que podría llegar a probarlo.
Hay cuatro pequeños astros
cerca de Júpiter.
Los vi el lunes
y no tomé nota de su posición.
El martes los volví a mirar
y se habían movido.
Tomé nota de la posición...
y ahora...
han vuelto a moverse.
Dime qué ves.
Veo tres.
¿Y el cuarto?
Aquí están los gráficos,
a trabajar.
El cuarto debe estar detrás
de Júpiter y no podemos verlo.
Significa que hay un astro pequeño
girando alrededor del grande.
Júpiter no puede estar fijo...
si hay un astro
girando a su alrededor.
¿Dónde están las esferas de cristal
donde se sujetan los astros?
No están.
No hay andamios en el cielo.
No hay nada que sujete el universo.
No te quedes como un pasmarote,
¿temes que no sea verdad?
No estoy como un pasmarote,
tiemblo porque temo
que sea verdad.
¿Por qué?
¿Qué crees que te pasará...
cuando digas que hay otro Sol
con Tierras girando a su alrededor,
que la Tierra es otro planeta,
no el centro del Universo,
que no hay nada más que astros,
que no hay diferencia
entre la Tierra y el Paraíso?
- ¿Dónde está Dios?
- ¿Qué quieres decir?
¿Dónde está Dios?
¡Ahí fuera no!
Tampoco lo encontrarían aquí
si vinieran de fuera a buscarlo.
¿Pues dónde está?
Soy matemático, no teólogo.
¡Eres humano!
¿Dónde está Dios
en tu idea del Universo?
Dentro de nosotros,
o en ningún lugar.
Hace 10 años quemaron
a un hombre por decir eso.
Giordano Bruno
habló demasiado pronto.
No le habrían quemado
si hubiera probado su teoría.
¿Crees que las pruebas
cambian algo?
Por supuesto.
Creo en el hombre y en la razón.
Sin esa creencia no podría
levantarme por las mañanas.
¿Cómo puedes confundir
la astucia del hombre con la razón?
Llaman caballo a un asno
cuando lo venden...
y al revés cuando lo compran,
pero ¿a eso se reduce?
Si dijera a la gente que una piedra
no cae, ¿lo aceptarían?
No.
La seducción de la prueba es
fuerte. Nadie se resiste a ella.
- Buenos días.
- ¿Levantada tan temprano?
Voy a maitines
con la Sra. Sarti y Ludovico.
- ¿Cómo ha estado la noche?
- Clara.
- ¿Puedo mirar?
- No es un juguete.
Lo sé. ¿Qué has descubierto?
Unas manchas en un astro.
Debo llamar la atención sobre ellas,
las llamaré Estrellas Mediceas para
contentar al duque de Florencia.
Quizá vayamos a Florencia.
He pedido a Su Alteza...
que me acepte
en la Corte como matemático.
i La Corte!
Galileo.
Querido Sagredo,
necesito tiempo para trabajar
y quiero comodidades.
Me preocupa que no me acepte.
Claro que lo hará,
con esas estrellas.
No suelo escribir
a gente importante.
¿Crees que está bien?
"Con esto me encomiendo
como fiel y devoto servidor...
que desea disfrutar con Su Alteza...
del nacimiento de una nueva era. "
El Duque de Florencia
tiene nueve años.
Lo sé.
Ya veo,
piensas que es demasiado serviI,
yo pensaba
que no lo era bastante.
El único modo de conseguir
un buen trabajo es arrastrándome.
Vete a maitines.
- No vayas a Florencia.
- ¿Por qué?
- Allí mandan los monjes.
- También hay eruditos.
Lacayos.
Les agarraré por el pescuezo
y les haré mirar por el tubo.
Se rendirán ante las pruebas.
Este camino
te llevará a la perdición.
Eres escéptico en lo referente
a las ciencias,
en cuanto a política
eres muy ingenuo.
¿Crees que los poderosos dejarán
libre a quien conoce la verdad,
aunque sea
sobre estrellas lejanas?
¿Imaginas al Papa
escribiendo en su diario:
"10 de enero de 1610:
Abolido el Paraíso. "?
Hace un rato,
cuando mirabas por el telescopio,
te imaginé en la hoguera,
y cuando dijiste que creías en
las pruebas olí a carne quemada.
Si me aceptan, iré.
PONIENDO EL NOMBRE
DE MEDICI EN EL CIELO...
INMORTALIZO LAS ESTRELLAS.
CON ESTO ME ENCOMIENDO...
COMO VUESTRO FIEL
Y DEVOTO SERVIDOR...
QUE DESEA DISFRUTAR DE
LA PRESENCIA DE SU ALTEZA,
EL SOL NACIENTE
DE NUESTRA GRAN ERA.
Su Alteza,
¿empezamos observando
los satélites de Júpiter?
Las Estrellas Mediceas.
- Siéntese aquí, por favor.
- Gracias.
No es tan simple.
Antes de utilizar su artilugio,
ruego entablemos una discusión.
- ¿Existen realmente esas lunas?
- Una discusión formal.
¿Por qué no miran por
el telescopio y lo comprueban?
- Aquí, por favor.
- Sí, sí.
¿Se da cuenta de que su teoría,
de que los astros giran en torno
a algo que no es la Tierra,
sin nada que los sostenga,
contradice la sabiduría antigua?
Sí.
Mi amigo duda
de la existencia de las lunas,
yo, como filósofo le pregunto:
¿son necesarias?
Aristotli divin...
¿Hablemos en la lengua corriente?
Federzoni no entiende el latín.
- ¿Importa eso?
- Sí.
El debate será menos brillante.
El Universo Aristotélico, con sus
esferas de cristal y música mística,
es de una armonía
y belleza sin igual.
¿Por qué buscar cosas
que perturben esa armonía?
Alteza, ¿desea observar esos
innecesarios e imposibles astros?
Sr. Galilei,
nadie duda que su invento,
o el que usted dice que es suyo,
es impresionante.
Pero si el tubo muestra algo
que no puede existir,
no debe de ser un aparato fiable.
¿Ah, no?
Con el mayor de los respetos,
sugiero que lo que se ve
por el tubo...
y lo que hay en los cielos...
deben de ser cosas distintas.
Muy bien expresado,
qué comedimiento.
Creen que pintamos
las Mediceas en la lente.
¿Me acusan de fraude?
Ni soñarlo,
no en presencia de Su Alteza.
¿Les pasa algo a mis estrellas?
No les pasa nada.
Sólo discuten si existen realmente.
¿Se ven las garras
de la Osa Mayor?
Sí, y se ve todo el Toro.
¿Van a mirar o no?
Bueno...
¿Qué te pasa?
Son estúpidos.
Qué maleducado.
Alteza,
ha llegado una carta importante,
debemos irnos.
Señores,
nuestro conocimiento es penoso.
He tenido la suerte
de encontrar un instrumento...
que nos acerca
un pedacito del Universo.
Queda a su disposición, úsenlo.
Alteza, señoras y señores,
¿adónde nos lleva esto?
¿Se preguntan los sabios
adónde conduce la verdad?
Sr. Galilei, la verdad puede
conducirnos a tantos sitios.
Alteza, estas noches, en Italia
se enfocan telescopios al cielo.
Las lunas de Júpiter nunca
se habían visto antes, pero existen.
Los hombres deducirán
que más cosas existirán...
si abren los ojos.
Señores,
no defendamos
teorías que se tambalean.
Ustedes son maestros,
hagan que se tambaleen.
Desearía que no interviniera
en nuestra discusión científica.
Alteza, parece que tenemos
que ir a los astilleros...
para encontrar la gran curiosidad
que fue la gloria de Grecia.
Seguro que encuentra
admiradores en los astilleros.
Alteza, esta instructiva discusión
se ha extendido demasiado.
Debemos marcharnos.
Pastelitos caseros, Alteza.
Sólo tienen que mirar
por el telescopio.
Su Alteza consultará
a la mayor autoridad viva,
Christopher Clavius,
astrónomo jefe
del Colegio Pontificio de Roma.
Las cosas dan un giro inesperado...
cuando conoce
a un servidor de Dios.
Clavius, nos complace decir,
apoyó a Galileo.
EL ASTRÓNOMO PAPAL
CONFIRMA...
LOS DESCUBRIMIENTOS
DE GALILEO.
¡No tienen remedio!
¿Existe algo
en lo que la gente no creerá?
Sí, que usted
no trata bien a su panza.
Lo creen.
No creen en lo que les beneficia.
No creen en el Diablo...
pero creen que la Tierra gira...
como una canica en el riachuelo.
Sancta simplicitas.
¡Qué rápido gira la Tierra!
¿Puedo agarrarme a usted?
La Madre Tierra está ebria.
Venus se está elevando,
sólo veo la mitad.
¡Vamos a caer en la Luna!
¡Cuántas montañas afiladas!
¡No miréis abajo!
¡Os dará vértigo!
No queremos gente mareada
en la Santa Roma.
¿Qué dice la Biblia?
"Sol, detente sobre Gabaón y tú,
Luna, sobre el valle de Ayalón. "
¿Puede pararse el Sol
si no se mueve?
¿Miente la Biblia?
¿Cómo pudo
el gran astrónomo Clavius...
involucrarse
en tal investigación?
Tiene los ojos pegados...
a ese instrumento del demonio.
Sr. Galilei,
creo que se le ha caído
algo al suelo.
¿Está seguro
de que no ha subido al suelo?
Qué insolencia.
¿No han salido?
¿Es que no se deciden?
Clavius debe saber astronomía
después de tantos años.
Este Galilei traslada a la humanidad
al extrarradio del Universo,
por tanto es enemigo
de la humanidad...
y se le debe tratar como a tal.
¿Situaría Dios a su creación
más preciosa en un simple astro?
¿Habría mandado a su Hijo allí?
¿Cómo pueden escuchar al esclavo
de una tabla de multiplicar?
El señor está allí.
Así que es usted.
Mis ojos no son lo que eran...
pero veo que se parece
al hombre que quemamos,
¿cómo se llamaba?
Su Eminencia no debe excitarse.
Ha degradado la Tierra
a pesar de recibirlo todo de ella.
No lo toleraré.
No seré un don nadie en un astro
perdido que gira de un lado a otro.
Piso una tierra firme e inmóviI...
que es el centro del Universo,
y el ojo del Creador
está por encima de mí.
Sujetos a las esferas de cristal,
giran los astros y el gran Sol,
que me ilumina
para que Dios me vea.
El hombre, la obra de Dios,
es la figura central,
creado a su imagen. Inmortal...
Su Eminencia,
se ha fatigado demasiado.
Eminencias, el padre Clavius.
Tiene razón.
Clavius ha dicho: "Ahora los
teólogos deben reordenar el cielo".
Usted ha ganado.
¿Quién es ese hombre?
El cardenal inquisidor.
Cuando Galileo fue a Roma,
el cardenal le hizo llamar,
le invitó a cenar y a beber...
y sólo le pidió una cosa.
- Sólo bailaré contigo, Ludovico.
- Por aquí asoma un lazo.
- Padre, siente mi corazón.
- Palpita.
Quiero estar guapa.
Tienes que estarlo.
Si no volverán a decir
que la Tierra no gira.
Es que no gira, señor.
- Espero al cardenal Bellarmino.
- Estará con usted enseguida.
Sr. Galilei.
Un honor, señor.
- Enhorabuena.
- Gracias.
Id a divertíos.
Roma.
Gran fiesta.
250 invitados. El primer carnaval
después de la peste.
Han venido
las grandes familias de Italia,
los Orsini, los Granati, los Paci...
Los Cesarini.
Los Guidi, los Astricade...
Los cardenales...
Bellarmino y Barberini.
Eminencia.
Sr. Galilei,
el cardenal Barberini.
Eminencia.
"El Sol nace y se pone,
y vuelve al lugar de donde salió".
Eso dice Salomón.
¿Qué dice Galilei?
Eminencias,
cuando era pequeño
estuve en un barco.
Cuando zarpó grité:
"La orilla se mueve".
Ahora sé que era el barco
el que se movía.
Es difíciI engañarle.
Una vez leí sobre astronomía
y es difíciI olvidarlo.
Debemos ir con los tiempos.
Si las cartas basadas en nuevas
hipótesis facilitan la navegación,
usémoslas.
Pero desmintamos teorías
que contradigan las Escrituras.
¿Las Escrituras?
"Quien acapare el maíz
será maldecido", Proverbios.
"El prudente esconde
su sabiduría", Proverbios.
"El establo está limpio
cuando no hay bueyes,
pero el buey
proporciona gran ventaja".
"Quien domina su espíritu
vale más que un conquistador".
"Un espíritu deshecho
seca los huesos".
"¿No grita la verdad? "
"¿Puede uno caminar sobre brasas
sin quemarse los pies? "
Bienvenido a Roma, amigo Galilei.
Recordará la historia
de cómo se fundó la ciudad.
Dos bebés fueron alimentados
por una loba,
desde ese día pagamos
el precio de su leche.
Pero no está mal.
Disponemos de divertimento,
una discusión con Bellarmino...
o damas
de reputación internacional.
¿Quiere conocerlas?
¿No?
Prefiere una discusión seria.
Bien.
¿No están los astrónomos...
intentando hacer la astronomía
más fáciI para ustedes mismos?
Hablan de círculos,
elipsis y velocidades uniformes,
términos que la mente comprende.
¿Y si Dios hubiera querido
que los astros se movieran así?
¿Qué sería de sus cálculos?
Eminencia,
si hubiera creado así el mundo...
habría hecho que la mente humana
lo entendiera de ese modo.
Creo en la Razón.
Creo que la Razón es inadecuada.
Es muy educado para decir que
cree que la mía es la inadecuada.
No tiene remedio,
como quien no quiere la cosa...
quiere probar que Dios ha cometido
errores en la astronomía.
No trabajó suficiente antes
de componer las Escrituras.
Querido amigo.
No escriba,
es una discusión entre amigos.
¿No cree que el Creador
sabe más que su criatura?
Podemos haber malinterpretado
los cuerpos celestes y la Biblia.
La interpretación de la Biblia
concierne a los ministros de Dios.
¿No responde?
El Santo Oficio ha declarado
que la teoría de Copérnico,
que sostiene que la Tierra
gira alrededor del Sol,
es falsa, absurda y herética.
Me han encargado que le aconseje
que abandone esa postura.
Repítalo.
El cardenal Bellarmino,
al susodicho Galilei:
"El Santo Oficio ha declarado...
que la teoría que sostiene
que la Tierra gira alrededor del Sol,
es falsa, absurda y herética.
Me han encargado que le aconseje
que abandone esa postura".
¿Qué significa eso?
El Collegium Romanum
ratificó mis observaciones.
Sí, de manera honrosa.
Pero los satélites de Júpiter,
las fases de Venus...
El Santo Oficio escribió el decreto
sin tener en cuenta esos detalles.
En otras palabras...
el futuro de las investigaciones
científicas están completamente...
Completamente asegurado.
La verdad no se nos da,
se nos permite perseguirla.
La ciencia es
la hija legítima de la Iglesia...
y debe confiar en la Iglesia.
Sea realista
y nosotros también lo seremos.
Le necesitamos más
que usted a nosotros.
Presentemos al científico más
famoso de Italia a los invitados.
Pongámonos las máscaras.
El pobre Galilei no tiene.
¿Has escrito la última frase?
Sí. ¿Has escrito
lo que dijo sobre la Razón?
¿Se han entrevistado?
Hija mía,
la felicito por su compromiso.
Su prometido
es de familia distinguida.
- ¿Se quedarán en Roma?
- No, vuelvo a casa para la boda.
A su padre le gustará
que le acompañe.
Las matemáticas
son una fría esposa.
Su juventud le mantendrá
con los pies en la tierra.
Es fáciI perderse ahí arriba.
A mí no me habla
de los astros, Eminencia.
Claro. En casa del herrero,
cuchillo de palo.
Le diré algo sobre astronomía.
Dios ha dotado a los astrónomos
modernos de gran imaginación,
es alarmante.
Comparada
con su idea del Universo,
la nuestra es una miniatura...
como la que llevan
en el cuello las señoritas.
En el Santo Oficio
están preocupados...
de que algún prelado o cardenal
se pierda en tal inmensidad.
Dios podría perder de vista al Papa.
Es muy entretenido.
Me alegra saber
que estará con su querido padre...
a quien todos
tenemos una gran estima.
¿Conozco a su confesor?
El padre Jachelo, de Santa Úrsula.
Hija mía,
tu padre te necesitará.
Ahora quizá no,
pero pronto.
Eres pura...
y existe fortaleza en la pureza.
La grandeza es, a veces,
a menudo, un peso muy grande
para aquellos que la poseen.
¿Qué hombre es tan grande
que no tiene sitio en una plegaria?
Te estoy entreteniendo.
Tu prometido se pondrá celoso.
Y tu padre no me perdonará
el haberte hablado de astronomía.
Dale mis recuerdos
al padre Jachelo.
Galileo estaba pensativo...
cuando recibió la visita
de un joven fraile,
era hijo de campesinos
y con él habló de ciencia.
Sr. Galilei,
me llamo Fulganzio,
soy estudiante de física.
Llevo tres noches sin dormir.
No puedo conciliar
el decreto del Santo Oficio...
con los satélites de Júpiter.
He venido a verle
después de decir misa.
Para decirme que Júpiter
no tiene lunas.
No.
Ahora sé que la investigación
sin restricciones es peligrosa.
Voy a abandonar la astronomía,
le contaré por qué.
Las razones no son nuevas para mí.
Se refiere a la presión
a que le somete la Iglesia.
Pero hay algo más.
Le hablaré de mi familia.
No soy de la ciudad, mis padres
son campesinos de la Campania.
Saben cultivar aceitunas,
pero no mucho más.
Observo las fases de Venus,
imagino a mis padres
y a mi hermana en casa...
bajo las vigas ennegrecidas.
Veo las cucharas
en sus ásperas manos.
Son muy pobres,
pero tras esa pobreza
hay un orden, una rutina,
un ritmo.
La espalda de mi padre
se curvó poco a poco.
Cada parto dejaba
a mi madre más asexuada.
Lo que les da fuerza
para cargar cestos de aceitunas,
para dar a luz y comer...
es la idea de estabilidad,
de necesidad,
que obtienen al ver los árboles
reverdecer cada año,
al ver la tierra...
y la pequeña iglesia.
Les han dicho que Dios les mira...
y que el mundo se ha construido
para su salvación.
¿Qué pensarán
si les digo que viven...
en una roca
que gira en el espacio?
¿Para qué tanta paciencia,
y resignación a su miseria?
¿Qué consuelo encontrarían...
en las Escrituras
que les exigen sumisión?
¿Para qué su sudor
si las Escrituras son un error?
Se sentirían engañados.
Con mirada vacilante dejarían
sus cucharas en la mesa.
El hambre ya no sería
una prueba de fortaleza.
El esfuerzo sería agacharse
y acarrear cosas, no una virtud.
¿Comprende que vea en el decreto
del Santo Oficio gran compasión...
y gran bondad?
Bueno...
como mínimo ha comprendido que
lo importante no son los satélites...
sino los campesinos
de la Campania.
No me hable
de la belleza del sufrimiento.
¿Sabe cómo se forman
las perlas en las ostras?
Un grano de arena
se mete en la ostra...
y hace su vida insoportable.
La ostra fabrica el nácar
para cubrir el grano de arena,
el nácar se endurece
y forma una perla.
La perla casi muere en el proceso.
Prefiero una ostra sana
que una perla.
La virtud
no es monopolio de la pobreza.
Si sus padres
fueran ricos y felices,
podrían practicar la virtud
de la prosperidad y la felicidad.
¿Quiere que les mienta?
Debemos callar
por un importante motivo:
La paz de las almas
menos afortunadas.
Si acepto este decreto
y no molesto a sus padres...
no sería
por motivos desinteresados.
Una vida fáciI,
no ser perseguido...
¿Quiere ver un reloj de Chilini
que trajo el cochero de Bellarmino?
Como recompensa por no perturbar
la paz de sus padres,
las autoridades me ofrecen el vino
hecho con el sudor de sus frentes,
hechas a imagen
y semejanza de la de Dios.
Sr. Galilei, soy sacerdote.
También es físico,
y puede ver
que Venus tiene fases.
¿Cómo inventaremos mecanismos
para controlar los ríos...
si se prohíbe estudiar el mayor
mecanismo de todos, los astros?
¿Puedo conciliar
mis descubrimientos...
con las brujas
que vuelan sobre escobas?
¿La verdad no se conocerá
sin necesidad de nosotros?
No.
La verdad permanecerá
si la hacemos permanecer.
Habla de los campesinos...
como si fueran
el musgo de sus chozas.
Si no despiertan
y aprenden a pensar...
ni los mejores sistemas
de irrigación les servirán.
Veo su divina paciencia,
pero ¿dónde está su divina cólera?
Están agotados.
¿Es usted físico?
Aquí está la razón de que el mar
tenga flujos y reflujos.
Lo dejo ahí, pero no lo lea.
Ya lo está leyendo.
Es físico.
Una manzana del árbol
de la ciencia, no puede esperar.
Se pudrirá en el infierno y mírale,
no tiene modales.
A veces creo que me dejaría...
encarcelar bajo tierra...
si pudiera averiguar algo a cambio:
¿Qué es la luz?
Lo peor...
es que cuando descubro algo
he de contárselo a los demás...
como un enamorado,
como un borracho,
como un traidor.
No entiendo esta frase.
Yo se la explicaré, Fulganzio.
Yo se la explicaré.
Durante ocho largos años...
se mantuvo en silencio
sobre su conocimiento,
pero la tentación
se hizo muy grande...
y Galileo retó al destino.
Jueves.
Otra vez los cuerpos flotantes.
O sea: Hielo, cubo de agua,
balanzas, aguja de hierro.
Aristóteles.
A Ludovico le gusta divertirse.
Esto es para la mesa del comedor.
Tiene que ser perfecto,
su madre se fija en todo.
- No aprueba los libros de mi padre.
- Hace años que no escribe.
En Roma, un reputado eclesiástico
me habló de astronomía.
Virginia,
quiero hablar contigo
sobre tu matrimonio.
Eres tan joven.
No tienes madre
y tu padre se dedica...
a poner hielo
en cubos de agua.
El matrimonio es algo serio.
No le preguntes a tu padre
cosas sobre el matrimonio,
siempre dice cosas horribles
durante la comida, con los jóvenes.
No tiene ni pizca de vergüenza,
nunca la ha tenido.
¿Que nos deparará el futuro?
Ve a ver a un astrólogo
a la universidad...
para que te lea el horóscopo
y sepas a qué atenerte.
¿Por qué te ríes?
Porque ya lo he hecho.
Cuéntame.
Los próximos tres
meses el Sol estará en Aries,
pero después tendré un ascendente
favorable y se irán los nubarrones.
Si no pierdo de vista a Júpiter
me irá todo bien, porque soy Aries.
¿Y Ludovico?
Es Leo,
significa que es sensual, creo.
Conozco esos pasos,
es Giovarni, el rector.
- Srta. Galilei.
- Sr. Giovarni.
Traigo un libro para su padre.
Trata del gran tema del momento.
Por Dios, no le moleste.
Cada minuto que se le roba
es un minuto robado a Italia.
Pondré el libro
en su pequeña mano y me iré...
de puntillas.
Buenas tardes.
Gracias.
¿De qué trata?
No lo sé,
Demaculi in sole.
Las manchas del Sol.
Uno nuevo.
Mira la dedicación:
"A la máxima autoridad viva
en física,
Galileo Galilei".
Leí el tratado de Fabrizius.
Cree que las manchas son planetas
colocados entre el Sol y nosotros.
¿No es eso dudoso, Sr. Galilei?
En París y en Praga
piensan que son vapores del Sol.
Federzoni tiene sus dudas.
No me metas.
Sólo he dicho "hmm" nada más.
¿cómo puedo tener dudas?
Soy el pulidor de lentes.
Yo las pulo y vosotros las usáis.
Observáis los cielos y lo que veis
no son manchas sino "maculis".
No discutáis estas cosas conmigo,
yo no sé leer en latín.
Hay felicidad en la duda, ¿por qué?
¿Vamos a subir esto?
Desde hace 15 días, todos
los días soleados subo al ático.
Se cuela un rayo de luz
por una grieta del techo.
Así se puede capturar una imagen
invertida del Sol sobre un papel.
En la imagen pude ver un pequeño
punto que se movía.
¿Por qué no investigamos
esas manchas, Sr. Galilei?
Por el momento nos dedicaremos
a los cuerpos flotantes.
Mi madre guarda muchas cartas,
toda Europa quiere su opinión.
Con su reputación
no puede mantener silencio.
Roma me deja mantener
esa reputación...
porque he mantenido silencio.
No veo la razón
de seguir en silencio.
No puedo permitir que me asen
como a un cordero.
¿Cree que las manchas tendrán
algo que ver con eso?
Pues limitémonos
a jugar con el hielo,
eso no le dañará.
Exacto.
Nuestra tesis:
Todo objeto
más ligero que el agua flota,
todo objeto más pesado se hunde.
¿Qué dijo Aristóteles?
"Discus latus platique... "
Tradúcelo.
"Un disco ancho
de hielo flota en el agua...
mientras que una aguja
de hierro se hunde".
¿Por qué, según Aristóteles,
no se hunde el hielo?
Al ser ancho y plano
no puede dividir el agua.
Muy bien.
Ahora presiono el hielo...
hacia el fondo del cubo.
Ahora dejo de presionar,
¿qué ha pasado?
Sube a la superficie.
Correcto.
Al ascender...
es capaz de dividir el agua.
¿Entonces por qué flota?
Es más pesado que el agua
porque es agua comprimida.
¿Y si fuera agua dilatada?
Debe ser más ligera
que el agua o no flotará,
igual que la aguja.
Si es más ligero que el agua
flota, si es más pesado no.
Eso decimos.
Andrea, piensa con cuidado.
Dame la aguja de hierro.
Papel.
¿Es el hierro
más pesado que el agua?
Sí.
¿Qué ha pasado?
¡Flota!
¡Santo Aristóteles!
A él no le investigaron.
Cada vez que les oigo reír...
siento miedo.
Vaya.
¡Ludovico!
¿Por qué no me avisaste?
Estaba inspeccionando
los viñedos de Bucciole,
y no podía dejar de venir.
¿Quién es?
Ludovico.
Buenos días, señor.
¿No le ve?
Celebremos.
Sarti, trae una jarra
de ese vino siciliano.
- ¿Qué tal los caballos?
- Muy bien, señor.
Bien, sentémonos.
Siéntese, Ludovico.
Estás pálida.
El campo te vendrá bien.
Mi madre planea la boda
para septiembre.
No debería...
pero te mostraré algo.
Oí que unos miI estudiantes
van a oírle a la universidad.
¿En qué está trabajando?
Cosas corrientes.
¿Viene de Roma?
Sí.
Mi madre le felicita por su reserva
en el tema de las manchas solares.
Muy amable.
Christopher Clavius
ha revolucionado Roma.
Dijo que el tema de la Tierra
que gira alrededor del Sol...
podría surgir de nuevo.
Sigue las mismas pistas.
¿Qué noticias hay de Roma...
aparte de esperanzas de nuevas
aberraciones por mi parte?
El Papa se muere.
¿No lo sabían?
¿Quién dicen que será el sucesor?
Barberini.
¿Barberini?
El Sr. Galilei le conoce.
Es un matemático.
Un científico
en el trono de San Pedro.
Veremos el día
en que no tengamos...
que escondernos
como criminales...
cada vez que digamos
que dos y dos son cuatro.
Me gusta este vino.
¿Qué le parece, Ludovico?
Me gusta.
Conozco el viñedo donde se cultiva.
La pendiente es escarpada
y pedregosa, la uva es casi azul.
Me gusta este vino.
Sí, señor.
Hace sombras.
Es casi dulce,
pero no llega a serlo.
Andrea,
trae tu artilugio.
Empecemos
con las manchas del Sol.
El Papa piensa que la Tierra
no gira, la Biblia lo prueba.
Intenta cogerla por las orejas,
pero esta se mueve.
Quizá descubramos
que el Sol también se mueve.
¿Le gustaría, Sr. Marsili?
¿A qué viene esto?
No irá a empezar
con esas cosas del diablo.
Corríjame.
Barberini está ascendiendo,
su madre está preocupada
y ha venido a investigar.
Clavius tiene razón:
Las manchas del Sol me interesan.
- ¿Le gusta mi vino?
- Le he dicho que sí.
- ¿De veras?
- Me gusta.
¿Qué tiene que ver
la astronomía con mi hija?
Las fases de Venus no afectan
al trasero de Virginia.
Eso no tiene gracia, es vulgar.
Voy a buscarla.
Sra. Sarti,
el matrimonio en mi familia
no atiende sólo al aspecto ***.
¿Su familia le impidió casarse
con mi hija durante ocho años?
Tendrá que sentarse
en nuestro banco de la iglesia.
Si la hija de un hombre malo
se sentara en su banco,
¿dejarían de pagarles
los campesinos?
En cierto modo.
El reflector y las pantallas...
proyectarán la imagen del Sol
y protegerán nuestros ojos.
Andrea, tu método...
Aseguró a mi madre no volver
a mezclarse en este asunto, señor.
- Teníamos a un Papa reaccionario.
- ¡El Papa no ha muerto aún!
- Pero casi.
- ¿Casi?
Pesa 50 veces un trozo de hielo,
pero si algo le conviene,
lo cree ciegamente.
Si muere,
su sucesor respetará las creencias
de las principales familias del país.
Dios creó el mundo físico
y la mente humana.
Dios permitirá la física.
Galileo, deja que te diga algo,
mi hijo ha caído en pecado
por esos experimentos y teorías...
y no he podido hacer
nada al respecto.
Te enfrentaste a las autoridades
y ellos te advirtieron.
El cardenal más importante te habló
como a un caballo enfermo.
Funcionó durante un tiempo.
Pero hace dos meses
te vi con tus apuntes.
No dije nada pero lo sabía...
y le puse una vela a San José.
Esto es demasiado para mí,
cuando estamos solos
eres razonable,
dices que si no sería peligroso.
Dos días de experimentos
y vuelves a caer.
Puedo condenar mi alma
por apoyar a un hereje,
pero no destroces
la felicidad de tu hija.
- Descubre el telescopio.
- Lleva el equipaje al coche.
Nunca lo superará.
Díselo tú mismo.
Si apoyáramos teorías
que desaprueba la Iglesia,
los campesinos se inquietarían.
Esos infelices lo confundirían todo.
Son como animales.
¿Ah, sí?
Mi madre apalea a perros frente
a ellos para bajarles los humos.
Habrá visto los maizales
desde su carruaje,
mordisqueado distraídamente...
nuestras aceitunas
y nuestro queso,
pero no sabe
qué responsabilidad requiere eso.
¿Por qué cree que como
el queso distraídamente?
¿Listos?
Sí, señor.
No apalean sólo a los perros para
mantener la disciplina, ¿verdad?
Tiene usted una mente maravillosa,
es una pena.
- Le está amenazando.
- Sí.
Podría inquietar a sus campesinos,
criados y administradores.
Tranquilo,
ninguno de ellos habla latín.
Puede que escriba en la lengua
vernácula en vez de latín.
Necesitamos a gente
que trabaje con las manos.
¿Quién más quiere conocer
el porqué de las cosas?
Quien tiene
siempre pan en su mesa...
no quiere sabe cómo se amasa.
Prefiere darle gracias a Dios
que al panadero.
Ya ha tomado una decisión.
Siempre será esclavo
de sus pasiones.
Discúlpeme con Virginia,
será mejor que no la vea ahora.
- La dote está a su disposición
- Buenos días.
Recuerdos a los Marsili,
que fijaron la Tierra para
que sus castillos no se cayeran.
Y a los *** y a los Orsini...
- Y a los Rosselli.
- Y a los Cesarini.
Y a los Gianoti.
Que sólo besarán los pies del Papa
si los usa para pisotear al pueblo.
El nuevo Papa será ilustrado.
No.
Observemos esas manchas
bajo nuestra responsabilidad...
sin contar con la protección
del problemático nuevo Papa.
Pero seguros de disipar dudas
sobre las estrellas de Fabrizius...
los vapores de París y Praga,
y de poder probar que el Sol gira.
Andrea,
no estés tan seguro
de poder probar eso.
No quiero probar que tenía
razón, sino si tenía razón.
Apúntalo hacia el Sol.
Sabía que estaba
trabajando en esto.
¿Sabe por qué?
Porque no reconoció
al Sr. Marsili.
¿Le has dicho que se fuera?
Tengo que saber.
1632,
DÍA DE LOS SANTOS INOCENTES
LA PLAZA DEL MERCADO DE
UNA PEQUEÑA CIUDAD DE ITALIA
Cuando Dios creó el Universo,
creó la Tierra y luego el Sol,
luego lo hizo girar
alrededor de la Tierra.
Lo dice la Biblia, Génesis, uno.
Desde entonces, aquí abajo,
todos los seres empezaron a girar.
Alrededor del Papa, los cardenales.
Alrededor de los cardenales,
los obispos.
Alrededor de los obispos,
los ministros.
Alrededor de los ministros,
los concejales.
Alrededor de los concejales,
los artesanos.
Alrededor de los artesanos,
los sirvientes.
Alrededor de los sirvientes,
los perros, pollos y mendigos.
Se levantó el sabio Galileo,
miró brevemente al Sol...
y dijo: "Dios Todopoderoso
se equivocó en el Génesis, uno".
Fue muy osado, amigos,
este tema no es banal.
La herejía se extenderá
como una enfermedad.
¿Cambiar las Escrituras?
¿Qué nos quedará?
Todo el mundo dirá...
lo que le venga en gana.
Lo que le venga en gana.
Lo que le venga en gana.
Buena gente, ¿qué pasará...
si las enseñanzas
de Galileo se extienden?
Los monaguillos
no servirán en misa,
las sirvientas no harán las camas.
Es un tema grave,
no es banal.
Las almas libres
se extienden como una enfermedad.
La vida es dulce y el hombre débil.
Así que...
¿Qué pasará, para variar,
si todos hacemos
lo que nos venga en gana?
Lo que nos venga en gana.
Lo que nos venga en gana.
Los carpinteros cogerán madera...
y construirán sus casas,
no los bancos de la iglesia.
Los zapateros
andarán con descaro...
calzados por las calles.
El inquilino echará al noble...
de las tierras que poseía.
La leche que su mujer
daba al sacerdote...
ahora engordará a sus hijos.
Es un tema grave, amigos,
no es banal.
Las almas libres
se extienden como una enfermedad.
La vida es dulce y el hombre débil.
Así que...
¿Qué pasará, para variar,
si todos hacemos
lo que nos venga en gana?
Lo que nos venga en gana.
Lo que nos venga en gana.
La duquesa se lava la camisa,
el emperador
va a por su cerveza,
sus tropas hacen el amor
tras los árboles...
y no oyen las órdenes.
Ahora que lo pienso
no iría tan mal un cambio.
Sabes, me gustas,
quizá esta noche podríamos...
No, no, no.
Detente, Galileo, detente.
Las almas libres
se extienden como una enfermedad.
Debemos estar en nuestro sitio,
unos por encima y otros por debajo.
No estaría mal, por una vez,
hacer lo que a uno
le viniera en gana.
Lo que le viniera en gana.
Lo que le viniera en gana.
Buena gente
que lo pasa mal aquí abajo...
sirviendo a crueles señores
y al dulce Jesús...
que te ordena
poner la otra mejilla...
mientras ellos...
preparan el segundo golpe.
La obediencia no curará tu dolor.
Seamos listos
y hagamos por una vez...
lo que nos venga en gana.
Lo que nos venga en gana.
Lo que nos venga en gana.
Rápido.
Como ha dicho el gran Galileo,
la Tierra gira alrededor del Sol.
La procesión.
LA TIERRA GIRA
GALILEO ASESINO DE LA BIBLIA
SÍ A GALILEO, NO AL PAPA
GALILEO RECHAZA EL APO YO
DE LOS NUEVOS BURGUESES...
Y CONFÍA EN SU AMISTAD
CON EL GRAN DUQUE Y EL PAPA.
Las profundidades son cálidas,
las alturas son frías,
las calles están alborotadas,
la corte, silenciosa.
Nos han tenido
mucho tiempo esperando.
Sí.
¿Dirán que tu libro es una herejía?
Vas demasiado a misa.
Salir corriendo a misa
va a estropear tu cutis.
¿Rezas por mí?
Estoy preocupada.
Ahí está el hombre
que merodeaba por casa.
Viene el Sr. Matti, el fundidor.
Agradécele
que te mandara las codornices.
¿Qué tal las codornices?
Deliciosas,
gracias de nuevo.
Están hablando de usted, le culpan
de esos panfletos contra la Biblia.
No sé nada de panfletos.
Yo leo Homero y la Biblia.
No me importa.
Los fabricantes estamos de su lado.
No entiendo de astrología,
pero usted enseña
nuevos conocimientos.
Como esa cultivadora
mecánica de Alemania,
aquí nunca se usará.
Su opinión es valiosa.
Eso espero.
En Amsterdam y en Londres
tienen mercados de dinero.
Aquí ni siquiera
podemos hacer dinero.
Apoyamos a hombres como usted.
Si tratan de hacerle algo...
recuerde que tiene amigos
en la industria.
Las ciudades del norte
de Italia le apoyan.
Que yo sepa,
nadie quiere hacerme daño.
¿No?
No.
Estaría mejor en Venecia.
Allí podría seguir con su lucha.
Tengo un coche.
No seré un refugiado.
Me gusta mi comodidad.
Es cuestión de tiempo.
Les aliviará que se marche
de Florencia inmediatamente.
Sandeces.
El duque es alumno mío.
Si alguien intenta algo en Roma...
el Papa mandará
que me dejen en paz.
No distingue
a sus amigos de sus enemigos.
Sé quien tiene el poder.
Está bien. Buena suerte.
¿Qué hace el cardenal inquisidor
en Florencia?
No sé.
Se ha portado con respeto.
El señor chambelán.
Su Alteza quería verle,
pero ha tenido que ir al desfile
de la Academia de Equitación.
- ¿Por qué quería verle?
- Quería presentarle mi libro.
¿Cómo están sus ojos?
Regular.
Con el premiso de Su Alteza...
Su Alteza está
preocupado por sus ojos.
No será que ha mirado por ese tubo
maravilloso demasiado tiempo.
Tengo miedo.
No muestres tus sentimientos.
Nos vamos a casa
del tallador de vidrio.
Tiene un coche preparado
para sacarnos de aquí.
Sr. Galilei.
- No mires.
- Sr. Galilei.
Su Alteza me manda informarle...
de que la corte
no puede demorar más...
la petición de la Inquisición
de interrogarle en Roma.
El coche de la Santa Inquisición
le aguarda.
EL PAPA URBANO Vlll...
CEDE ANTE
LA JERARQUÍA ECLESIÁSTICA.
El Papa.
¡No, no, no!
Cómo arrastran los pies.
Doctores de las facultades,
representantes
de las órdenes religiosas,
que han creído en la palabra de
Dios que reflejan las Escrituras,
que han venido
a que usted confirme su fe...
¿Y va a decirles...
que la Biblia
ya no es la fuente de la verdad?
No iré en contra
de las tablas de multiplicar.
Eso es lo que la gente dice,
que sólo son tablas de multiplicar.
Las cifras nos convencen,
pero ¿de dónde vienen las cifras?
Mayormente de la duda.
Lo ponen todo en duda.
¿Puede la sociedad sostenerse
en la duda en vez de en la fe?
"Es mi señor,
pero no sé
si eso es bueno o malo. "
"Esta es su casa y su esposa,
pero quizá deberían ser las mías. "
Pasada la peste,
pasada una nueva guerra
y el desastre de la Reforma,
su menguante rebaño
mira a su pastor...
mientras los matemáticos
apuntan sus tubos hacia el cielo...
y dicen que su versión del cielo
no es la más acertada.
Es el mejor físico de la actualidad,
es el cerebro de Italia,
no un simple loco.
¿Si no, le habríamos arrestado?
Aristóteles,
a quien estos renegados...
consideran un perro muerto, dijo:
"Si la lanzadera hilara sola,
los maestros
no necesitarían aprendices,
ni los señores sirvientes".
Ya ha llegado ese momento.
Él sabe lo que hace.
Además, no escribe en latín,
sino en la lengua
de los fundidores y pescaderas.
No tiene muy buen gusto,
se lo diré.
Los puertos del norte quieren
las cartas astronómicas de Galileo.
Es complejo. Hay implicados
intereses materiales.
No podemos condenar...
la enseñanza de esas cartas
y aun así usarlas.
Podemos actuar de otro modo.
Me ponen nervioso
con ese ruido.
Que pese más que mis palabras.
¿Han de marcharse
con la duda en el corazón?
Este hombre tiene amigos.
¿Y Francia?
¿Y Viena? Nos llamarán "vertedero
de ideas muertas". No le toquéis.
No habrá que llegar a ese extremo.
Es un hombre terrenal,
se derrumbará fácilmente.
Le gusta más comer,
beber y pensar...
que a nadie que haya conocido.
Le saca placer a todo,
incluso pensar es sensual para él.
Se regocija pensando.
No rechaza un buen vino
o una nueva idea.
No quiero condenar hechos físicos.
No quiero guerras
entre la Iglesia y la Razón.
Le puse la condición
de que su libro...
valorara más la fe que la ciencia.
- Ha cumplido.
- ¿Cómo?
Habla de un zoquete que
proclama teorías aristotélicas...
y de un hombre inteligente
que expone las de Galileo.
¿Y quién saca las conclusiones?
- ¿Quién expone nuestra opinión?
- No es el inteligente.
Esos pies son insoportables.
¿Ha venido a mí todo el mundo?
Como mucho,
enseñadle los instrumentos.
Será suficiente, Santidad.
El Sr. Galilei
entiende de instrumentos.
22 de junio de 1633.
Un momento importante para todos.
Podría haber sido el día...
en que naciera la Edad de la Razón.
23 días...
y el Papa aún no le ha concedido
una audiencia.
No más discusiones científicas.
Los Discorsi,
nunca serán terminados.
Le matarán.
¿De veras lo crees?
Nunca se retractará.
A veces de noche...
tu mente se queda fija
en un pensamiento.
Anoche pensé:
Si le dejaran llevar su piedrecita,
el amuleto que siempre lleva.
Allí a donde le llevan
la gente no tiene bolsillos.
No se atreverán,
y si lo hacen,
él no se retractará.
¿Harán que se retracte un hombre
que ha dado su vista por la verdad?
Quizá no puedan.
Reza por que se retracte.
Déjala.
Desde que hablaron con ella
está trastornada.
Han traído
a su confesor de Florencia.
El Sr. Galilei estará aquí pronto.
Quizá necesite una cama.
¿Le han dejado en libertad?
Se espera
que se retracte a las cinco.
Entonces sonará
la campana de Santa María...
y se leerá el discurso
de su retractación públicamente.
No me lo creo.
Le traerán a la parte trasera
de la embajada,
para evitar
las aglomeraciones en la calle.
La Luna no tiene luz propia,
Venus tampoco tiene luz.
Igual que la Tierra,
gira alrededor del Sol.
Júpiter tiene cuatro lunas y está
a la altura de las estrellas fijas,
y no está fijo
a una bóveda de cristal.
El Sol es el centro del Universo
y está inmóviI.
La Tierra no es el centro
y no está inmóviI.
Y él es quien lo ha probado.
No se puede hacer invisible
lo que ya se ha visto.
Son las cinco.
Están matando la verdad.
No suena la campana.
No suena.
Ya ha pasado la hora.
i No lo ha hecho!
No lo ha hecho.
Se ha mantenido firme.
No pasa nada.
No pasa nada.
No se ha retractado.
i No!
La fuerza no lo es todo.
La estupidez no es invencible.
El hombre se mantiene
firme frente a la muerte.
22 de junio de 1633.
Nace la era de la Razón.
Me habría muerto
si se hubiera retractado.
No lo he dicho
pero estaba sufriendo.
¡Qué poca fe!
Estaba seguro.
El día se habría vuelto noche.
La montaña habría dicho:
"Soy agua".
Gracias a Dios.
La pisoteada humanidad
se levanta...
por un hombre
que se mantiene firme y dice "no".
La campana,
no le han condenado.
"Yo, Galileo Galilei,
profesor de matemáticas y física
de la Universidad de Florencia,
me retracto de mis enseñanzas...
de que el Sol es el centro
del Universo y está inmóviI...
y de que la Tierra
no es el centro y no está fija.
Renuncio a estas enseñanzas
sinceramente y con inalterable fe,
condeno y rechazo estos
y otros errores y herejías...
contrarios a las enseñanzas
de las Santa Iglesia. "
O sea que...
la montaña se ha vuelto agua.
No puedo mirarle.
Decidle que se vaya.
Calma.
Ha salvado su gran panza.
Traedle algo de beber.
Puedo caminar,
pero ayudadme a levantarme.
"Desdichada es la tierra
que no tiene héroes. "
Incorrecto.
"Desdichada es la tierra
que necesita héroes. "
Si un caballo cayera
desde una altura de 1 '5 m,
se rompería los huesos...
mientras que un perro
no se haría daño.
Tampoco un gato que cayera
de una altura de tres metros,
un saltamontes de una torre...
o una hormiga desde la Luna.
La idea de que las estructuras
grandes y pequeñas...
son igual de resistentes...
es, por tanto, errónea.
Desde 1633...
hasta 1642,
Galileo Galilei...
es prisionero...
de la Inquisición...
hasta el día de su muerte.
Vengo a entregar esto.
Yo no he pedido un ganso.
Es de parte de alguien
que pasaba por aquí.
Alguien que pasaba
por aquí te manda esto.
¿Qué es?
¿No lo ves?
No.
Un ganso.
- ¿Han dejado nombre?
- No.
Me comeré el hígado.
Que lo cocinen
con manzana y cebolla.
Que cocinen el hígado
con manzana y cebolla.
Llamemos al médico,
no ha visto lo que era.
¿Ha empezado a escribir de nuevo?
No, me lo está dictando.
Te di las últimas páginas,
la 131 y la 132.
Es un viejo zorro.
Tendrías que haber podido
ver el ganso.
Me tapabas la luz.
No es cierto.
Estás forzando la vista.
Puedes leerme a Horacio.
Deberías terminar
la carta del arzobispo.
Está contento con tu colaboración.
¿Dónde estábamos?
Párrafo cuatro.
Lee lo que tienes.
"La posición de la Iglesia sobre
los disturbios de Génova.
Coincido con el cardenal Spoletti...
sobre el malestar
de los cordeleros. "
Sí.
Coincido con el cardenal Spoletti...
sobre el malestar
de los cordeleros,
conviene más administrarles
comida en nombre de la caridad...
que dar más dinero
a los cordeleros.
San Pablo dijo:
"La caridad nunca falla".
¿Qué tal?
- Es preciosa.
- Bien.
¿No creerá que es irónica?
- No.
- Bien.
Al arzobispo le gustará.
Me fío de tu opinión.
Léela despacio.
"La posición de la Iglesia
sobre los disturbios de Génova.
Coincido con el cardenal Spoletti...
sobre el malestar
de los cordeleros. "
Siento venir tan tarde.
Me voy a Holanda.
Me han pedido que viniera a verle
para llevar las últimas noticias.
¿Puedo pasar?
No sé si querrá verte.
No viniste.
Pregúntaselo.
¿Es Andrea?
Sí, le diré que se vaya.
Dile que entre.
¿Se está cuidando, Sr. Galilei?
Siéntate.
¿A qué te dedicas ahora?
¿En qué estás trabajando?
He oído que es algo
relacionado con la hidráulica.
Fabrizius de Amsterdam
me pidió que viniera...
a ver cómo estaba de salud.
Estoy bien.
Recibo muchas atenciones.
Me alegrará informarles de ello.
Informa a Fabrizius de que,
gracias a mi arrepentimiento,
vivo con cierta comodidad...
y se me permite investigar...
bajo supervisión del clero.
Sí,
sabemos que la Iglesia
está satisfecha con usted.
Su sumisión ha dado resultado.
No se han publicado en Italia
nuevas tesis desde entonces.
Desgraciadamente...
hay países fuera
de la protección de la Iglesia.
Me temo que las teorías
censuradas se enseñan allí.
La cosa está paralizada.
¿De veras?
¿Nada de Descartes en París?
Sí,
pero al enterarse
de su retractación...
dejó sus estudios
sobre la naturaleza de la luz.
Me preocupan mis asistentes,
a quienes induje al error.
¿Habrán aprendido de mi ejemplo?
Para poder seguir trabajando...
debo irme a Holanda.
Sí.
Federzoni ha vuelto a pulir lentes...
en una tienda.
No habla latín.
Fulganzio, nuestro pequeño monje,
ha dejado la ciencia
y ha vuelto a la Iglesia.
La Iglesia espera la recuperación
espiritual de mi padre.
Échale un vistazo al ganso.
No me gusta ese hombre.
Es inofensivo.
Fue su alumno,
así que ahora es su enemigo.
No veo por qué
has venido a inquietarme.
Aunque me veas así,
tengo mis recaídas.
No quería molestarle.
¿Qué recaídas?
He estado escribiendo.
He terminado los Discorsi.
¿Sobre dos nuevas
ramas de la ciencia?
¿Aquí?
Mis superiores no son estúpidos.
Saben que los vicios arraigados
no se curan fácilmente.
Se me permite tener papel y tinta.
Los Discorsi
en manos de los monjes.
Amsterdam, Londres y Praga
se mueren por ese libro.
Guardaron bajo llave
las páginas que les dicté.
Pero por las noches las copiaba.
Supongo que es el colmo
de la locura entregarlo.
Está en el globo terráqueo.
Mi vanidad
me ha impedido destruirlos.
Si quieres sacarlos del país
tendrás que arriesgarte.
Los Discorsi.
"Opino...
que la Tierra
es muy noble y admirable...
en virtud de tantas
alteraciones y generaciones...
que en ella ocurren. "
Tenía que hacer algo
con mi tiempo.
Será el principio
de la nueva física.
Escóndelo.
Y le llamamos traidor.
Yo fui el que peor habló de usted.
Ocurrió lo que debía ocurrir.
Te enseñé ciencias...
y negué la verdad.
Esto lo cambia todo.
¿Sí?
Escondió la verdad al enemigo.
Está adelantado incluso en ética.
- ¿Ética?
- Perdimos la cabeza.
Les decíamos a las gentes:
"Morirá, nunca se rendirá".
Volvió y dijo:
"Me he rendido pero estoy vivo".
Dijimos: "Sus manos
están manchadas",
y usted dijo:
"Mejor así que vacías".
"Mejor manchadas que vacías. "
Es realista,
es algo que yo diría.
Nueva ciencia, nueva ética.
Debería haberlo entendido.
Tenía doce años cuando vendió
el invento de otro al Senado...
y lo inmortalizó.
Siempre se rió del heroísmo:
"Los que sufren me aburren".
"Las desgracias
son errores de cálculo".
Lo recuerdo.
Cuando se retractó de su doctrina,
debí comprender...
que se retiraba de una lucha
política desesperada...
para el futuro interés de la ciencia.
¿Y cuál es?
El estudio del movimiento,
la madre de todas las máquinas...
que harán de la Tierra
un lugar tan bueno...
que no necesitaremos el Cielo.
Consiguió tiempo para escribir una
obra que sólo usted podría escribir.
Si hubiera ido a la hoguera
por la gloria, ellos habían ganado.
Y han ganado.
Además,
no hay trabajo científico...
que pueda ser escrito
por un solo hombre.
¿Y por qué se retractó?
Me retracté...
por miedo al dolor físico.
¿No lo planeó?
No lo hice.
En la ciencia sólo cuenta una cosa,
la contribución al conocimiento.
Usted ha contribuido más
que ningún otro en 100 años.
¿De veras?
¿Para quién?
Bienvenido a mi arroyo,
hermano científico y colega traidor,
yo vendo y tú compras.
Ves el libro...
y tus insultos se ahogan.
Bendita sea nuestra
negociadora comunidad,
temerosa de la muerte.
La ciencia no se preocupa
de nuestra debilidad personal.
¿Ah, no?
Querido Sarti,
incluso en mi situación actual...
puedo darte indicaciones
sobre la ciencia.
En mi tiempo libre, que es mucho,
he pensado en mi caso.
La investigación científica
requiere valentía.
Su conocimiento
se destila de la duda.
Nuestra duda encantó al pueblo,
nos arrebataron el telescopio
y lo entregaron a sus opresores:
Príncipes,
terratenientes y sacerdotes...
Estos ayudaron
a enfocar la ciencia...
a una era de pobreza...
que podría haber sido eliminada...
si ellos hubieran sido eliminados.
Por eso...
nos amenazan y nos sobornan.
¿Podemos separarnos del pueblo
y seguir siendo científicos?
En la batalla por medir
los cielos, la duda vence.
Por crédula,
el ama de casa perderá la batalla
por la leche una y otra vez.
La ciencia está implicada
en ambas luchas.
¿Para qué trabajáis los científicos?
El único propósito de la ciencia...
es atenuar la fatiga
de la existencia humana.
Si os dejáis coaccionar,
vuestro progreso
se alejará de la humanidad.
El abismo entre la humanidad
y el clero crece tanto...
que la respuesta al entusiasmo
por un nuevo logro...
podría convertirse
en un grito de horror.
Como científico,
tuve una gran oportunidad.
En mi época,
la astronomía
llegó a la plaza pública.
En esa época,
si alguien
les hubiera plantado cara,
habría tenido gran repercusión.
He llegado a la conclusión...
de que nunca estuve en peligro,
porque era tan fuerte
como las autoridades...
y puse mi conocimiento al servicio
del poder para que lo usaran...
y abusaran de él...
en su propio interés.
He traicionado a mi profesión.
Ningún hombre
que haya obrado como yo...
puede ser aceptado
en las filas de la ciencia.
Has sido aceptado
en las filas de los creyentes.
Sí.
Ahora debo comer.
Ahora tú eres el profesor.
¿Puedes permitirte coger mi mano?
Alguien que pasaba por aquí...
ha mandado un ganso.
Aún me gusta comer.
Acerca del autor
sobre el que discutíamos,
desconozco la respuesta.
Pero no creo que su violento
análisis sea la conclusión.
Gracias, señor.
No nos gustan
las visitas del pasado.
Le perturban.
¿Alguna idea sobre quién
ha podido mandar el ganso?
Andrea no ha sido.
No, quizá no.
¿Cómo está la noche?
Clara.
Aquí, amigos, acaba la historia,
el gran libro consigue su libertad,
pero no olvidéis
que nosotros quedamos atrás.
Mantened la llama
de la ciencia viva,
calentaos con ella
y usadla correctamente,
de lo contrario
se convertirá en un fuego...
que nos destruirá a todos,
nos destruirá a todos.