Tip:
Highlight text to annotate it
X
Recuerda lo que me has prometido.
No dejes que nada haga de ti
un lisiado.
NORTE DE FLORIDA - 1948
¡Vale!
Parada para descansar. 45 minutos.
¡Vamos, compañeros!
Nos vamos a las 14:45 en punto.
No tarden.
Dentro hay comida caliente y baños.
Detrás podéis comprar bocadillos.
Y usad el baño de fuera.
Desde aquí sólo tendréis el campo.
Señor.
- ¿Puedo ayudarte?
- Sí, señor.
¿Seattle?
- ¿Con quién vas?
- Con nadie. Viajo solo.
Chico, no voy
a responsabilizarme...
de un *** ciego que viaja solo.
He pagado el billete,
tiene que llevarme.
No te me pases de listo.
Sin faltar, me gané el derecho.
Me dejé los ojos en Omaha Beach,
pero no pido caridad.
Tengo un trabajo en Seattle.
- ¿Estuviste en Normandía?
- Transportando a las tropas.
Recibimos un impacto directo.
Lo siento, hijo.
Yo te echaré un ojo.
Siéntate atrás.
DE COLOR
DOS AÑOS ANTES
Til, ¿se puede saber qué haces?
No te acalores.
He encontrado a este chaval
en el O.C. De Clarkfield...
y es un pianista de jazz de miedo.
Aunque silbe Dixie por el culo,
aquí no lo hará.
Señor.
- Chaval, ¿eres ciego?
- Sí, desde los siete años.
Te lo voy a explicar.
Somos un grupo de country.
No tocamos nada de boogie-woogie.
Entendido. Me encanta el country.
Vamos, dime.
¿Qué te gusta del country?
Me encantan las historias.
Sobre el amor que te derriba,
las presiones del mundo...
que te hacen sentir
que quieres darle el alma a Dios.
Y no está de más,
tu pellejo ya es suyo.
- ¿Seguro que eres ciego?
- Al menos lo era.
Vamos.
Billy, somos mayoría.
El mínimo problema
y vuestro *** ciego se larga.
¡Mierda!
Trae.
Le voy a poner unas gafas...
o le dará a alguien
un susto de muerte.
Seattle, Washington.
Abajo los que van al Norte.
Bellingham, Mount Vernon,
Vancouver, Canadá.
¡Eso es Diz! Emanon.
¿Qué significa al revés?
Pónmelo más difícil. "Sin nombre".
- ¿Qué tocas, jefe?
- El piano.
Vengo de Tampa, Florida.
Gossie McGee y yo
queremos enriquecer nuestro estilo.
Pillar cosas de tíos
más experimentados. ¿Entiendes?
¿Sabes qué?
¿Qué tal si te llevo dentro?
Te lo enseño.
Vale. Un perfecto caballero.
Es como mi casa.
- ¿Tú eres?
- Ray Robinson.
Yo Quincy Jones.
¡Gerry! Éste es mi amigo Ray.
Viene a ver a Gossie McGee.
He pensado enseñarle...
Olvídalo, Q. Él puede pasar, tú no.
Tengo a Antivicio encima
por dejar pasar a menores.
- Lárgate.
- Es ciego. Quiero enseñárselo.
- Vete.
- Cerdo.
¡Ray Robinson!
¿Cuándo te oiré tocar?
Tendrás que pagar.
Bienvenidos, linces listos
y gatas guapas.
Aquí es
donde los que saben de jazz...
cuelgan sus sombreros.
Así que arrimaos y acercaos,
es la noche de los nuevos talentos
en el Rocking Chair.
¡Un aplauso para Al el bailarín!
Gossie está tonteando...
con una camarera
desde que llegó aquí.
No me dijo
que su socio fuese ciego.
Marlene. Ha llamado Demurs.
Thurmond está enfermo.
- ¿Y Sassy?
- Un pinchazo.
Vale, Alabama.
Enséñame qué sabes hacer.
No estoy preparado
para hacerlo ahora.
Será tu única audición,
así que sube
o ya te puedes volver al sur.
Fuma esto.
Esto no es tabaco.
Te tranquilizará.
Vale, Oberon. Sube a presentarle.
Sí, señora.
Vale, Alabama. Vamos.
Tengo algo especial para vosotras,
muñecas de satén.
Y no me refiero al cañón de Oberon.
Eso queda para otro número.
Tenemos sangre nueva.
Recién llegado de Florida,
os dejo con
Ray "no me llaméis Sugar" Robinson.
- ¿Qué tal os va?
- ¡Mejor que a ti!
- Tranquilo, Ray.
- Ya está.
¿Qué queréis oír?
¿Nat King Cole?
¿Os gusta Nat King Cole?
- No es malo.
- Nos ha salvado el pellejo.
¿Qué hace Ray ahí?
Una audición por ti, Gossie.
Sin mí no es bueno.
Os contrato para una semana.
Conozco a un buen bajista.
Un trío de jazz sería un éxito,
con una buena manager.
¿Una manager?
No seas corto de miras.
Hay que dar para tener.
¿Qué tengo que dar exactamente?
El 25%.
Y os conseguiré actuaciones.
Siguiente pregunta.
¿Qué me llevo yo?
¿Qué necesitas?
El doble del mínimo como líder,
más un 10%.
¿Y Alabama?
Está tan verde como la hierba.
Yo me ocupo de él.
Sí, está verde.
No le busques habitación a Alabama.
Se queda conmigo.
No cambias.
Ray, vuelve a la cama.
Estoy bebiendo agua.
Eso ya lo veo,
pero mamá aún no ha acabado.
Por primera vez,
un aplauso para The McSon Trio.
Ampliado hasta Navidad
THE McSON TRIO
- ¿Sales ya o qué?
- Enseguida.
Mamá tiene más tarta de chocolate
para ti, nene.
Maldita sea.
ENTRADAS AGOTADAS
FIESTA DEL 4 DE JULIO
NUESTROS FAVORITOS, LOS McSON
AMPLIADO HASTA ACCIÓN DE GRACIAS
De gira no nos llegan 5 $ al día.
¿Por qué no cobramos
tras el concierto?
Lo gastaríais.
Yo recibo los cheques
y los ingreso.
Quiero ver mis propios cheques.
Tú no ves. Eres ciego.
¿O lo has olvidado?
¿Quieres seguir tú solo
a ver cómo te va?
- Marlene, ¿dónde está Ray?
- En la habitación.
Esos pies.
6-9, ¿dónde estás?
Lionel Hampton me ha pedido
que vaya de gira con él.
Ya. Entonces ¿qué haces aquí?
¿Qué te parece? Su mujer
me echó del autobús de la gira.
Me dijo que volviera
cuando empezara a afeitarme.
7-0, ¿puedes cerrarme la maleta?
Tienes dos manos. Ciérrala tú.
Y dos pies. ¿Me la cierras?
Vale.
Perdón, señor.
Vamos a llegar tarde.
Tengo que buscarme
una casa, Gossie.
¿Por qué? Ahora no pagas alquiler.
Y una mierda no lo pago.
Vamos, Ray.
¿Por qué estropear algo bueno?
Dale caña a Marlene...
y nos hará ricos a todos.
Señor, perdón.
Recién llegados
de su gira por Yakima Valley,
The McSon Trio.
Volverán a la misma hora
la semana que viene.
Amigo, te pareces más a Nat
que él mismo.
- ¿Tú eres?
- Ray Robinson.
Soy Jack Lauderdale,
Swing Time Records.
Hola, Jack, ¿cómo estás?
¿Qué te parecería grabar un disco?
Sí. Claro que sí.
- ¿Necesita ayuda?
- Creo que no.
Estamos hablando de negocios.
Entonces hable conmigo,
soy su manager.
- Con quien sea.
- Conmigo.
Jack Lauderdale,
Swing Time Records.
Marlene Andres.
Gossie McGee.
Muy bien. Vamos a hablar
con el Sr. Lauderdale.
- Invito yo, Jack.
- Voy a hablar con él.
Lo estás haciendo muy bien.
Vamos a hablar del disco.
Deja que lo haga Marlene.
Oberon te pedirá un taxi.
Buen concierto, Ray.
¿Quieres fumar, jefe?
Tengo maría fresca,
limpia y sin semillas.
¿Así que es eso?
¿Me colocas
mientras hablan de negocios?
Yo no soy quien te engaña.
Oberon...
Marlene y Gossie
son quienes se aprovechan de ti.
¿Qué?
Se repartieron la tarta
la primera noche.
El 35% del total.
Y Gossie el doble como líder.
¿Líder? Si alguien dirige el grupo,
soy yo.
Paso de esos tarugos.
Voy a seguir por mi cuenta.
¿Quién te contratará actuaciones?
Marlene te tiene pillado.
No va a renunciar
a su fuente de riqueza.
Ray Robinson, eres fantástico.
Eso es. Choca esos cinco.
- ¿Y esto?
- Es de Jack.
Tengo su número del hotel.
Vamos, Q. No es tan difícil.
Inténtalo otra vez.
Si bemol, do séptima, subes,
tresillo.
¡Sí! Eso es.
¡Ray! ¿Qué te dije
de cocinar a oscuras?
Vas a quemar la casa.
¿Para qué necesito la luz?
No hace falta que cocines.
Hemos traído comida.
Devuélvela. He hecho pollo frito.
- Pruébalo, 7-0.
- Ya era hora.
Comida casera.
- No, gracias.
- Está buenísimo.
Sólo le falta la salsa picante.
¿Qué ha dicho Lauderdale?
Le calé al momento.
Es un estafador barato.
Ya.
Swing Time sólo ha tenido un éxito,
Open the Door, Richard,
una chorrada de disco.
¿Y lo de grabarme a mí?
Lo hará. Si pagamos los gastos.
Además de mentirosa, ladrona.
- ¿Qué has dicho?
- Esto.
Esta noche
he visto a Jack Lauderdale...
y me ha dado 500 $ como adelanto.
Iré de gira con Lowell Fulson...
ganando el triple que aquí.
¡Mentira!
No va a llevar a un ciego de gira.
Tú necesitas que te cuiden.
Él no tiene tiempo para cuidarte
como yo te cuido.
¿Tú me cuidas?
¿Por eso te pagan el doble?
- ¿Quién te lo ha dicho?
- Es verdad, ¿no?
Os habéis aprovechado de mí.
- Ray, escucha.
- ¡No!
Lba a hablarte de eso.
Pues habla.
No hagas estupideces.
Puedo ser ciego, pero no estúpido.
Q, bájame la maleta.
- ¿Cómo?
- Tráemela.
- ¿Ahora mismo?
- Sí.
Ray, hemos pasado mucho juntos.
Puedo explicártelo todo.
- Piensa en lo que haces.
- Es un error.
Ese payaso hace promesas
que no cumplirá.
Si le sigues, eres tonto.
Haremos un trato nuevo.
Lo que tú quieras.
El trato es que tú le des caña.
Te vas a romper la crisma
en las escaleras.
Ray, nunca te he visto
hacer algo así. Nunca.
Eso no es nada, 7-0.
No hagas trampas, Ray.
No me coges, George. Vamos.
¡Aretha!
Vamos, George.
Aretha Robinson,
¿te has vuelto loca?
Me prometiste ir a medias.
- Y así es.
- ¡Una mierda!
Cobras una cosa a los blancos
y me pagas otra.
- ¿Quién va a lavar esto?
- ¡Tú! ¡Págame mi dinero!
Aquí tienes tus dos dólares,
pero no esperes más trabajo de mí.
Ya tengo todo lo que quería de ti.
Ray, George, vamos.
Eso es. Vete de aquí y no vuelvas.
Tenéis que aprender
a leer y escribir...
para no trabajar para gente así.
Además de mentirosa, ladrona.
- ¿Entendido?
- Sí, mamá.
Huele eso, Ray. El olor del éxito.
Estamos en Los Ángeles,
donde el ***
va a extender sus alas.
Mi oído no me engaña.
¿Es Art Tatum?
Sí. ¿Quieres conocerle?
No puedo.
Art Tatum es el más grande.
Oye, Ray, tenemos que hablar
de tu nombre: Robinson.
Sugar Ray se ha hecho
el dueño del Robinson.
Estoy pensando en usar
tu segundo nombre: Charles.
¿Qué tal Ray Charles?
El que quieras,
pero que esté en el disco.
Brindemos por eso.
¿Qué pasa?
- Dios mío.
- Choca esos cinco.
¿Qué tal, amigo? ¿Cómo estás?
Lowell Fulson,
tu nuevo pianista, Ray Charles.
Ray Charles, la sensación ciega.
Voy a poner eso
en la portada del disco.
Él es la sensación.
Me encanta su música.
Tiene buen gusto.
Nunca ha salido de gira.
Ocúpate de él.
Como de un hermano.
- Ahora vuelvo.
- Vale.
- Tú la de la izquierda.
- Déjame hablar a mí.
No entres ahí.
Ya sabes lo que dijo mamá.
Vete a casa y no le digas nada.
¡Vete, George!
¡Vete de aquí!
Oye, niño,
¿quién te ha dejado entrar?
Debes de ser el hijo de Aretha.
Sí, señor. Ray Charles Robinson.
Te he visto fisgoneando por aquí.
Te gusta el piano, ¿eh?
¿Quieres aprender? Ven aquí.
Acércate. Te voy a enseñar
cómo se toca.
Te voy a enseñar a tocar.
Te voy a enseñar tres notas, ¿vale?
Ésta es la primera.
Tócala.
Y ésta es la segunda.
Tócala.
Ésta es la tercera.
Vale, así es como va. Escucha.
Tócala.
¡Bien!
Inténtalo con las otras.
EL CIRCUITO CHITLIN'
Al llegar al club
te encargas de probar con el grupo.
Son unos vagos cabrones,
que no se escaqueen.
Estad listos para empezar.
Lowell duerme una siesta
antes de salir,
tú toca lo que quieras
hasta que salga.
Cuando toque Lowell,
que el grupo esté atento.
- Una cosa.
- ¿Qué?
¿Te dijo Jack
que cobro en billetes de un dólar?
Haz tu trabajo y tendrás tu dinero.
SÓLO ESTA NOCHE - EN PERSONA
Lowell Fulson Y SU GRUPO
¿Por qué te llaman Tarugo?
¿Que por qué? No lo quieres oír.
Hay algo que yo sí quiero oír.
¿Alguna de vosotras...
sabe dónde nos darían
un buen filete a estas horas?
¿Te refieres a uno grande,
duro y jugoso?
Sí, a eso me refiero.
Tarugo, ¿adónde vais?
No voy a hacer de niñera
de un ciego.
Lo siento, Ray.
Sólo caben seis en un taxi.
Vamos, señoritas.
SALÓN
¡Págame, amigo! Eso es.
Juego a los dados
desde los 12 años.
Nunca juegues
en la tumba de una blanca.
- ¿Por qué?
- Trae mala suerte.
Música en directo
Esto por llegar tarde.
- Serás rastrero, Wilbur.
- Apártate.
El Sr. Billete de un dólar.
Cinco, diez, quince, veinte...
¿Quieres volver a contar?
Muy bien, maldito seas.
284, 285...
Oye, tío,
no soy un perro para ciegos.
Tarugo, abre.
Tengo que hacer un pis.
¿Qué haces? ¡Cierra la puerta!
Vamos a estar aquí un rato.
Usa el de señoras, a tu derecha.
No quiero usar el de señoras.
Es por ahí.
¡Dios!
¿Estás bien, Ray?
Habré resbalado.
Hay una cañería rota.
Hay un montón de agua.
Venga, tío. Cierra la puerta.
Déjate de bromas.
Estaremos aquí un rato. Vamos.
- ¿De dónde eres, Ray?
- Del norte de Florida.
Un chico de Florida.
- ¿Tu gente sigue allí?
- No.
Bien.
Perdona, pero
¿cómo te las arreglas...
sin bastón ni perro?
¿Tú te las arreglas
sin bastón ni perro?
No quería ser curioso.
Veo con mi oído.
Todo tiene su sonido.
Llevo suelas duras,
mis pasos rebotan en las paredes.
Si hay una puerta abierta,
el sonido cambia.
Vaya. Qué bueno.
Tienes que aprender
para arreglártelas solo.
Durante la guerra
tuve mucho que aprender,
o no estaría aquí.
Ver tanta muerte no es normal.
Sí, ver la muerte no es normal.
¡Niños, apartaos del alambique!
¡Ya lo sabéis!
¡A ver si me coges!
No os acerquéis al fuego.
Y lavaos para cenar.
¿Me oyes, Ray?
La llevas.
- No, no me has pillado.
- No hagas trampas, Ray.
Vale, la llevo yo.
Ahora la llevas tú.
Ya no juego.
Marica.
Venga, Ray. Vamos a nadar.
Vamos a nadar en la tina de mamá.
Ray, juega conmigo.
Bájate de ahí
antes de que te vea mamá.
¡Soy un gigante!
Menudo gigante.
Vamos, George, no estoy jugando.
No es divertido.
Niños, tengo guisantes con arroz.
Y queda maíz de ayer.
Si sois buenos,
puede que haya tarta de fruta.
Ray, te he dicho...
¡Dios mío, no!
- ¡Es el niño de Aretha!
- ¡Respira, cariño, respira!
Respira, cariño. ¡Échala!
¡Échala, por favor!
- Respira por tu mamá.
- Vamos, George.
¿Por qué no has hecho nada?
¿Por qué no me has llamado?
- ¡Dios, ayúdanos!
- El Señor se lo ha llevado.
Bueno.
Parada para comer y mear.
Hay comida caliente. 45 minutos.
- Me comería un caballo. ¿Dónde?
- Sigue tu nariz. Por ahí.
- ¡Wilbur!
- ¿Qué?
45 minutos no es suficiente.
- Necesitamos más.
- Para comer no.
Si tenéis otros asuntos, elegid,
el autobús se va.
Vamos. Hay un cuarto
de lavandería detrás.
Y tú, tú puedes olerla.
- ¿Sí?
- ¿Puedes ayudarme?
Claro.
¡Mercedes!
Os habréis limpiado al entrar.
Ten.
El baño lo tienes delante.
Vale.
- ¿Te pongo un plato?
- No, no quiero.
Vale.
Es pastel de batata.
Vamos.
Ha sido un viaje largo.
¡Oye, tío! Es al final del pasillo.
Lo sé. ¿Qué hacéis?
Mejor que te vayas.
Me iré cuando esté listo.
Tarugo, yo también quiero.
Esto no es hierba.
Y no estamos esnifando coca.
Es caballo.
El caballo te deja vacío.
- Vete.
- Vacío, exactamente como mi vida.
Estaré como en casa.
No voy a esperar toda la noche.
Es su funeral, tío.
- Vamos a comer.
- Me iré después de probarlo.
¿Qué vas a hacer?
El tren se va, hermano.
Yo no sé nada.
- Estás avisado, Ray.
- Me has avisado.
Siéntate. Te voy a llevar de viaje.
Pero será caro. ¿Tienes dinero?
¿Con esto vale?
Con eso vale.
¿Dónde estabas? ¿Y los otros?
¡Venga, que se enfría!
Vas a sentir un pellizco.
No dejaré que me falles.
¿Lo sientes?
Viaja con él.
Es mejor que el sexo.
Nada es mejor que el sexo.
Caminaremos
por las calles de la ciudad
Por donde nuestros seres queridos
ya han pasado
Nos pondremos en la orilla
del río
Donde nos reuniremos
para no volver a separarnos
NUEVE MESES DESPUÉS
Te pondré el ungüento
que me dio el médico.
- No quiero, pica.
- ¡Ven aquí!
Cuesta un dólar.
Más vale que sea bueno.
Levanta la cabeza
como dice el médico.
Te irá bien.
Ray, ven a cenar.
No te frotes los ojos.
No me andaré por las ramas.
Te estás quedando ciego.
Los médicos no pueden hacer nada.
- Sí, pero...
- ¡Para!
Para ahora mismo.
No tenemos tiempo para lágrimas.
A nadie le darás pena
por ser ciego.
- Sécate los ojos.
- Sí, mamá.
Te enseñaré las cosas una vez.
Si te equivocas, te ayudo.
A la tercera vez, tú solo.
Así es el mundo.
Ahora levántate.
Te quedarás ciego,
pero no eres estúpido.
¿Cuántos escalones hay?
Cuatro.
Bien. Tendrás que aprender
a usar la memoria.
Date la vuelta.
Estira los brazos...
y úsalos como ojos
para encontrar la puerta.
Bien. Eso está muy bien, cariño.
Ese tonto saca un disco...
y va de estrella.
Bueno, tiene algo.
Su disco no llegará a las listas.
Tú sigues siendo el mejor.
No era tan guapa.
A ti te pasa algo.
No, sí que es guapa. Déjala en paz.
Mirad a Ray.
Fijaos.
Les toca las muñecas. Así sabe...
si son guapas o no.
Me he fijado en ti toda la noche.
Esta vez ha acertado.
Lo que hace la fama con el vacío.
¿Habéis visto a la chica
del vestido amarillo?
- ¿Habéis oído eso?
- Si te duermes, pierdes.
Te lo quitaremos del sueldo.
Son dos dólares.
¿El siguiente?
Es una pena, Jimmy,
te lo vas a meter en el brazo.
Hago con él lo que quiero.
Vamos. La sensación
de billetes de un dólar.
¿No cuentas más?
¿Qué te pasa? ¿50 $ no te bastan?
No hay 50. Sigue.
Necesitarás la caridad,
ya que tu disco no se vende.
¡Hay una pelea! ¿Qué pasa aquí?
¡A la sensación ciega
no le gusta su paga!
- Me está engañando.
- ¡Hijoputa mentiroso!
¡No te pelees con quien vea!
No seguiré buscando cambio para él.
- Aquí hay 50 $.
- ¿Lo ves, idiota?
¡Cállate! Ray, a partir de ahora
yo me ocupo de tu paga.
¡Estoy harto! Le diré a Jack
que os busque a otro.
¿Seguro? Ir solo es duro.
No te preocupes por mí,
sé cuidarme.
- ¡Mierda, Wilbur!
- Que se vaya.
¿Qué vamos a hacer?
"Tras morir Moisés,
el Señor habló con Josué y le dijo:
"'Moisés ha muerto.
"'Ahora levántate. Vete a Jordania.
"'No temas,
que el Señor está contigo"'.
¿Quién es?
Soy Ahmet Ertegun.
¿Puedo hablar con usted?
¿Qué quiere? Estoy rezando.
Perdón. Volveré más tarde.
Ya está aquí. ¿Qué pasa?
Mi compañía, Atlantic Records,
ha adquirido su contrato
a Swing Time.
Es sobre su futuro.
No me diga. No estoy en venta.
¿Puedo sentarme?
Verá, Sr. Charles,
Jack Lauderdale se ha visto,
digamos que sobrepasado,
y ha tenido que vender
parte de sus talentos.
Cuando surgió su nombre, me lancé.
Soy un gran fan suyo.
¿Y si yo no quiero?
Hay un tipo dispuesto a pagarme...
siete centavos por disco.
¿Usted puede?
Podría prometerle
15 centavos por disco,
pero no los tendría.
Ni él le dará los siete.
Sí le prometo
cinco centavos por disco...
y pagarle
los cinco centavos por disco.
Si piensa en calderilla,
tendrá calderilla.
Si piensa en dólares,
tendrá dólares.
Me gusta cómo pones las cosas, tío.
¿Sabes qué?
Omelette, tú me vas.
- ¿Y ese nombre?
- Soy turco.
La mala suerte de Jack Lauderdale
será mi buena suerte.
Sabía que Atlantic
es más grande que Swing Time.
Sois buenos. Me gusta Atlantic.
Casi me engañas.
Debo ir con ojo con los de ciudad.
En casa lo llamamos
"hacerse el tonto del pueblo".
Esto no es turco.
¿Qué te parece?
Nadie quiere otro Nat King Cole.
¡Ahmet! Es como Charles Brown.
Vale, hablaré con él.
Vale, chicos, paramos.
¡Chicos!
- Cinco minutos.
- No lo pilla.
O tienes un sonido original
o no tienes nada.
Ahmet, ¿qué te parece?
Voy a decirte algo,
pero no me entiendas mal.
Pues dímelo bien.
Te contraté
porque tienes algo especial,
no porque suenes como Nat Cole
o Charles Brown.
Creía que os gustaba.
Nos encantan el timbre de tu voz,
tu virtuosismo, tu energía...
- Pero no mi música.
- No he dicho eso.
Ahmet, esto es lo que hago.
Debo ganarme la vida.
Es lo que pide la gente.
No sé otra forma de hacerlo.
Te ayudaremos a encontrarla.
Cambiemos de ritmo.
¿Conoces el stride piano?
¿Estás de broma?
Quien me enseñó lo tocaba.
Hay una canción. The Mess Around.
Buen título. ¿De quién es?
Mía.
Tú la has compuesto.
- Pues cántamela.
- ¿Que la cante?
No puedo leer la letra.
Vale. Es en clave de sol.
Clave de sol.
Pero estilo Pete Johnson.
Sí, eso es.
Vamos allá. Dos, tres, cuatro.
Puedes hablar de la barbacoa
El grupo saltaba, la gente también
Están en pleno follón
Están en pleno follón
Están en pleno follón
Todos en pleno follón
Bien. Déjame seguir desde aquí.
- ¡Ahora sí!
- Eso está muy bien.
- ¿Qué tal?
- Estupenda.
- ¡Increíble!
- ¿Quién es ése?
Mi nuevo socio, Jerry.
Sr. Ray Charles, Jerry Wexler.
Tranquilo, Ray. Yo observo...
y aprendo a producir un disco.
Estoy asombrado.
Lo nunca visto.
Qué escalas y qué fraseos.
Pues esto te va a hacer gritar.
Estamos escuchando Mess Around,
del artista de Atlantic
Ray Charles.
Y le tenemos en directo
en los estudios KCOH.
Ray, cuando no tocas tu música,
¿qué música escuchas?
Lo cierto es que me encanta
el gospel.
Uno de mis grupos favoritos
es de aquí, de Houston,
los Cecil Shaw Singers.
Ya lo habéis oído, Ray Charles
recomienda a Cecil Shaw.
Pondremos gospel todo el domingo,
pero ahora más Mess Around.
K.B., la uno.
King Bee.
Está aquí mismo.
La Srta. Antwine,
de los Cecil Shaw Singers.
Hola, Srta. Antwine.
Es la tenor
en Jesus Is My Shepherd, ¿no?
Sí.
¿Cómo se ha dado cuenta?
Bueno, yo oigo como usted ve.
Como ese colibrí en la ventana.
- No lo oigo.
- Tiene que escuchar.
Sí.
Sí, puede.
- ¿Oye eso?
- ¿Qué?
Se ha saltado un latido.
¿Le gustó mi disco?
El que puso King Bee.
Era muy bonito.
Diferente a los demás.
He oído mucha música suya.
¿Y también era bonita?
Srta. Antwine, si no le gusta,
sea sincera.
Mi madre siempre lo fue.
No es que no me guste su música.
Es que creo que la he oído antes.
No sé cómo suena
Ray Charles de verdad.
¿Ray Charles? ¿Quién es?
Si usted no lo sabe.
Perdone. No debí abrir la boca.
No. Entonces no sería usted.
No es que no haya oído eso antes.
Pero creo
que nunca presté atención.
Nadie lo había dicho tan bien.
¿Sabe qué, Srta. Antwine?
Sí que es una chica de pueblo.
Sí. ¿Cómo lo ha sabido?
Por cómo ha pedido...
melaza con el pan de maíz.
¿Creció en una granja?
Mi madre era aparcera en Florida.
¿Sigue allí?
Murió cuando fui al colegio.
Lo siento.
Nunca fue muy fuerte.
La pobre trabajó hasta morirse.
No quería
que fuese por ahí pidiendo.
Los niños de mi colegio tejían...
y hacían cestos.
Pero usted no. Por su don.
Por mi oído.
Imito casi a cualquiera...
y me gano la vida
bastante bien con eso.
Si cambio de estilo
y a la gente no le gusta,
¿qué me queda?
Cuando se es ciego, Srta. Antwine,
no se tienen muchas opciones.
Usted parece tenerlas todas.
Tiene el don de sonar
como quien quiera. O como usted.
Hemos llegado. Vivo aquí.
¿El pastor me dejaría entrar?
Soy pecador y necesito rezar.
Su mujer no aprueba
que me visiten hombres.
Soy un alma que necesita salvarse.
Sabe, Srta. Antwine,
me ha hecho pensar.
¿Sobre qué?
Sobre mi vida. Sobre mi música.
Sobre todo.
Ray, ¿no crees que vamos
un poco rápido?
Me voy dos semanas a Nueva York.
Cuando vuelva,
tú marcas el ritmo.
Bien, Sr. Charles.
Bien, Srta. Antwine.
Hasta dentro de dos semanas.
Espera. Te llamo un taxi.
Ya sé. Tres manzanas, dos
a la izquierda, una a la derecha.
Quince pasos de gigante
y estoy en el hotel.
Mess Around fue un buen paso.
Estamos mejorando.
Vamos, Ahmet.
Te has portado bien conmigo.
No os he dado ningún éxito.
Atlantic se ha portado bien,
pero si queréis algo especial,
necesito mi grupo.
Llevar un grupo de gira
cuesta un dineral.
Hasta a Joe Morris le va mal.
Y tuvo un éxito.
Pero yo no soy Joe Morris.
No quiero calderilla.
Pienso en dólares.
Ruth Brown tiene una gira
en Georgia.
- Necesita un grupo.
- Acepto.
Podría hacerle los arreglos,
acompañarla y telonearla.
Vale.
Pero respondes de los números.
Tienes que hacer que funcione.
Voy a hacer que haga
lo que haga falta.
Han pasado dos semanas.
Han pasado tres.
¿Y el pastor? ¿Y su mujer?
En Dallas hasta el lunes.
Pues aleluya.
Della Bea.
Eres como la miel.
¿Puedo llamarte Bea?
Sí, eso me gustaría.
Sólo hay dos tipos
de los que me he fiado de verdad.
Jeff Brown, el manager de la gira,
Tarugo Newman, mi tenor,
y ahora tú.
Pero tienes que decirme
siempre la verdad,
como antes.
Que no te dé pena por ser ciego.
¿Cómo va a darme pena
alguien que admiro?
- ¿Puedo tocar?
- ¿Ahora?
- No, Ray.
- Ahora mismo.
Ahí está. Eso es.
Vale. Sí, está bien.
Puedes tocar.
Voy a echar las cortinas,
que no nos vean los vecinos.
Ray, eso es sacrílego.
¿Qué?
Es una canción gospel.
Lo sé. Es mía.
Me dijiste que buscara mi voz.
Es ésta.
Pero no está bien
convertir el gospel en esto.
¿En qué? ¿Es música del diablo?
¿Música diabólica?
¿Crees que soy malo?
Mira, he tocado gospel y blues
toda mi vida.
Es lo que soy.
Para hacer mi música
tengo que ser natural.
Canto sobre lo que siento por ti.
Sobre cómo te quiero.
¿Qué hay más natural?
Dime.
Más natural que tú y yo.
Hemos cancelado la gira.
¿Qué le decimos a Ray?
Hay que decirle la verdad.
Ruth Brown está embarazada,
así que no hay gira.
¿Y LaVern Baker?
Que vaya ella de gira.
No tiene disco que promocionar.
Escribe unas canciones con Jesse
y las grabará.
Eso llevaría un mes.
¿Qué vamos a hacer?
Tenemos que hacer algo.
Ray tiene un grupo nuevo.
¿Cómo lo ha reunido tan rápido?
¡Jefe! Jefe, están aquí.
Vamos a tocársela.
Tú se lo dices a Ray.
¿Se lo digo yo a Ray?
- ¿Por qué yo?
- Porque fue idea tuya.
Lo de Ruth Brown era buena idea.
Aún lo es.
Tenemos que grabar esto.
Oh, sí.
¿Oyes eso, Nueva York? ¡Qué sonido!
Y son sólo siete tipos en el disco.
Es lo nuevo de Ray Charles...
y no hay nada igual.
Y lo habéis oído primero
en el Moondog Show.
Los de Shaw son los mejores agentes
del circuito Chitlin',
en mi opinión.
Milt Shaw, Ray Charles.
El padre de Milt, Billy,
me llamó la atención
sobre un pianista ciego...
que iba con Lowell Fulson.
Ray, creemos en tu talento.
Queremos ser parte de tu negocio.
Ya tenemos una gira
de diez ciudades...
con Roy Milton's Solid Senders...
Me encanta.
...y Tangula, la bailarina exótica.
Es preciosa.
Ray, te diré que lo tuyo
va a ser algo grande.
Nadie ha combinado
R&B y gospel antes.
I've Got A Woman es un exitazo,
debes aprovecharlo.
Suena bien. Tengo que ir a Texas...
por unos asuntos, luego volveré.
Que sea rápido. Quiero vender.
Mientras me lleves con Tangula.
Della, espera. Voy a por la cámara.
Déjame sacar una foto.
Quedaos ahí. ¡Ray!
Déjame sacar una foto.
Una foto, Della. Vamos.
Con cuidado, Ray,
que son tus últimos pasos libres.
No abras la puerta.
Tienes que llevarla en brazos, Ray.
¡Adelante, Ray! ¡A la derecha!
Ray, ¿necesitas ayuda?
¿Sabes lo que hay que hacer?
¿Puedo entrar?
- Espera.
- ¿Qué pasa, Ray?
¡Abre la puerta!
¿Por qué me cierras la puerta?
La casa es pequeña.
Necesitamos privacidad.
Lo que necesitamos es más espacio.
Lo necesitaremos
para formar una familia.
Sabes que pasaré
casi todo el año de gira.
¿Y si no soy un buen padre?
Mi padre nunca estaba en casa.
Tenía tres familias.
Bueno,
tú vas a tener una,
a partir de ahora.
¿Ahora mismo?
¿Qué te parece?
Eso sí que está bien.
¡Os habéis vuelto locos! ¡Basta ya!
- ¡Necesitáis ser salvados!
- Ya no aguanto más. ¡Parad!
- ¡No lo soporto!
- Esperad.
¡Suéltame!
- ¡Está mal!
- Dejad escuchar la música.
Estáis todos aquí sentados
escuchando al diablo.
Estáis dándole dinero a Satán,
eso hacéis.
- ¿Algún problema?
- ¡Sí!
¡Eso es gospel! ¡Convertís
la música de Dios en sexo!
¡Y le sacáis dinero!
¡No me sonrías! ¡Vosotros también!
¡Vais derechos al infierno!
Tiene razón.
Esto está mal. Todo está mal.
No pasa nada. Que se vaya.
Creed en lo que queráis.
¡Puedes irte solo al infierno!
¿Lo dejamos, jefe?
No, consígueme un barítono
para mañana.
Sólo quiero preguntar a la gente:
Si queréis que siga tocando,
decid "amén".
¡Amén!
Y de paso una chica...
preparada en la iglesia...
- pero sin actitud de iglesia.
- Bien.
Vamos. Seguid.
- Ray, ¿tienes tu reloj?
- Sí.
Bien. Las camisas azules
van arriba,
los pantalones en medio
y las blancas abajo.
Aquí tienes las gafas. Ten.
¿Por qué no vienes de gira
con nosotros?
¿Qué iba a hacer yo?
Harías lo que yo te dijera,
eso harías.
Quiero conseguir
una voz femenina para el grupo.
¿Me ves por el escenario...
grande como una casa?
Sabes que no puedo verte,
pero sé lo que puedo hacer.
No empieces lo que no puedas
acabar. Jeff te espera.
No puedo ir de gira contigo,
no con tu hijo dentro de mí.
Tus cosas de afeitar.
Bea, ya voy yo.
Espera.
Ya voy yo.
¿Cuánto llevas ocultándomelo?
¡Soy tu mujer!
Me alegré tanto al verte...
que olvidé dejarlo con el grupo.
Nada más.
Déjamelo. Es sólo medicina,
nada más, cariño.
Eso no es medicina. No te mientas.
No la vendo. Yo sólo la pruebo.
El veneno no se prueba.
Te mata. Déjalo.
¡Yo hago lo que me da la gana!
¿Y yo? ¿Y tu hijo?
No es que sea un novato.
Si pusiera en peligro
mi música o a ti,
o al niño,
lo dejaría enseguida.
Pero no es así.
¿Cómo lo sabes, Ray?
Puedes hablar
hasta quedarte sin aliento,
que no lo voy a dejar.
- Entonces voy contigo.
- No.
- Pero has dicho...
- No.
¿Sabes cómo es?
Es como tú has dicho.
La carretera no es
para ti ni para el niño.
¿Qué estás diciendo?
Lo que digo es que, cuando vuelva,
espero que estés aquí, en mi casa.
¿Tu casa?
- ¡Jeff, ven a por esta maleta!
- Vale, Ray.
Hola, Della Bea.
¿Estás bien?
Está bien. Gracias.
- ¿Cómo es?
- Muy guapa. De piel marrón.
Eso está muy bien. Me gusta tu voz.
¿Cómo te llamabas?
Mary Ann Fisher.
¿Cantarías una canción de amor...
como un gospel?
El gospel es sobre el amor, ¿no?
¿Te sentirías una pecadora?
Sr. Charles,
amo al Señor y Él me ama.
Pero no soy una hipócrita.
Vaya. No es fácil engañarme,
pero es imposible
engañar al Señor, ¿no?
¿Por qué no ensayamos la canción?
Vale.
Jefe, tenemos que irnos.
Ve delante. Enseguida voy.
- Puedo sentir tu espíritu.
- ¿Seguro, jefe?
Vamos.
Eres increíble.
Y tú también, cariño.
Siéntate a mi lado.
¿Tú qué dices?
- Ray, teléfono.
- Coge el recado.
Es Della Bea.
Mierda.
Dile que estoy ocupado.
No voy a mentir a Bea.
- ¿Es tu mujer?
- Cállate.
Enseguida estoy ahí.
No juegues con esta basura.
Te hará daño.
¿Tiene todos los dedos?
Sí, todos.
¿Puede...?
¿Puede ver?
Sí.
- ¿Quieres cogerle?
- No puedo.
- Vamos, Ray.
- No sé cómo hacerlo.
Para eso has venido.
Con esta mano aguanta la cabeza.
Vale. Así.
Éste es tu papá.
Es pequeño como una barra de pan.
Gracias.
No es un regalo para ti.
Es tu hijo.
Sabes que os cuidaré
a los dos, ¿verdad?
Te quiero.
Y yo a ti, Ray,
pero quiero decirte una cosa.
Sé que eres músico,
pero no vuelvas a traer
la carretera a casa.
La casa que cuido
para ti y nuestros hijos.
Te prometo que no lo haré.
- Es sólo que...
- No digas nada más.
No soy tonta.
Sabes que eres la única
a la que quiero.
¡Mamá, ayúdame!
¡Mamá, por favor!
¡Te necesito!
¡Mamá, ayúdame!
A ti también te oigo, mamá.
Estás ahí mismo.
Sí, aquí estoy.
¿Por qué lloras, mamá?
Lloro de alegría.
Es el tío Jeff.
Tengo mi cámara.
¡Sarah! Vamos.
Pon las flores detrás.
Vale, una gran sonrisa.
Hola, Junior.
Vamos a casa para que pueda comer.
Tengo las galletas que te gustan.
Por los controles de velocidad...
Ilegaremos tarde.
- No te pases del límite.
- Muy bien.
¿Por qué no compramos
la casa de Memphis?
Tendríamos nuestra casa.
No me voy a ir de Houston.
¿A que ella no te hace esto?
Espera, nena.
Adiós no es que desaparezca.
No voy a dejar a mi familia.
Vale, cariño.
No hace falta que te enfades.
¿Y si me das algo más que hacer
en los conciertos?
¿Un solo?
No paras, ¿eh?
Me voy a Nueva York
para darme publicidad.
Quédate aquí, busca material...
y al volver lo hablamos.
Vale.
Me gusta Nueva York.
Cada uno tiene su sonido.
Les encantas, Ray.
Serás portada del Billboard.
Quiero hacer una sesión aquí.
¿Qué tal mañana?
- ¿El grupo está aquí?
- Sí.
Todos menos Mary Ann.
Necesito otros coros.
Lo tengo en la cabeza.
Una especie de baile
entre un hombre y tres mujeres.
Suena divertido. ¿Puedo verlo?
Un baile de voces, Ahmet.
¿Cómo lo has pensado?
¿Como tres Mary Anns?
No, no. Es demasiado suave.
Quiero algo más crudo.
Las Cookies ¿Y las Cookies?
Sí, las Cookies son buenas.
IKE y *** - ¡POR TI!
EISENHOWER - NIXON
Dios, está caliente.
Deberíamos contratarlas.
Ray se nos adelantará.
- Imposible mejorarlo.
- ¡Me encanta!
Lo sacaremos así.
Nunca había hecho un disco
en una toma.
Las Cookies sois buenas.
Cuando suena bien da gusto.
Lo sé. Me entraban temblores.
Es que no pagan la calefacción.
Tengo una pregunta.
¿Os venís de gira conmigo?
¿Cuánto nos pagarás?
- Eso con Ahmet.
- ¿Y él no te hace caso?
Claro que sí. No os preocupéis.
Ray os cuidará.
Mi madre dice
que cuide de mí misma.
¿Tu madre está aquí?
- No, pero hablo por nosotras.
- No.
A ver, "Hablo por nosotras",
¿qué tal 20 $ a la semana?
- 20 $ está bien.
- 40 $ cada una.
- ¿40 $ cada una?
- Ya me has oído.
No, no. ¿Qué tal 25 $?
Lo dejaremos en 30 $.
Aceptaré. Si no,
me dejas en pelotas.
¡30 $ a la semana!
¿Trato hecho?
Sí.
Margie, ¿no?
Margie, a partir de ahora...
os llamaréis las Raelettes.
¿Eso es que somos de Ray?
- ¿Qué voy a hacer contigo?
- Ya se te ocurrirá algo.
¡30 $ a la semana!
¡Seremos las Raelettes!
Tarugo, la hora.
Bob, llegas tarde.
Espera, Jeff. Escuchad.
En adelante haremos
una armonía de cuatro voces.
Ethel, alto.
Margie, tenor. Pat, soprano.
Mary Ann, bajo.
Yo no soy bajo, soy soprano.
Lo haré yo.
Me enseñaron a cantar de todo.
Hablamos de cantar, guapa,
no de llamar a los cerdos.
Eso duele.
¿A quién llamas cerdo?
Quien se pica...
¡Calla la boca o...!
¿A qué vienen esos gritos?
Mary Ann, he escrito algo para ti:
Un solo.
¿Un solo?
Ven. Voy a tocarlo.
¡Ethel! Ven a ver
el piano nuevo de Ray.
- Es un Wurlitzer.
- ¿Un qué?
Tienes que verlo. Es increíble.
Cariño, te he traído tu copa.
- No toques eso.
- Quiere otra canción.
Esto quita el hipo, señores.
Esto sí que es un coche.
¡Qué coche!
Parece un salchichamóvil.
¡Mira esto!
Vamos a probarlo.
Soy el jefe, yo conduzco.
No choques con nada, Ray.
- ¿Estás bien?
- Sí.
- ¿Cuál es tu habitación?
- La 69.
Eres tan malo. Por eso me gustas.
De verdad, ¿cuál es?
La 626.
624.
Estoy deseando llegar.
Aquí está la 626.
- ¿Y la llave?
- Tienes que cogerla.
¿Tengo que encontrarla?
- ¿Es ésta?
- Puede que sí.
No voy a quitarte los pantalones
todavía. Vamos dentro.
Mary Ann Fisher, señoras y señores.
Ya verás qué golosinas tengo.
¿Golosinas?
Te llevarán a la luna.
Dame la mano, Ray.
Hay tres. Ésta es para ti.
Creía que éramos amigos. Pesa poco.
No empieces, Ray.
- Pesa poco.
- No pesa poco.
Si te colocas y vas a pillar,
los camellos lo saben.
Necesitas más disciplina.
¿Sabes qué?
No voy a estropear esto...
discutiendo contigo por nada.
Tarugo, átame.
Vamos, Tarugo.
Arréglatelas tú solo,
ya que sabes tanto.
Adiós, Margie.
Adiós, Tarugo.
Mierda.
En este mundo sólo Jesús es gratis.
Sí. ¿Qué quieres?
Hazme un favor y coge eso.
Me vas a pinchar.
Lo haré si me dejas probar.
Esto no es cosa de niñas.
¡No soy una niña!
Entendido. Pero esto te llevará
a sitios...
donde no quieres ir.
Quiero compartirlo contigo.
¡Escúchame! Si me entero
de que te metes algo,
te echo.
Créelo más que a Jesús.
No digas eso, Ray.
Veo tu actuación todas las noches.
Y cada noche me resulta nueva.
A lo mejor para ti lo es.
Es como si vivieras cada palabra,
y luego cantas de una forma...
que vaya si me rompes el corazón.
Eres un genio, Ray.
Sólo quiero ser parte de eso.
Miradle. Fijaos en el temblor
de rodillas. Tiene el mono.
Está totalmente enganchado.
Pero escucha, es brillante.
No te fíes de un yonqui.
¿Qué quieres que haga? Escúchale.
- ¡Felicidades!
- Felicidades, Ray.
Ya sabes qué se hace.
Respira hondo. Vamos.
- ¿Las ha apagado?
- Todas.
Quiero darles las gracias.
Por favor, otro aplauso
para Margie Hendricks.
Gracias y buenas noches.
- ¿Ves la hora?
- ¿Y qué?
Que tengo un contrato.
¡Ray! Aún te quedan 20 minutos.
¿Qué hago?
Ese loco quiere que cumplamos
hasta el último segundo.
Tranquilízale. Ya me encargo yo.
No pasa nada.
Dicen que tenemos más trabajo.
Era la última canción.
Nunca es la última.
Haced lo que yo haga
y decid lo que yo diga.
Así vamos a hacerlo.
¿De qué disco es?
No lo sé. Aún no existe.
Le diré a Ray que debería grabarla.
Eso es.
Lo nunca visto. Es un éxito.
Fantástica. Pero ¿qué hacemos...
con ella? Es demasiado larga.
Al tocarla
los clubes se vienen abajo.
Garantizado.
Tom, corta el playback.
Ven aquí.
Ray, seguro que tienes razón.
Nunca he oído algo así,
pero ¿cómo la vendemos?
Podríamos cortar
la segunda estrofa.
Si la cortas, te corto en dos.
Vale.
Podríamos dividirla.
Hacer algo tipo cara Alcara B.
Se ha hecho. Qué caray, ¿no?
Es muy *** para los chavales.
Vamos a hacerlo.
¡Sí! Por eso os quiero.
¡Qué caray! Es Atlantic.
Lo editaremos en verano.
Hay menos censura.
Los chicos tienen
más tiempo para divertirse.
Tom, parte la calabaza en dos.
Enséñame lo que sabes hacer.
Lo que tú quieras.
Una mitad en la cara A,
otra en la B. Es lo nunca visto.
¿Cómo te sientes?
Me siento estupendo.
Me refiero a la droga.
Se empieza a notar.
No paras de rascarte y moverte.
¿Os he fallado alguna vez?
No, nunca.
¿Quién hace un disco en una toma?
Lo haces mejor que nadie,
pero no te hablo como empresario.
Escúchame.
Me preocupas tú.
Te lo digo como amigo,
se te ve la combinación.
"Se te ve la combinación".
Pasas demasiado tiempo
con nosotros.
Tranquilo. Si el caballo
se pone pesado,
me busco un circo
y lo pongo a trabajar.
Top 100 de Billboard
6 de julio, 1959
"WHAT'D I SAY"
Mejor disco hasta la fecha
Ya no hace el circuito Chitlin'.
Down Beat le ha elegido
el mejor vocalista masculino.
Si le quieres en Filadelfia,
tendrás que conseguirle
un local mayor.
¡What'd I Say!
"What'd I Say" de Ray Charles
pasa de las listas de R&B...
a subir en las de Pop
Nada de telonero.
Número principal por 1.000 $...
o nada.
Estupendo.
Ray, no sé qué pensar,
no conozco a nadie en L.A.
No quiero que mis hijos
crezcan en el Sur.
En Los Ángeles un ***
puede abrir las alas y volar.
- Pero mi familia está en Texas.
- Pues por eso.
Jeff, di a los chicos
que pueden empezar sus vacaciones.
Vale, jefe. En cuanto estés dentro.
¡Mira qué cocotero tan grande!
No es un cocotero. Es una palmera.
Hay miles de ellas.
Ésta es la llave de tu nueva vida.
Ray.
Ray, esto es demasiado.
¿Has visto en el comedor?
Pero estamos en octubre.
Quería celebrarlo antes
porque tocamos...
durante las vacaciones.
- Eres increíble.
- Tus regalos.
Mira lo que te ha traído Papá Noel.
¡Vamos! La Navidad se adelanta.
A por ellos.
- ¿Qué ha cogido?
- La guitarra.
- Músico como tu padre.
- ¿Sabes tocar?
- ¿Qué más tienes?
- ¿Diga?
¿Cómo tienes este número?
¿Tú qué crees? Que se ponga Ray.
Ray, el teléfono.
Encárgate tú.
Ray, es importante. El teléfono.
- Ahora vuelvo.
- Vale.
¿Quién es?
Es Margie.
Junior, ven a cambiar
el pañal de tu hermano.
No, quiero quedarme
a abrir los regalos.
No quiero.
Que no tenga que repetírtelo.
- Hola.
- Hola, cariño.
¡Sorpresa! He venido a L.A.
A darte una sorpresa.
¿Una sorpresa?
¿Estás loca? Estoy con mi familia.
De gira, yo soy la Sra. Charles.
De gira.
Pero, cariño,
lo tengo todo listo para nosotros.
¿No me has oído?
Tengo una botella de Bols y...
Cállate.
Grabamos dentro de dos semanas.
Hasta entonces.
- ¡Espera!
- Adiós.
Un momento.
Corta. Eso no suena bien.
La armonía de tres voces
no está bien.
Desde el principio.
Eh, socio. ¿Qué es eso?
A que te gusta. Es un ocho pistas.
Cada parte va por separado.
¡Vaya! Estoy deseando verlo.
- ¿Qué es tan gracioso?
- Nada, socio.
Margie está borracha. ¿Jeff?
Vete a dormirla.
Te llevo a casa.
No. Me voy cuando esté lista.
Ahora está lista.
¡Entonces échame, mamón!
¡Me tratas
como a un trozo de carne!
¡No me voy a callar!
- ¿Nos metemos?
- No.
- Que se vayan.
- ¡Tendréis que echarme!
¿Sabéis qué? Que se vayan todas.
Eres un cabrón insensible.
¡Suéltame, Jeff!
¡Eres un cabrón insensible!
¡No mueve un dedo por mí!
Claro que no.
¡Suéltame, Jeff! ¡Mierda!
Se le ha caído un zapato.
Vamos a trabajar.
Tom, grabamos mi voz...
y terminamos la armonía.
¿Cómo, Ray?
Si has echado a las chicas.
Lo sé. Eso es cosa mía.
Enciende eso.
Yo haré las partes de las chicas.
Y trae una chica
para el "Oh, Johnny".
Un minuto.
¿Una chica para el "Oh, Johnny"?
Creo que ya sé.
EL INCOMPARABLE RAY CHARLES
No hay límites. Te he conseguido
un aumento de 5.000 $ por noche.
Subirán hasta 15.000 por noche.
Ensayo en 10 minutos.
Jeff, ¿puedes traerme tabaco?
Claro, jefe.
¿15.000 por noche?
Tu contrato con Atlantic
vence dentro de cuatro meses.
Tengo el contrato.
Me van a doblar los royalties.
Antes de meternos en eso,
se me ha ocurrido buscar
qué más hay por ahí.
Ayer tuve una charla
muy productiva con ABC-Paramount.
¿ABC? ¿Quién te lo ha pedido?
Atlantic es una familia,
como la agencia Shaw.
Mi trabajo es conseguirte lo mejor.
ABC está interesada.
No.
¿Cómo de interesada?
Un adelanto de 50.000 $
anual durante tres años.
Tú produces tus discos.
Deducido el coste de grabación,
te darán...
el 75%.
Ahmet y Jerry llegan esta noche.
¿Esperarás hasta que aclare
las cosas con ABC?
Mi madre decía
que no hay nada de malo en hablar.
Basta de formalidades.
Vamos al despacho, Ray.
Espero poder tutearte.
Quiero que estés cómodo.
Porque todo será mejor en ABC.
Pasar a una grande...
significa que venderás más...
y atraerás a más público,
tanto blanco como ***.
Sr. Clark,
llevo mucho tiempo en Atlantic...
y quiero darles la oportunidad
de igualar la oferta.
Por supuesto.
Dudo que sean capaces.
Es una gran oferta.
Como produciré mis discos,
me preguntaba si podría también...
ser el dueño de los masters.
Ray, nunca lo hemos hecho antes.
Nadie lo ha hecho.
Tendrá que ser así...
si voy a dejar Atlantic.
Ahmet y yo creemos que Atlantic
es una familia. Se ve que tú no.
Ahmet no se lo creía.
¿Sabes qué dijo?
Que tú nunca nos darías la espalda.
¡No por un mercader como Sam Clark!
Muy bonito.
Sam Clark es un parásito...
que no distingue
a Earl Hines de Art Tatum.
Te hemos dejado crecer.
No es que nos atribuyamos
tu talento, pero lo fomentamos.
Te dimos libertad.
¡Maldita sea!
Nos merecemos algo mejor.
Os agradezco
todo lo que habéis hecho.
Ahmet, estoy orgulloso
de nuestro trabajo.
Atlantic ha ganado dinero
con mis discos, ¿no?
Nos ha ido muy bien.
Me habéis enseñado
que la música es un negocio...
y a buscar el mejor trato.
75 centavos de cada dólar y...
los masters es un trato muy bueno.
¿Podéis igualarlo?
Ray, nos encantaría,
pero no podemos.
Es más de lo que se lleva Sinatra.
Estoy orgulloso de ti.
Se las van a ver
con el tonto del pueblo.
Se le pasará.
Siempre dais con los mejores.
Escucha esa basura.
Dijiste que ABC
no le iba a obligar a nada.
No lo han hecho.
Fue idea de Ray.
Algo nuevo.
¿Qué somos nosotras? ¿Algo viejo?
Sí, ¿y nosotros?
También tenemos que comer.
Es un éxito. ¿Qué tiene de malo?
Los críticos dicen
que es comercial.
La orquesta, el coro,
el show de Perry Como.
Si siento la música es que es real.
No lo es.
Ray Charles es un vendido.
El Liberace ciego
ha olvidado sus raíces.
Quincy Jones. Una foto con los dos.
- ¡6-9!
- ¡Chaval!
Oye, se acabó la entrevista.
- Me encantaría hablar con los dos.
- Otro día.
Mírate. ¿Qué tal, tío? Te veo bien.
Déjame verte. Tú también.
¿Has oído lo que dicen?
Que ya no soy bueno. Soy comercial.
Pues saca otro disco.
Te diré,
no es tan fácil tener éxito.
¿De dónde sales?
París.
- Bonjour.
- Sí, tío. Francia es el lugar.
Lo que tocas es algo nunca visto.
Deberíamos grabar algo juntos.
A la gente le encantaría.
¿Adónde vas ahora?
A Washington, Richmond,
Virginia, Georgia.
Cuando sale un disco,
hay que venderlo.
¿En el Sur?
Ya no voy por allí.
Es donde está el dinero.
Cuando me fui de Seattle con Hamp,
fuimos allí.
Fue como entrar en una celda.
Un *** es un "chico"
en Misisipi...
aunque tenga 80 años.
Yo no vuelvo a tocar
para un público segregado.
Si es lo que sientes.
En serio, Ray.
Tenemos que hacer algo.
En fin, qué carajo,
es más dinero
que dejas en la mesa para mí.
Coge el que quieras.
¿Lista para trabajar?
¿En qué?
Ven aquí. Tienes que ayudarme.
Percy me ha enviado música nueva.
¿Sabes lo que dicen de mí?
Que me he perdido,
que soy comercial.
Lo mismo podrían decir de ti.
Eras nuestra alma.
Ahora estás siempre borracha.
El alma borracha
de un yonqui ciego. Vaya pareja.
¿Por qué no te vas de aquí?
No estoy borracha, Ray.
Estoy embarazada.
Eso es. Voy a tener un hijo tuyo.
Bueno, no puedes.
Habla con el médico.
Deshazte de él.
¡Dios mío!
¿Porque no soy tu preciosa Bea?
¿No valgo para tenerlo?
Duermes en mi cama
todas las noches. ¡En mi cama!
Voy a tenerlo, Ray.
¡No, Ray! ¡No!
Escúchame.
Sabes que me importas.
No dejaré que te pase nada.
- Yo lo pagaré todo.
- ¡No!
Te costará más que dinero.
Quiero que la dejes, Ray.
Ven con nuestro hijo.
Estás loca.
Sabías cuáles eran las reglas.
Sabes que no dejaré a mi familia.
¿Dejar a tu familia?
Estás loco, ¿sabes?
Entre las drogas, la música y yo,
ya has dejado a tu familia.
Y lo triste es que ni lo sabes.
¿Sabes qué?
A partir de ahora,
entre los dos sólo negocios.
Eso es. Conserva esa furia.
Ray, soy Sam.
¿Me oyes? Soy Sam.
Hit the Road es número uno.
ABC está anunciándolo
en toda la prensa.
Y enhorabuena
por tu candidatura al Grammy.
Sé que vas a ganar.
¿Estás bien?
Sé feliz. Te va bien.
Gracias, Sam.
De verdad que me alegro.
Sí.
Le pediré el dinero a Jeff
al salir.
Margie, no tienes por qué irte.
Estoy en tu disco.
Si voy a cantar sola,
ahora es el momento.
No quiero...
No quiero que cantes sola.
Por una vez, haré algo por mí.
¿Te acuerdas del colibrí?
¿Qué?
El colibrí, Bea.
No quiero que te vayas.
Te recogerán en San Agustín.
Al llegar enséñales este cartel...
y diles que eres
Ray Charles Robinson.
Y no te comas los bocadillos
de golpe.
No me hagas marcharme.
Seguiré con los demás niños.
Seré bueno, como George.
Esto no tiene que ver con él.
Te he ayudado
hasta donde he podido.
En el colegio para ciegos
aprenderás más.
Necesitas una educación.
- ¡No la quiero!
- No digas eso.
¡Quiero quedarme contigo!
¡Para! No quiero que vivas
pobre como yo, ¿me oyes?
Si quieres hacer algo
para que me sienta orgullosa,
prométeme que no dejarás
que nadie haga de ti un lisiado.
No dependas de la caridad,
válete por ti mismo.
Te lo prometo.
Te quiero, cariño.
Estoy orgullosa de ti.
¡No más segregación!
LOS MISMOS DERECHOS
NO MÁS SEGREGACIÓN
Ray Charles y su ORQUESTA
Bienvenido a Augusta, Ray.
Me alegro de verte.
¿Apoya la manifestación, Ray?
¡Fuera de aquí!
Ray, siento todo esto. Vamos.
Tenéis algo para picar.
¡Sr. Charles!
¡Es para público segregado!
La pista de baile es para blancos.
Los negros en el gallinero.
Así es en Georgia.
¿Cree que no lo sabemos?
En este estado a los negros
se nos persigue a diario.
No puedo hacer nada. Soy músico.
Aquí todos tocamos
para públicos segregados.
Eso es. Vamos, chico.
No tiene por qué ser así.
Podría cambiar las cosas,
¡aquí y ahora!
Lo siento, hijo.
No puedo hacer nada.
¿Lo has oído? Así son las cosas.
Aparta tu culo ***
y llévate esa basura contigo.
Un momento. Tiene razón.
Que vuelvan al autobús, Jeff.
- ¿Seguro?
- ¡Al autobús!
¡Ya lo habéis oído!
¡Volved al autobús!
¿Va en serio?
Al autobús.
Aquí no puedo hacer nada.
Ray, ya me conoces.
No voy a perder dinero
porque hayas tenido una revelación.
No puedo hacer nada.
Hay un contrato.
Incúmplelo y te demando.
- Ganaré, Ray.
- Haz lo que debas.
¡Ganaré un dineral! ¡Seré tu dueño!
Gracias, Sr. Charles.
Usted será el primero.
A ti, hijo.
Tenías razón, toda la razón.
¡No trabajarás más en Georgia!
Su demanda no será
cosa de una multa, Ray.
Tiene influencias.
Puede hacer que no vuelvas...
a tocar en Georgia.
Retirará la demanda si actuamos.
No con público segregado.
Te admiro,
pero no te lo puedes permitir.
Georgia es el estado
donde más ganamos.
No volveré a tocar
en locales segregados, ¿entendido?
Vale, lo entiendo.
Jeff, que vengan todos a ensayar.
EBONY - FEBRERO DE 1961
Ray Charles se niega a tocar
en local segregado
RAY CHARLES MULTADO EN GEORGIA
GEORGIA PROHÍBE A RAY CHARLES
DE POR VIDA
¡Vamos, bailad!
¡Todos a bailar!
¡Ahora a bailar!
- ¿Estás bien?
- Sí. ¿Qué pasa?
Han subido unos chicos.
Déjales que bailen.
A eso han venido.
¡No les hagan daño!
¡Déjenles que bailen!
¡Seguid!
Sr. Charles, tenemos un telegrama
para usted.
- Tiene que firmar.
- Ya voy.
Policía de Indianápolis.
Se han quejado de música alta...
¿Adónde vas, compañero?
Voy al baño.
Esposa al hijoputa.
¿Reconoces esto, Ray?
La heroína es ilegal.
No es que trafique.
No hago daño a nadie.
Haces daño a todo el mundo.
Tu música envenena...
las mentes de los chicos.
Voy a encerrar tu culo ***.
Entiéndalo.
Tengo mujer, niños.
Tengo responsabilidades.
Cuéntaselo a esta gente.
¡Que pasen!
- ¿Ha sido una trampa?
- ¿Cuánto lleva enganchado?
Vamos, Ray. ¿De qué se le acusa?
- Hola, cariño.
- David.
- Puede quedarse, Bea.
- No. Vamos.
- Bea.
- ¿Qué?
- Desde que volví...
- Desde que saliste.
Bueno, desde que llegué,
no me hablas.
¿Qué te voy a decir?
Lo que diga no te importa.
Puede que nunca te importara.
- Bea, sabes que te quiero.
- ¿Y vas a dejarlo?
Lo que no entiendes...
es que hay
mucha gente mala por ahí.
Ya.
¿Ray?
Hoy me he traído a Junior
del colegio...
por lo que dicen los niños.
Los niños de aquí son malos.
Vámonos a Beverly Hills.
Ray, no nos vamos.
No es dónde vivamos,
es lo que te estás haciendo.
Los niños te adoran.
¿Quieres que acaben tomando
ese veneno?
Eso no es justo.
¿Qué no es justo, Ray?
Es un golpe bajo.
No me mientas, Milt.
No me mientas, tío.
¿De verdad? Bien.
Dile a Sam que gracias.
Vale, muy bien.
¿Qué, Ray? Dime qué ha pasado.
ABC ha logrado que no me acusen.
No tenían orden de registro.
Les han comprado.
Maldita sea,
¿quieres que vaya a la cárcel?
No. Quiero que dejes de mentirte.
Y así lo ponen imposible.
No lo entiendes.
¡Pues explícamelo!
¡Al salir de aquí,
salgo solo a la oscuridad!
Intento hacer algo
que nadie ha hecho...
en la música.
Pero no puedo hacerlo
si estoy solo en todas partes.
No quiero estar solo aquí,
en mi propia casa.
Bea, si no me entiendes tú,
¿quién me entenderá?
No lo sé, Ray.
¿David? Ya voy.
Ya viene mamá.
Ray, te libramos de una buena
¿y quieres tocar country?
Siempre la he cantado.
Tocaba con los Florida Playboys.
Hemos hecho una gran inversión
y nos va bien.
A los dos, podría añadir.
No queremos que pierdas fans.
Tienes razón, pero creo...
que tenemos mucho que ganar...
y poco que perder.
Ray, no es una buena idea.
Cuando vine a ABC,
el contrato decía...
que elegiría mi música.
¿Lees el párrafo?
En la página 3.
No necesito verlo.
POR PETICIÓN IRRESISTIBLE
RAY CHARLES Y SU ORQUESTA
Buenas noches, St. Louis.
Llega la atracción principal.
El innovador del soul.
El genio en persona.
¡Ray Charles!
Muchas gracias.
Sé que muchos no sabéis...
que me crié en el Sur.
Allí, cuando enciendes la radio,
oyes Grand Ole Opry.
Es lo que crecí cantando,
así que espero que no os importe,
quiero cantar algo para enseñaros
mis raíces country.
¡Unchain My Heart!
¡Georgia On My Mind!
Las luces de arriba
y del entresuelo,
bájalas y dirige un foco a Ray.
Cuando yo te diga.
Cinco, cuatro...
Jeff está aquí.
Papá, si no ves, ¿cómo aciertas
con el color de los calcetines?
Te lo voy a enseñar.
Fíjate en esto.
¿Ves? ¿Aquí?
El dos está cosido
para que pueda notarlo.
El dos es marrón.
El uno es ***. El tres es azul.
¿Dónde está el cuatro?
No hay.
No hay. Eso es.
Diez minutos para cargar.
Nos cambiaremos en el hotel.
Mordieron el anzuelo del country.
Ray, eres increíble.
¿Sabes por qué les gusta?
Las historias. Son muy buenas.
Oye, Joe.
Ray, Joe Adams.
Ziegler le ha contratado...
como locutor de la gira.
Te conozco,
"el mayor de la melodía".
Te oía en la radio en los 50.
Hemos mejorado desde entonces.
¿Qué era eso que contabas?
La señal para las luces.
Así el público se calla...
y puedes cantar la balada
en lugar de chillarla.
Maldita sea. ¿Quién te lo pidió?
Nadie. Había que hacerlo.
A eso me refiero.
Me gusta oír decir:
"Había que hacerlo"...
en vez de: "No es mi trabajo".
Háblame de Central Avenue.
Sé que conoces a Jack Lauderdale.
¡Hola, Nueva York!
¡Hola, Boston!
¡Hola, St. Louis!
¡Hola, San Francisco!
EL DISCO DE RAY SUBE
COMO LA ESPUMA...
Ray, buenas noticias.
Portada de Cash Box.
"El disco del momento: Modern
Sounds of Country & Western".
- Estás en racha.
- Eso dicen.
Discos que venden,
conciertos llenos.
Necesitarás un asesor
para tu dinero.
Espera, Tarugo,
tengo todos los instrumentos.
Jeff, Joe salió en Carmen Jones.
¿Quién era el director?
Otto Preminger.
Estuvo en Broadway con Lena Horne.
Era un secundario.
¿Es eso cierto?
Prepárense para una gran noche.
La más innovadora
y única voz de la actualidad.
Por favor, den la bienvenida...
Es un placer...
Al único...
¡Les presento al Sr. Ray Charles!
Hay un parque para los niños
al final de la calle.
Se ve todo Los Ángeles desde allí.
Beverly Hills
no tiene estas vistas.
¿Qué te parece, Bea? Te gusta, ¿no?
- No lo sé, no lo he visto.
- Tiene que gustarte.
Voilà.
El vestíbulo impresionará
a quien entre.
Escaleras tipo
Lo que el viento se llevó.
Que nos retraten
como Rhett y Escarlata.
Bea, tráele aquí.
Espera a oír lo que hay en la sala.
¿Qué?
He hecho construir una chimenea
de mármol de dos pisos.
¡Caray! ¿Qué te parece?
Es muy grande.
- Desde luego, 800 metros cuadrados.
- La más grande del vecindario.
¿La apruebas?
Es un palacio.
¿Te parece grande?
Espera a ver los 3.000 metros
cuadrados de RPM Incorporated.
¡Las oficinas!
Aquí lo tienes, Ray.
Tu flamante estudio.
¿Con lo que quería?
Lo más avanzado. De Tom Dowd,
una mesa de mezclas de ocho pistas,
dos grabadoras, todo.
Más grande que una casa.
Tu baño está a la izquierda.
Detrás de ti, mi despacho.
Tu bar privado, a la izquierda.
La botella de Bols, en el centro.
Cómo me conoces.
Si se acaba, estoy al lado.
Está bien.
- Construida por Ray.
- Sí.
¡Ray Junior, más despacio!
¡No es un campo de béisbol!
Residencia de los Charles.
¿Sr. Charles?
¡Trae a ese niño!
¡Tengo un perrito con su nombre!
¿Diga?
Sí, sé quién eres.
¿Cómo? Dios, no.
Cogeré un avión
y estaré ahí en cuanto pueda.
¿Qué ha pasado?
Margie ha muerto.
¡Dios mío! ¿Cómo?
Una sobredosis.
Yo no la inicié, Bea.
No le dejaba hacerlo. No le dejaba.
Seguro, Ray.
Fuiste un buen ejemplo.
¿Y su hijo?
¿Lo sabías?
Se llama Charles Wayne.
Nació el 1 de octubre
en Nueva York. Tiene tres años.
El niño está bien.
Está con su hermana.
Les enviaré dinero.
No hace falta.
Ya lo hago yo todos los meses.
El Sr. Charles llegará
dentro de cinco minutos.
Las partituras que os da Jeff...
debéis entregarlas al final de...
Llegas tarde, 50 $ de multa.
No llego tarde.
Les dejo 10 minutos de gracia, Joe.
Son las 14:05. Llega tarde.
Pagará 50 $.
¿Cómo? ¿Dónde está Ray?
Hablarás conmigo, no con Ray.
Hablaré con quien me dé la gana,
y contigo no, desde luego.
Capullo.
Ray, el tonto de Joe Adams
quiere multarme por llegar tarde.
¿Cuándo has llegado?
¿Cómo? Ahora mismo.
Aún se están preparando.
- Jeff no...
- Yo no soy Jeff.
Eso está claro.
Ray, dijiste
que el grupo era cosa mía.
Lo es.
Entonces, Tarugo, vuelve al ensayo.
Ya sabes qué pasa.
Tú lo has vivido.
Vete. Yo me ocupo de esto.
Tarugo, vete.
¿Qué pasa, Ray?
Se me pidió que hiciera esto.
Ray lleva un negocio.
No tiene tiempo de oír excusas.
No estoy hablando contigo.
Hablo con Ray.
Dirás que soy blando con el grupo,
pero esos tipos
harán lo que les pida.
Si empiezas con lo del negocio,
perderás a gente muy buena.
Hay colas para tocar con Ray.
No por mucho tiempo, si te conocen.
Ray, eres el líder. Demuéstralo.
Las cosas cambian, Jeff.
Esto no es
como en el circuito Chitlin'.
Si no estuvieras tan ocupado
con tu bolera, te darías cuenta.
Así que lo sabes.
Lo sé todo.
No sé cómo lo has hecho.
¿Crees que te robo?
Si la agencia Shaw
te da parte del 10% que les pago,
¿para qué te pago yo?
Déjanos. Tenemos que hablar.
Puedes irte, Joe.
Estoy en mi despacho.
Ray, ese cabrón te ha metido
esa mentira en la cabeza,
pero nunca te he robado
y nunca lo haré.
Pedí un crédito...
y Milt Shaw me daba un poco más,
pero no soy un ladrón.
¿Y eso de ahí?
¡Un promotor jura
que os repartíais mis superávit!
¿Cómo pudiste hacerlo?
Hemos pasado por mucho,
somos como hermanos.
¿Sabes qué?
Si somos como hermanos,
¿por qué le pagas más a Joe?
Me rompiste el corazón.
¿Sabes qué, Ray? Tú me rompiste
el mío hace mucho tiempo.
Entonces ya está.
¿Sabes qué, Ray? Algún día
tendrás lo que te mereces.
Y que Dios se apiade de tu alma,
hijo de puta.
¿Todo bien, Ray?
¿Y a ti qué te parece?
Díselo. ¡Díselo!
Papá, estoy en el equipo.
Jugamos el jueves.
Qué bien. ¡Caray!
No estaré aquí, me voy de gira.
¿Y si os compro uniformes nuevos?
Dile al entrenador
que lo que cuesten.
- Bien.
- Vale.
Coge la maleta de tu padre.
El avión sale a las 11:00.
Te recojo a las 8:30.
¿Has oído a Ray Junior?
¿Sabes lo que significa para él?
Lo sé, pero hay problemas.
Hemos echado a Jeff.
- ¿Qué?
- Robaba.
¿Jeff? No me lo creo.
Estamos mejor así.
¡Perdonen!
¡Aduanas de EE UU!
Deben identificarse.
- ¿Vienen de Montreal?
- Sí. ¿Qué problema hay?
Nos han dicho
que hay drogas en este avión.
¡Esto es indignante!
Llamaré a nuestro abogado.
No estando en el punto de control.
Les registraremos a todos.
Sr. Charles, empezaremos por usted.
Déjeme su abrigo.
- Me da igual.
- No digas nada.
¿Qué es esto?
Ray, no es un juez de Indiana.
Es federal.
Pueden acusarte de contrabando,
puedes ir a la cárcel.
Los abogados
harán lo que puedan, pero...
¿Diga?
No puedes esconderte toda la vida.
Es mi casa.
Aún no me han encerrado.
No, es mía.
No has pasado aquí ni seis días...
desde que vinimos.
¡No, Ray! ¡Una aguja no lo arregla!
Sólo Dios puede ayudarte.
¿Dios? ¿Sabes cómo es ser ciego...
y tener miedo de la oscuridad?
Rezo cada día por un poco de luz,
y nada.
- Dios no escucha a gente como yo.
- No digas eso.
Para mí,
Dios y yo no nos debemos nada.
Si quiero pincharme, me pincho.
¡Pues adelante!
Pero cruza esa puerta...
y haré algo
que debí hacer hace tiempo.
¡Cojo a los niños y me voy!
No. No tienes a donde ir.
- ¿No?
- No.
¿Crees que temo perder esto?
Sólo temía perderte a ti.
¿Dónde voy a encontrar
a otro Ray Robinson?
He aguantado cosas horribles.
A lo mejor también es culpa mía.
Ya no tengo miedo.
Sabes que te quiero, y a los niños.
Eso es mentira y tú lo sabes.
¿Has visto esto?
Míralo de verdad, Ray.
Ray Charles Junior,
"Mejor jugador".
Estaba tan orgulloso ese día...
hasta que llegaste demasiado
colocado como para ir a su comida.
¡No! Hay algo que quieres
más que a nosotros,
más que a las mujeres
con las que te acostaste de gira,
más que a la droga.
- ¿A qué te refieres?
- A tu música.
Y si no dejas la aguja,
te quitarán tu música
y acabarás en la cárcel.
¿Tanto vale la pena ese veneno?
CLÍNICA DE REHABILITACIÓN
ST. FRANCIS
¿Sr. Charles?
Sr. Charles.
No tiene que pasar por esto.
Tenemos un sustituto
para desengancharle de la heroína.
Tengo que hacerlo solo.
Puedo hacerlo.
No me toque.
Muy bien.
Será a su manera.
¿Doctor?
¡Sr. Charles, ya voy!
No le quedan fluidos.
Póngale una intravenosa.
- Le pondré la aguja.
- ¡Sin agujas!
Es muy importante. Lo necesita.
¡Se escapa!
Metedle en la cama.
¡Ponedle las correas!
Sin agujas.
George, te echo de menos.
Te echo de menos, George.
Parece que lo tiene difícil, Doc.
Caray, me ha vuelto a zurrar.
No volveré a perder así.
El juez de Boston
ha concedido la condicional.
Su abogado le impresionó...
y cree que merece otra oportunidad.
Muy bien.
Pero debe completar
nuestro programa...
y hacerse controles periódicos.
Lo haré.
Hay gente que no me cree,
pero estoy limpio.
¿Quién es George?
Ray,
ha pasado
las peores reacciones físicas.
Debemos empezar
con la psicoterapia.
Nada de loqueros.
Yo sé llevar esto.
Sr. Charles, no es
el primer yonqui famoso que trato.
¿Yonqui?
- Nadie me engaña.
- No lo estoy haciendo.
Si quiere que dé un buen informe,
tendrá que ganárselo.
¿Doc?
¿Dr. Hacker?
¡Ray, ven a jugar conmigo!
No está ahí.
Háblame, hijo.
No soy un mal sueño,
soy parte de ti.
Ni toda esa droga pudo apartarme.
Mamá, cumplí mi promesa.
Fuiste fuerte.
Llegaste adonde nunca soñé.
Pero eres un lisiado.
Ven, cariño. Ven aquí.
¿Ray?
No fue culpa tuya.
Prométenos...
que no dejarás
que nada haga de ti un lisiado.
Que siempre te mantendrás en pie.
Lo prometo.
Durante los siguientes 40 años...
Ray continuó haciendo
discos de éxito, ganó Grammys...
y se convirtió en uno
de los cantantes más queridos.
Pero su mayor orgullo fue en 1979,
en el Capitolio Estatal de Georgia.
Estamos aquí para subsanar
una injusticia de hace 20 años.
En 1961,
a Ray Charles
se le prohibió actuar...
en el estado de Georgia...
por negarse a tocar
para un público segregado.
Afortunadamente,
las cosas han cambiado.
Algunos luchamos por la igualdad
desde la política.
Pero Ray Charles cambió
la cultura de EE UU...
Ilegando al corazón de la gente.
Así que hoy, 7 de marzo de 1979,
nosotros, los representantes
del estado de Georgia,
proclamamos Georgia On My Mind
himno oficial del estado...
y le ofrecemos a Ray Charles
una disculpa pública...
y le damos la bienvenida.
Si tu madre estuviera aquí.
Está aquí.
Nunca se ha ido.
Ray cumplió su promesa.
No volvió a tocar la heroína.
Con todo lo famoso que fue,
nunca olvidó sus raíces y dio más
de 20 millones de dólares...
a universidades y organizaciones
para ciegos y sordos.
Spanish - Castilian