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Una cuarenta y nueve, por favor.
¿Cuánto es la leche?
Cuarenta y nueve peniques.
Gracias.
Gracias.
Te pasas con la mantequilla. Te pasas.
- Oh, me gusta mucho.
La leche está por las nubes.
Medio litro, cuarenta y nueve peniques.
¡Madre mía! Vamos a tener que ahorrar.
Supongo que podemos vender el coche.
¡O aceptar algún huésped!
Cuidado. Está al acecho.
Cómete el huevo.
Está aquí. ¡Válgame Dios!
Sí.
Aquí estamos.
No entiendo cómo ha pasado.
¿Cómo puede haber salido a la calle?
Por favor, tiene que aclarar esto.
¿Quién es su superior?
Voy a tener que llamar a
la comisaría para informar.
Qué día tan bonito.
Ah, ya ha empezado.
Carol llegará pronto,
voy a por bolsas.
¿Hay algo que quiera darle a Mark?
Subiré una maleta por si acaso.
No no no no. El gris.
¿Estás segura?
... qué bien te sienta el gris.
Lo que tú digas.
Donde hay patrón...
No la dejes que se lleve mi periódico.
No, déjelo, que aún no
lo he ojeado, querida.
Perdón.
Esa es mi chica.
Leñe.
Sécalo... Sécalo...
¿Qué ha dicho?
La que has liado.
¿Están para que no entren lunáticos
o para que no salgas tú?
Bueno, me voy.
Llévate la bufanda.
Está refrescando mucho.
Buenos días, señora Thatcher.
¿Cómo está?
¿Se encuentra bien?
Estoy bien, gracias, Susie.
Acabo de leer lo de las bombas.
Oh, es horrendo.
Lo siento.
Son los libros que tiene que firmar.
He traído todos lo que he encontrado.
¿Revisamos sus compromisos?
Dijimos que lo haríamos hoy.
Sí, claro, querida. Hoy.
Ha llegado la invitación de Downing Street
Para presentar su retrato.
La pondré en la chimenea, y hay
otra de Lord Armstrong para
almorzar el primer viernes del mes que viene.
La he rechazado porque va usted a un concierto
esa tarde, pero si quiere que...
Es muy interesante, el programa.
¿Qué van a tocar?
Creo que me dijeron que Rogers y Hammerstein.
Qué payaso es.
Oh, y no se ha llevado la bufanda.
¿Habéis tapado la mantequilla?
Voy yo.
No vayas. Margaret-
Buena chica.
Mañana, hagan lo que hagan,
abriremos la tienda.
Dos pequeñas de buey, señor Roberts.
¿Cuál es la savia de una comunidad?
Los negocios.
No me refiero sólo a los grandes, sino
también a los pequeños, como el mío.
¡Margaret! ¡Las tazas!
En esta isla somos fuertes.
Somos auto-suficientes.
A veces
somos atravesados y tercos
Pero también sabemos
ser solidarios.
Y no hablo de
la limosna del estado.
¿Margaret, te vienes
al cine?
Si ésta no sale, tiene que estudiar.
¡La señorita pedante!
No te dejes llevar por la corriente, Margaret.
Sigue tu camino.
Sigue tu camino. No te dejes llevar por la corriente.
Ábrelo.
He sacado plaza en Oxford.
No me defraudes, Margaret.
¿Madre?
Tengo las manos húmedas.
¡Margaret! ¡Las tazas!
Están hablando de ti otra vez.
¿Qué hora es?
Todavía no es hora de tomar una copa, querida.
Es la hora del té.
¿Qué es eso que llevas en la cabeza?
Lo he visto en el armario y he pensado:
"a la porra, es viernes, ¿por qué no disfrazarse?
Estás ridículo.
¿A señora jefa, no gusta?
No, Denis, a señora jefa, no gusta.
¡Quita los pies!
Son las pastillas. Nunca puedes
estar segura de si las ha tomado.
Yo creo que a veces las esconde.
Oh, ¡te han pillado!
Le dan una hora de lucidez y luego
se vuelve a ir vete a saber dónde.
Quite la pegatina de las tarjetas
en la parte de atrás del coche.
Lo siento, siempre metálico,
siempre metálico.
¡Pues quite la pegatina!
¡Está usted ofreciendo un servicio que luego no da!
Tengo... tengo otro cliente.
- Le diría que se quedara el cambio...
pero no hay cambio.
Hola June, ¿alguna novedad? He traído
todas las bolsas que he encontrado.
(Bomberos y equipos de rescate siguen trabajando
para recuperar los cuerpos en el hotel...)
Hola mamá.
El imbécil del taxista
no aceptaba tarjetas.
Le he dicho que no lleve una pegatina que dice
que acepta Visa y luego sólo acepte dinero.
Oh, qué numerito rebuscando en
el bolso. Pero adiós propina.
No estaba enterada de que
ibas a venir hoy, querida.
Si me dijiste ayer que ibas
a sacar las cosas de papá.
Lo de los armarios.
Y además vengo a ayudarte a vestirte.
Porque Michael y...
- Jaqueline
... vienen a cenar esta noche.
Sí, ya lo sé.
Vamos a comer mero.
Qué cosa tan horrible.
Creen que ha sido Al Qaeda.
Los equipos de rescate y los bomberos
intentan desalojar el edificio.
El Primer Ministro y algunos altos cargos tenían que
estar en el hotel pero se marcharon unas horas antes.
Todo irá bien. Son las tres menos diez,
por Dios, es hora de acostarse.
A las tres menos diez de la madrugada,
una explosión...
ha causado daños considerables
en el Gran Hotel en Brighton
escenario del congreso
del Partido Conservador.
El hotel en el que se alojaban la Primera Ministra
y algunos miembros de su gabinete.
Todos han salido ilesos -
Han muerto cinco personas y otras muchas
están heridas, algunas en estado crítico.
El IRA se ha adjudicado la responsabilidad.
Tenemos que dar un comunicado,
ofreciendo nuestras condolencias.
Bueno, seguro que ya han...
No debemos nunca, jamás, claudicar
con los terroristas.
Hace calor aquí, ¿no?
A ver, mamá, ¿te pones vestido largo o
sólo por debajo de la rodilla?
Oh, debajo de la rodilla, creo. Sí.
¡No, no! No muevas eso. No he
terminado de clasificarlo.
Me han dicho que hoy has salido.
No debes salir sola, mamá.
Ya hemos hablado de eso.
No había leche.
Pues llama a Robert. Él te la traerá
si June no está levantada.
Todavía no soy una inútil.
No te alteres, Margaret.
Nadie está diciendo eso.
Si no puedo salir a comprar medio litro de leche
a dónde va a ir a parar el mundo en el que vivimos.
Por Dios, Carol...
no te pongas pesada.
Siempre has sido así, hija.
Pesada, pesada, pesada.
Tienes que encontrar algo mejor
que hacer con tu tiempo.
No es nada atractivo en una mujer.
Cuando tenía tu edad...
lo último que se me hubiera ocurrido
habría sido ponerme pesada con mi madre.
Cuatro vertical, 10 letras.
Algo 'b' algo 't'
algo 'n'...
... algo algo algo.
Negarse a cambiar de idea.
Obstinarse.
¿Qué?
Llevaré las perlas.
Ahí están.
Mis mellizos.
Gracias, querida.
Conocemos a casi todos. A William,
Michael y su encantadora esposa-
Jacqueline.
Y también está Peter, James R,
James T y ese señor tan simpático
que conocimos el año pasado.
Lo recuerdo.
Y ha traído a su nueva amiga
para animar un poco las cosas.
Porque estamos un poco escasas de mujeres
pero nos arreglaremos.
Siempre he preferido la compañía de los hombres.
¿Mamá?
Hola, señorita Roberts.
¿Confía en ser elegida como
candidata nuestra al parlamento?
Bueno, no me gustan las coaliciones,
nunca han...
Empiece por fuera
y vaya hacia dentro.
Attlee ha puesto sus miras en
la industria siderúrgica, recuerden lo que les digo.
Al final van a nacionalizar
el maldito aire.
Sí, contenga la respiración, señor,
¡es propiedad del gobierno!
¿Y su padre también estaba en
la política, señorita Roberts?
Oh, sí, hasta el fondo.
Fue alcalde de Grantham.
Y también tendero, ¿no?
Sí.
¿Y usted le ayudaba en... la tienda?
- Oh, sí. Era un negocio familiar.
Un comienzo en la política
muy interesante, en mi opinión.
Eso y una carrera en Oxford.
Whisky.
Señor lo que yo creo es que hay que
alentar a la gente a valerse por sí mismos.
Sí, debemos ayudar a la gente, desde luego que debemos hacerlo.
Pero aquellos que puedan hacer algo...
tienen que obrar por sí mismos y hacerlo.
Y si las cosas van mal, no pueden
ponerse a lloriquear sino que...
tienen que hacer algo para que mejoren.
Cambiar cosas.
Con el debido respeto, señorita Roberts,
lo que puede valer para Grantham-
Puede valer muy bien
para la gente de Dartford.
¿De veras?
Yo sé mucho más que los que nunca
han vivido con ingresos limitados.
Igual que las personas que nos cruzamos por la calle,
Cuando voy mal de dinero una semana...
tengo que economizar la siguiente.
Nada como una rebanada
de responsabilidad fiscal.
Un hombre puede llamarlo responsabilidad fiscal,
una mujer lo llamaría buena economía doméstica.
No sé si...
una lección de economía
doméstica es lo que...
los electores de Dartford nos demandan.
Están viendo como la industria se nacionaliza...
como los sindicatos se fortalecen,
y la libra se debilita...
quien pueda sacarnos de este lío,
es mi hombre.
O mujer.
Señoras, ¿nos vamos?
Señorita Roberts, únase a las damas.
Bueno. ¡Nos ha dado una buena lección!
Dinos, Margaret, ¿cómo habrías
llevado esto si fueras la Primera Ministra?
¿Dónde?
Lo de las bombas, mamá. Hoy.
De eso estamos hablando.
Siempre hemos convivido con la maldad.
Pero nunca había sido tan paciente,
ni tan ávida de carnicería, ni tenido tal
ansia de entregar la inocencia al olvido.
Cierto, Margaret, ¿cómo habrías-
La civilización occidental debe pelear para
erradicar ese mal donde quiera que se esconda
o arriesgarse a caer a manos del
terrorismo global en una era nuclear
inimaginable.
El Primer Ministro ha hecho
una declaración excelente.
Sí. Un hombre inteligente. Bastante zalamero.
Varonesa Thatcher, ha sido un placer conocerla.
- ¿Le importa que me siente?
La oí hablar en un congreso
en Brighton en el 84
después de las bombas del IRA
en el Gran Hotel.
Estuvo usted admirable.
Espero que sepa cuánto ha inspirado
a mujeres como yo.
Bueno, antes, tratábamos de
hacer muchas cosas.
Ahora, tratamos de ser muchas cosas.
En cualquier caso, gracias.
Buenas noches, señora Thatcher.
- Buenas noches.
¿Está bien? Agárrate a mí. Eso es.
Desabróchame, que yo no llego.
Tienes una pestaña.
Anda, pide un deseo.
He hablado hoy con el Doctor Michael.
Es muy bueno y carísimo.
Ya sé que no tenías cita
con él hasta el mes que viene...
pero lo he llamado y puede
hacerte un hueco mañana.
Sólo para un chequeo.
Mamá, por favor.
Y a Mark, ¿qué le parece esto?
¿A Mark?
Sí. Dile que suba a verme.
Quiero hablarlo también con él.
Mark está con Sarah y los niños.
Pues dile que suba a
mi habitación cuando...
les de las buenas noches.
¿Te importa, Carol, querida?
No está aquí, mamá.
Mark vive en Sudáfrica...
y no eres Primera Ministra hace mucho...
y papá está...
está muerto.
Tienes cara de cansada, hija.
Deberías intentar dormir un poco más.
A estas horas de la noche
ya no habrá muchos taxis.
Ya me voy. Buenas noches, mamá.
Buenas noches, querida.
La señorita Margaret Roberts, de veinticuatro años,
no ha conseguido hoy su objetivo de ganar un escaño en el parlamento,
paro ha insuflado savia nueva en la
Asociación Conservadora de Dartford.
Que vaya con cuidado el señor Dodds,
el candidato ganador,
esta inteligente joven
le pisa los talones.
¡Come!
Oh, qué desastre.
Espera... espera...
Espera.
Le has quitado miles de votantes.
Has estado espléndida.
No lo bastante espléndida.
Ah, ¿con que sí? Auto-compasión.
Nadie dice que no
necesites un escaño.
Te mereces un escaño.
Pero no lo conseguirás sin
aprender las reglas del juego.
¿Qué juego?
Eres hija de un tendero-
Y estoy muy orgullosa de serlo.
- y a su entender...
una hija de un tendero soltera.
Pero si fueras la esposa de un
hombre de negocios de cierto éxito...
irías al parlamento,
y él sería el hombre
más feliz en...
en donde quiera que te eligieran.
Margaret, ¿quieres casarte conmigo?
¿Qué me dices?
Sí. ¡Sí!
Pero-
¿Qué?
Te quiero muchísimo pero...
Nunca seré una de esas mujeres, Denis,
que van calladas y guapas
del brazo de su marido.
Ni distante en la soledad de la cocina,
haciendo la comida y fregando platos.
Contrataremos a alguien para eso.
- No...
la vida tiene que servir para algo más, Denis.
Más allá de cocinar, de limpiar
y de cuidar niños.
La vida tiene que ser más que eso.
Yo no quiero morirme fregando una taza de té.
No bromeo. Denis,
di que lo entiendes.
Por eso quiero casarme contigo, mi amor.
Ahora, come.
Ahí están mis mellizos.
Cornwall, ¿no?
Por todos los santos...
Mira eso diablillos.
Lo tuyo nunca ha sido el golf, ¿verdad?
Qué feliz se te ve.
Sí, es que lo estaba.
Estás bebiendo mucho.
¿Qué haces?
Tú no eres de mirar atrás.
No escarbes mucho,
no sabes lo que puedes hallar.
Puedes rebobinarlo,
pero no cambiarlo.
Qué deprisa crecen.
El señor Eric Deakins,
laborista, 13437.
El señor Risk, liberal, 12260.
La señora Margaret Thatcher,
conservadora, 29697.
Ya puedo anunciar al nuevo miembro
del parlamento por Finchley de 1959:
la señora Margaret Thatcher.
¡Señora Thatcher!
Señora Thatcher, Airey Neave.
Bienvenida a esta casa de locos. Venga conmigo.
Su señoría, la miembro del
parlamento por Finchley.
Orden.
La excelentísima Secretaria
de Estado de Educación.
Su muy honorable señoría sabe muy bien que no
teníamos otra opción más que cerrar las escuelas.
Porque...
porque los estómagos agradecidos de sus sindicalistas han
convocado una huelga para hundir deliberadamente la economía.
Los docentes no pueden enseñar si no
hay ni luz ni calefacción en las aulas.
Permítame que le pregunte a su señoría,
¿quién tiene la culpa de tal cosa?
A mí me parece que a la Excelentísima
Señora le gusta chillar demasiado.
Y si quiere que la tomemos en
serio tiene que aprender a calmarse.
Si su señoría tuviera el detalle
de prestar más atención...
a lo que le estoy diciendo,
en lugar de al modo en que lo digo,
cabría la posibilidad de que recibiera
una educación valiosa muy a su pesar.
¿Por qué este gobierno
conservador ha fracasado?
¿Por qué ha obligado a tantos
trabajadores del sector público...
a ir a la huelga para intentar
salvar sus puestos de trabajo?
Señora Ministra,
el colapso de los servicios públicos esenciales,
el transporte, la electricidad...
y la sanidad, no se le puede
achacar a los sindicatos,
sino más bien a este gobierno conservador
en el que usted le cabe la vergüenza de estar!
Los cortes de electricidad seguirán a no
ser que podamos llegar a un acuerdo.
Los mineros piden un
aumento de sueldo del 35%
Está claro que no podemos
ni acercarnos a eso.
Los sindicatos no son nuestros
enemigos y nunca lo han sido.
Queremos y siempre hemos querido
el consenso más amplio posible.
Creo que estamos de acuerdo
en que, de momento,
no podemos hacer nada que
exacerbe más la situación.
Claro, Primer Ministro.
La verdad del asunto es que es crucial...
que los ciudadanos nos vean
actuar como conciliadores...
y no como agresores.
- Sí.
Diga, Secretaria de Educación.
Sí, Primer Ministro.
Con el líder del sindicato de mineros
llamando hoy a que se amotine el ejército...
para apoyar las huelgas, no me parece
buen momento para conciliaciones.
Tengan paciencia. La luz
volverá enseguida.
¡Que enciendan las antorchas!
Ah, ministra preparada vale por dos.
Gracias, Margaret.
Tomo nota de sus opiniones.
En esta isla somos fuertes.
Somos auto-suficientes. Napoleón
dijo que éramos un país de tenderos.
Lo decía como un insulto
pero para mí es un cumplido.
Por eso no pudo derrotarnos,
y por eso Hitler tampoco pudo.
Los conservadores creemos en dar a la gente
la libertad y la oportunidad...
de desarrollar todo su potencial,
sobretodo a los jóvenes.
No ambicionemos ser todos iguales.
No lo somos, nunca lo
hemos sido, ni lo seremos.
Debemos alentar a nuestros hijos para
que aspiren a lograr más que nosotros...
porque nuestros niños de hoy
serán nuestros líderes de mañana.
Estamos en 1974 y esto parece
la Segunda Guerra Mundial.
Aguantamos apagones diarios, no
tenemos gasolina. Es un desastre.
Te juro que se me ha
ido todo de la cabeza.
El profesor de la auto-escuela dice que aprobaré
pero yo creo que he dado pocas clases.
Qué tontería, ¿verdad?
Bueno, madre, a la tercera va la vencida.
Carol,
lo único de que debes tener en cuenta es
que todos los demás son imprudentes o ineptos.
La mayoría las dos cosas.
Hay que ser valiente si
quieres llevar el volante.
Vale.
Tuerce... vete un
poco a la derecha...
Pero si voy a la derecha estoy
en el lado contrario de la calle, ¿no?
A la derecha. ¡Tuerce a la derecha!
¡Perdone! ¡Lo siento muchísimo!
¡Mira cómo conduzco!
Gracias, mamá, ¡ha sido estupendo!
Ahora sí que le he pillado el tranquillo.
Si nos llegas a ver, papá.
¿Estás intentando hacerte
el desayuno tú solito? ¡Denis!
El huevo de las narices.
He ido a conducir con mamá.
Y hemos ido por todas partes, papá.
- ¿Ah, sí?
He decidido que me voy a presentar.
¿Para qué?
Me voy a presentar a líder del Partido.
¡Qué tonta soy!
- ¡Buena suerte!
¡Yo creía que mi madre me daba una clase de conducir
y estaba pensando en sí misma, para variar!
¿De qué está hablando?
Esta mañana se examina del carné.
- Oh, claro.
¿Estás diciendo que quieres
ser Primera Ministra?
Lo que estoy diciendo es que alguien
tiene que ponerse los pantalones,
atreverse a decir lo que pasa.
Y esos hombres no tienen agallas.
El Primer Ministro ha sido
muy leal contigo, Margaret.
Pero es débil y ha
debilitado al partido.
Hay que saber cuándo decir adiós.
Estás temblando.
Trae, deja...
- ¡Puedo yo!
¡Denis, por Dios!
¿Qué mosca os ha
picado esta mañana?
Estoy aburrido de decírtelo.
El negocio va regular y el médico
dice que necesito un descanso.
¿Necesitas un descanso?
Los dos sabemos...
que es una entelequia que me elijan
como líder. Jamás me elegirán como líder.
Pero me presentaré. Lo voy a hacer.
Sólo para jorobarles a ver si...
se reafirman en los principios que
el Partido Conservador debe defender.
Hay que hacer tantas cosas.
Eres insufrible, Margaret,
¿no te das cuenta?
Denis, te casaste con una mujer
comprometida con el servicio público y lo sabías.
Y es mi deber...
- No lo llames deber.
La ambición te ha llevado
tan lejos. La ambición.
¡Y a nosotros, a mí y a los chicos,
que nos vayan dando!
¡No te preocupes por mí,
que yo estoy bien!
¿A dónde te fuiste?
A Sudáfrica
- Sí. Sí.
¿Cuántos días tardaste en darte
cuenta de que me había ido?
Seguro que tuviste que preguntarle
a la mujer de la limpieza dónde estaba.
¿Cuándo os perdí de vista a todos?
Estabas muy liada
trepando en la política.
Señora Thatcher, tengo entendido que ha
visitado hace poco los Estados Unidos de América.
¿Ha aprendido algo en esta visita
que pueda servirnos en Gran Bretaña?
Oh, es muy sencillo contestar a eso.
Ellos no le tienen miedo al triunfo.
En Gran Bretaña y en Europa nos hemos
formado, sobretodo, por nuestra historia.
Ellos, sin embargo, se han formado por su filosofía.
No por lo que han sido,
sino por lo que pueden ser.
Desde luego que podemos aprender
mucho de ellos. ¡Desde luego!
Para empezar, el sombrero
hay que quitárselo.
Y las perlas también.
De hecho, creo que todos los
sombreros hay que quitárselos.
Usted parece y habla como...
una esposa conservadora de clase
media-alta y ese voto ya lo tenemos.
Tiene el pelo muy bonito...
pero hay que hacer algo con él para darle más...
- Importancia.
Sí. Darle más impacto.
Pero lo principal es la voz. Tiene un
tono muy alto. Y carece de autoridad.
¿A la excelentísima señora
le gusta chillar demasiado?
El votante no quiere verse
arengado por una mujer o intimidado.
Persuadido, sí.
Ese "desde luego"...
al final de la entrevista,
tiene autoridad,
esa es la voz de un líder.
Verá, está muy bien que hablemos
de cambiarme la voz, señor Reece,
pero que algunos de mis colegas
me vean como su líder...
es como imaginar,
no sé decirle, que siguieran
a su criada a la batalla.
Es mi procedencia y mi sexo.
No importa por mucho que me
intente integrar, y lo he intentado,
no encajo. Sé que nunca
me verán como una igual.
Permítame decirle que
ése es su as en la manga.
Usted es lo contrario a todo lo que
han sido los Tories hasta ahora.
Esto es muy estimulante.
Sólo habría que maximizar
su encanto...
resaltar todas sus cualidades...
y hacer que parezca y hable,
como la líder que puede ser.
Tienes madera para
ir hasta el final.
Por supuesto.
¡¿Primera Ministra?!
Oh no. Oh no no no.
¿En Gran Bretaña?
No puede haber una Primera
Ministra aún en mi generación.
No.
Y le dije a Airey, que no
espero ganar el liderato...
pero que me voy a presentar.
Sólo para darle un meneo al partido.
Si me permites, Margaret,
no estoy de acuerdo.
Si quieres cambiar el partido,
lidéralo. Si quieres cambiar
el país, lidéralo.
Esto que estamos hablando es
superficial. Lo fundamental...
es que no pierdas el rumbo,
y que no te traiciones.
Nunca seas otra cosa.
Sé tú misma.
Déjenos lo demás a nosotros.
Señores, me pongo en sus manos.
En lo del sombrero puede
que lleguemos a un acuerdo.
Pero las perlas me las regaló mi
esposo cuando nacieron los mellizos...
así que... no estoy dispuesta
a negociarlo de ningún modo.
Déjeme que le sujete el bolso,
señora Thatcher, ¿sí?
Y las manos a los costados,
bien relajadas.
Arriba.
Porque la importancia no hay que
dársela a la voz. Es la creencia, el núcleo.
Respire hondo, llénese...
contra mis manos.
Si llamara al señor Thatcher,
¿cómo la haría?
Denis.
Así no. Quiero autoridad,
quiero convicción, quiero...
Eso es. Otra vez,
inspire hondo y...
Denis.
¡Sí, Margaret!
¡Ustedes son la espina
dorsal de nuestra nación!
Las pequeñas empresas
como Helados Loveday.
Tomaré el más pequeño,
porque tengo que cuidar la figura.
¡Para usted, joven!
Creo apasionadamente que la evolución de los negocios
pequeños para convertirse en otros más grandes...
es fundamental para el
futuro de Gran Bretaña.
A Denis le gustan más
de hielo y con palito.
Es el único modo...
de que se puedan crear empleos, trabajos
con mayúsculas, que se puedan sostener.
El sindicalismo fue fundado para
proteger a la clase trabajadora.
No para perseguir e impedir
que los obreros vayan a trabajar.
Eso es destruir empleos y hacer
que este país se arrodille ante ellos.
Y ya basta.
Es el momento de levantarse.
Es el momento de ponerse a trabajar.
Es el momento de devolverle
su grandeza a Gran Bretaña.
¡Díselo claro!
Estás impecable.
La próxima Primera Ministra.
A por ellos. Vamos.
¡La nueva líder del Partido Conservador,
Margaret Thatcher!
Buenas noches, Margaret.
¡Yo apuesto por la yegua como ganadora!
Oh, gracias, Airey. Hasta mañana.
No. No, no! Airey!
El Ejército Irlandés de Liberación Nacional
se ha atribuido el atentado que ha causado...
la muerte del diputado Airey Neave, portavoz
de Margaret Thatcher en Irlanda del Norte.
Si quieres cambiar el partido, lidéralo.
Si quieres cambiar el país, lidéralo.
Tienes madera para ir hasta el final.
Ahora, cuando la prueba se
acerca, os pido ayuda.
Juntos podremos sacudirnos
las cadenas del socialismo...
y restaurar la grandeza de
este país que tanto amamos.
¡Y el único modo de conseguirlo es
que el Partido Conservador sea el ganador!
¿Llegará hasta el final? Bueno,
miren como suben esos gráficos.
Hoy, viernes 4 de mayo, es un
día histórico para Gran Bretaña.
Un gobierno conservador liderado
por la señora Thatcher [...]
[...] la señora Ghandi en India, pero en occidente
no ha habido nunca una Primera Ministra [...]
[...] la primera mujer a la que se le ha pedido formar gobierno.
El premio es vivir en una de las
direcciones más famosas del mundo:
El número 10 de Downing Street.
Eso es, la espalda recta, jovenzuela.
Buenas tardes, Primera Ministra.
Sólo quiero decirles...
que me tomo muy
en serio la confianza...
que el pueblo británico
ha depositado en mí hoy.
Y que trabajaré con denuedo todos los días
para estar a la altura de esa responsabilidad.
Y ahora, quiero compartir
con ustedes una plegaria...
de San Francisco de Asís:
"Donde haya discordia,
llevemos la armonía.
Donde haya error,
llevemos la verdad.
Donde haya duda,
llevemos la fe.
Y donde haya desesperación,
llevemos la esperanza."
¡Hombros atrás, barriga dentro!
Oh. Gracias, Michael.
Dos, uno.
Yo me encuentro sanísima.
No necesito tantas tonterías.
Déjales que miren debajo
del capó, Margaret.
Que vean que todo funciona bien.
Esto ya se pasa de castaño a oscuro.
¿Qué?
- Tú.
Antes de conocerte estuve
veinticuatro años sola...
y puedo arreglarme perfectamente
bien sin ti ahora.
Quieres hacer el favor de
marcharte y dejar de molestarme.
Mire al frente, míreme a mí, eso es.
¿Ha notado sudores por la noche?
- No.
¿Alucinaciones?
No.
¿Duerme?
Sí, muy bien.
Cuatro o cinco horas cada noche.
Entonces, ¿madruga mucho?
Y me acuesto tarde.
Como siempre.
Queremos estar informados.
Nada más.
Sí. Desde luego.
El duelo es un estado muy natural.
Mi marido murió hace años.
De cáncer.
Carol dice que ha decidido dar sus
cosas. Puede que eso le haga bien.
Sí. Fue idea mía.
A Oxfam.
Está todo en buen estado.
Habrá a quien puedan servirles.
Aún así debe ser algo confuso.
A la fuerza, debe sentir...
¿Qué?
¿Qué debo sentir "a la fuerza"?
Las personas han dejado de pensar.
Ahora "sienten".
"¿Qué tal te sientes?"
"Oh, no me siento cómoda."
"Oh, perdón. Nosotros, el grupo, sentimos..."
Yo creo que uno de los grandes
problemas de nuestros días...
es que estamos gobernados por personas...
más interesadas en los sentimientos
que por los pensamientos e ideas.
Pensamientos e ideas.
Eso sí que me interesará.
Pregúnteme lo que pienso.
¿Qué piensa usted, Margaret?
Vigila tus pensamientos,
se convertirán en palabras.
Vigila tus palabras,
se convertirán en actos.
Vigila tus actos,
se convertirán en hábitos.
Vigila tus hábitos,
se convertirán en tu carácter.
Y vigila tu carácter,
se convertirá en tu destino.
Lo que pensamos, nos da forma.
Mi padre siempre lo decía.
Y yo pienso que estoy bien.
Pero le agradezco mucho
que se interese tanto.
Oh, haga el favor de contestar.
Tal vez sea alguien que lo necesita.
Llamo un momento
a Carol para...
decirle que hemos vuelto y
luego le pongo la manta eléctrica.
Sigue, sigue, sigue!
Me cachis.
¡Cuidado!
¿Qué te ha dicho el médico, Maggie?
Ah. Cena fría.
Estamos bajando el nivel.
Se lo has dicho claro a ese
matasanos, ¿verdad, querida?
Como en los viejos tiempos.
¿Alucinaciones, merluzo?
¿Qué se ha creído?
Aunque tú nos das evasivas a todos, ¿no?
Sé que me oyes, querida.
No te esfuerces en fingir que no.
Basta, Denis, ya basta!
A la orden!
Al final lo hace ella. Lo mata.
No sé por qué te enfadas tanto.
No tienes a nadie más con quien charlar.
Si en el Himalaya el hombre
se topa un oso voraz...
¿Sabes?, me asombra que todavía
puedas citar pasajes enteros de Kipling...
pero a que no te acuerdas de
cómo se llama la mujer que...
te ha preparado
ese horrible refrigerio?
No?
Vamos.
Tú puedes.
Mes del año.
Una sílaba.
Rima con "moon".
June.
- June! Bingo.
Sabía que te acordarías.
"Si en el Himalaya el hombre
se topa a un oso voraz...
le suelta un grito tan grande,
que el monstruo suele apartar...
pero si la fiera es osa,
responde a garra y colmillo...
pues ella es más peligrosa que el oso [...]"
Si no te oigo, no te veo.
Si no te veo, no estás aquí.
Y si no estás aquí,
no me volveré loca.
No me volveré loca.
No me volveré...
No me volveré loca.
La baronesa Thatcher ha hecho hoy una visita,
al parecer rutinaria, a su médico.
Aunque es raro que aparezca en público,
la mujer que más tiempo ha ocupado
el cargo de Primer Ministro en el siglo XX
sigue siendo una figura controvertida.
A la mujer a la que los soviéticos bautizaron,
casi con cariño, como la dama de hierro
se le atribuye el mérito,
junto a su amigo Ronald Reagan,
de haber jugado un papel
decisivo en el final de la Guerra Fría.
Sus defensores sostienen
que transformó la economía...
británica e invirtió el declive que
castigaba el país desde la posguerra.
Sus detractores culpan
sus salvajes recortes...
públicos y amplias privatizaciones...
Ya no me reconozco a mí misma.
¿Sigo caído en desgracia?
Van a descubrir un retrato...
que me han hecho en el Número 10
el mes que viene.
Es la invitación que está en la chimenea.
Estaremos Churchill,
Lloyd George y yo.
Sólo los tres.
Les dije que no quiero que armen
mucho alboroto pero insistieron.
Hay un artículo precioso en El Telegraph.
La Mujer que cambió
la Cara de la Historia.
Hace menos de dos años,
la Primera Ministra citó a San Francisco......
y habló de traer fe,
esperanza y armonía a este país.
Denis?
¿La Excelentísima Señora puede negar,
que ha conseguido
la cifra de desempleo...
más alta desde 1934?
La mayor caída anual en
la producción siderúrgica...
y en las minas
de carbón desde 1931.
El mayor colapso de la
producción industrial desde 1921.
Orden, orden.
¿Y puede acaso aceptar que
su economía de libre mercado...
diseñada para que florezca
una creciente clase media...
sólo garantice que los ricos sean más
ricos y los pobres no le importen a nadie?!
Maggie Maggie Maggie! Fuera fuera fuera!
Maggie Maggie Maggie! Fuera fuera fuera!
¿Cómo dices que eres mi madre?
No eres mi madre,
eres un monstruo!
¿Podemos hablar un
momento Primera Ministra?
Sí, pero para llegar
a palacio a tiempo,
Geoffrey y yo saldremos por esa
puerta dentro de un cuarto de hora.
Sé que llevas prisa Margaret,
pero tenemos que
encarar la situación.
Se van a cebar con nosotros
los editoriales de la prensa de mañana.
Nos reventarán.
Se ha filtrado un borrador de tus presupuestos,
Geoffrey, piden nuestra cabeza!
Michael, no podemos a ceder a las primeras
de cambio porque la prensa diga...
No hablo de ceder.
- ¿Pero acaso es el momento de...
hacer tales recortes en mitad
de una de las recesiones...
más profundas que ha atravesado nuestro país?
Hace falta un plan de acción.
- Por supuesto. Una estrategia.
Tenemos que estar preparados.
Sin duda, existe la percepción,
acertada o no, de que hemos perdido
el contacto con el país por completo.
¿De veras?
¿Cuánto cuesta un paquete de Lurpak?
¿Lurpak?
- Mantequilla, Francis.
42 peniques.
La Anchor, 40 peniques.
La margarina Flora, sigue siendo
la más barata: 38 peniques.
Os aseguro que yo no he
perdido el contacto.
“La hija del tendero”
Perdona, no te he oído.
¿Qué has dicho?
Nada, Primera Ministra.
No, no, por favor.
No intentes ocultar tus opiniones.
Por el amor de Dios,
prefiero que las digas...
directa y libremente aquí, en familia,
en vez de filtrarlas continuamente
a la prensa para perjudicarnos.
¿Y bien?
- Pues,
la gente no puede pagar la hipoteca.
La industria manufacturera
está por los suelos.
Gente decente, honesta y trabajadora
está perdiendo su patrimonio.
Empieza a ser vergonzoso.
Primera Ministra, la cuestión
es que debemos mostrar...
Si queremos tener alguna esperanza
de ganar las elecciones.
Ah. Preocupados por nuestras carreras, ¿eh?
Señores, si no recortamos gastos
entraremos en bancarrota.
Sí, la medicina es amarga...
pero el paciente la necesita
para seguir vivo.
¿Debemos dejar de medicarlo?
No! No estamos equivocados.
No pedimos elecciones anticipadas y
las ganamos con el propósito de dirigir...
el declive de una gran nación.
La gente de este país nos eligió...
porque confiaba en que nosotros
podíamos restaurar la salud...
de la economía británica
y eso será lo que haremos.
Si es que tenemos lo que hay que tener.
Algo más?
- Primera Ministra.
Ha vuelto a salvar el día
como siempre, Crawfie.
Es usted un ángel.
No puedes cerrar una conversación
porque no te dicen lo que quieres oír.
No espero que todo el mundo
se muestre de acuerdo conmigo.
Pero qué líder soy yo si no
intento salirme con la mía...
y hacer lo que hace falta.
- Sí.
Pero Margaret,
hay que llevar cuidado de no poner tanto
a prueba las lealtades de los colegas.
Ahora somos una nación dividida,
con un abismo enorme que separa
los empleados de los desempleados.
El plan Thatcher es hacer
trizas el movimiento sindical.
Hay que cerrar las minas
de carbón que sean deficitarias.
Lo que buscamos es el desarrollo
de una industria eficiente.
Están matando de hambre a los mineros para hacerles
volver al trabajo. Su situación es desesperada.
Hay personas que nos
dicen que retrocedamos.
Personas que nos
obligarían a retirarnos.
Pero jamás cederemos ante ellos.
No vacilaremos,
ni siquiera un instante,
en nuestra determinación de
volver a ver prosperar este país.
Un coche bomba ha hecho explosión al
lado de los grandes almacenes Harrods.
Hay 6 muertos y 71 heridos.
11 soldados han muerto hoy por
la explosión de dos bombas en...
los desfiles militares de
Hyde Park y Regent’s Park.
También han muerto 7
caballos en la explosión.
El IRA se ha atribuido
la autoría del atentado.
Y ahora, ya podemos volver
a trabajar como antes.
Vamos querida,
ven a la cama.
No sé por qué haces
esto todos los años.
Es un discurso en el Congreso
del Partido, no la Carta Magna!
Es hora de acostarse, mi amor.
Son las tres menos diez, por Dios.
Oh, lo sé. Ya voy, señor Thatcher.
Ya casi está.
Denis!
Denis-
¿Estás ahí?
¿Estás bien?
Mis zapatos!
Allí creí que te había perdido.
Mark?
Hola, querido.
No, estoy bien.
Estoy muy bien.
¿Cómo está...
Sarah?
Y los niños?
Oh...
No puedes.
Qué lástima.
Yo esperaba verte.
Sí.
Oh... No, está bien.
De verdad, cariño
Que no importa.
Por supuesto.
En otra ocasión.
Sí, cariño.
Sí. Lo estoy deseando, precioso.
Sí.
Mark?
Era Mark. No puede venir.
Ese chico siempre
está desaparecido.
Bueno, le cuesta una barbaridad
traer a toda la familia en avión.
Cómo no! Ya estás buscándole
excusas. Mira qué bien te ha ido.
Sabías que Yul Brynner era
un gitano de Vladivostok?
Sí. Se fue a París a los catorce años...
y representó "El Rey y Yo"...
4625 veces en los escenarios
de Broadway y Londres.
¿Qué haces?
Un poco de ejercicio.
¿Un cóctel?
Estás muerto, Denis.
Ah. Bueno, si estoy muerto...
con quién estás hablando? Bailamos?
La colonia británica de las Islas Malvinas,
en el Atlántico Sur, ha sido invadida.
Argentina afirma que sus fuerzas de infantería
de marina han desembarcado esta mañana...
y capturado objetivos clave, entre
ellos la capital, Port Stanley.
Señores, la Junta Argentina...
compuesta por una banda de fascistas...
ha tenido la osadía de invadir
territorio soberano británico.
Permítanme dejar clara
mi posición negociadora.
No tengo intención de negociar
con criminales ni matones.
Las Malvinas pertenecen a
Gran Bretaña y quiero recuperarlas.
Caballeros, necesito que me
digan hoy si eso es posible.
Es posible, Primera Ministra.
Habrá una fuerza lista
para zarpar en 48 horas.
48 horas. - Pero...
-¿Pero?
El clima resultará un factor decisivo.
Nadie podría luchar allí en invierno.
Si vamos a hacerlo,
hay que hacerlo ya.
¿Por qué no había ninguna
protección naval en las islas?
En la última ronda de recortes militares,
juzgamos que el riesgo de invasión era ínfimo.
De veras?
Sí, Primera Ministra,
y usted estuvo de acuerdo en que redujéramos
al mínimo la presencia naval en la zona.
Margaret, enviar 28000 hombres...
y 100 barcos al sur de Argentina,
a 20000 kilómetros, nos va a costar una fortuna.
No creo que debamos pensar en
el dinero en este momento, Geoffrey.
No podemos permitirnos una guerra.
Hay que hacerlo ya.
Ya.
El gobierno ha decidido mandar
zarpar una amplia fuerza de choque,
en cuanto los preparativos
para tal fin lo permitan.
Primera Ministra, aún tenemos tres semanas
hasta que nuestros barcos lleguen a las islas.
Lo único que decimos es que no deberíamos
renunciar a intentar una solución diplomática.
Ha llegado el Secretario de Estado
estadounidense, Primera Ministra.
¿Y piensa declarar una
guerra por esas islas?
Están a miles de kilómetros,
habitadas por cuatro gatos.
Política y económicamente insignificantes,
sin ánimo de ofender.
Igual que Hawaii.
¿No es verdad?
¿Cómo dice?
En el 41, cuando los japoneses
atacaron Pearl Harbour,
¿su país se quitó el sombrero...
y fue a negociar como un corderito
las condiciones con Tojo?
¿Volvió la espalda a los
estadounidenses de allí...
porque las islas estaban a miles
de kilómetros del territorio continental?
No, no, no!
Nos apoyaremos en nuestros
principios o nos hundiremos con ellos.
Pero Margaret, con el debido respeto,
cuando uno ha estado en la guerra...
Con el debido respeto, señor,
yo he dado batalla todos y cada
uno de los días de mi vida...
y muchos hombres me
han subestimado antes.
Estos también han
cometido ese error...
pero le aseguro que
lo van a lamentar.
Y ahora, haré de madre.
Al, ¿el té cómo le gusta,
con limón o con leche?
El crucero argentino General
Belgrano y su buques de escolta...
van siguiendo el rumbo 273
hacia la costa argentina.
Les seguimos el rastro con nuestro
submarino HMS Conqueror.
¿Ese barco es una amenaza?
Los escoltas llevan misiles
Exocet, Primera Ministra.
Ayer lanzaron...
un ataque en la zona de exclusión
que después abortaron.
Hay riesgo de que
vuelvan a intentarlo.
El Belgrano está navegando
alejándose de las islas.
¿Se puede considerar
eso una amenaza?
Cambia de rumbo muy a menudo.
Hay muchas posibilidades de que intenten un movimiento
de tenaza contra nuestro grupo de transporte.
Yo me inclino por atacar.
Hundir el Belgrano como una advertencia
para que vuelvan todos a puerto.
Quedaremos muy mal a nivel internacional.
Nos verán como agresores.
Eso supondrá una escalada,
Primera Ministra.
Si tiene que haber una escalada,
mejor empezar nosotros.
Sale de la zona de exclusión,
Primera Ministra.
Húndalo.
El HMS Sheffield, un destructor tipo 42,
ha sido alcanzado esta tarde
por un misil Exocet argentino.
Se considera una respuesta al
hundimiento del General Belgrano,
en el que murieron más de 300 marinos argentinos.
Las últimas cifras de
bajas del Sheffield.
Tengo que escribirles.
¿Primera Ministra?
A las familias.
Tengo que escribirles.
Una fragata tipo 21, la HMS Ardent,
ha sido alcanzada por bombas y cohetes.
Ministro de Exteriores.
Acabo de hablar con el
Almirante Fieldhouse.
Me ha dicho sin tapujos que si los argentinos
están dispuestos a arriesgar sus aviones,
tienen misiles suficientes para
paralizar casi toda nuestra flota.
El Presidente Reagan y el Presidente
Bellaunde de Perú tienen...
nuevas propuestas. Nuevas
propuestas para el plan de paz.
¿Plan de paz?
No contemporizaremos.
Esto es una guerra.
Una guerra que ellos empezaron pero,
por Dios, que la acabaremos nosotros.
Francis, ¿quieres que te diga...
lo que voy a escribir a cada una de esas
familias, de esas familias desconsoladas?
Les voy a decir que ningún
soldado británico morirá en vano...
por Las Malvinas.
Teniente Coronel Jones.
Capitán Wood. Capitán Dench.
Como la única Primera Ministra
de la historia de este país...
que es también madre
con un hijo propio,
puedo imaginar su
agonía y su pesar.
Primera Ministra, hemos
asegurado la cabeza de playa.
Las tropas argentinas están
desmoralizadas y mal equipadas.
Los paracaidistas han
conquistado Goose Green.
Ayer, poco después de oscurecer,
nuestras fuerzas rodearon Port Stanley...
y llevaron a cabo lo que el Comandante en Jefe ha
descrito como "un ataque sorpresa nocturno magistral".
Thatcher, a la cama.
Desde sus nuevas posiciones, nuestras fuerzas
pueden ver grandes cantidades de soldados argentinos...
retirándose y volviendo
a Port Stanley.
Nuestras fuerzas están avanzando
para aprovechar ese triunfo.
Bien hecho, Margaret.
Felicitamos a los hombres y mujeres de
nuestras Fuerzas Armadas por su destreza,
su valentía y lealtad a este país.
Nos hemos enfrentado a un
acto de agresión no provocado...
y hemos respondido. Como hemos
respondido en tiempos pretéritos:
con unidad, fuerza y coraje.
Sabiendo con seguridad que,
aunque ha sido mucho el sacrificio,
al final, el bien
prevalecerá sobre el mal.
Y yo les digo a los
caballeros de la oposición...
que hoy no es un día
para protestar...
ni criticar
ni pedir investigaciones.
Que las habrá, no me cabe duda.
Se lo puedo asegurar.
Aunque no tenemos
nada que ocultar, no.
Éste es un día para dejar
nuestras diferencias a un lado,
llevar la cabeza muy alta...
y estar muy orgullosos de ser británicos.
¡Te pillé! ¡Eso tuvo su recompensa, nena!
En las encuestas, pasaste de ser
la Primera Ministra más odiada de la historia
a la niña mimada de la nación.
El mundo a tus pies y Gran
Bretaña volvía a ser ella misma.
Ha caído el muro de Berlín
y se han abierto las puertas.
La policía no hace nada
por parar a la gente.
No estoy de acuerdo. ¡No estoy
de acuerdo en ningún modo!
Pero, Primera Ministra, surgirá
el tema de la moneda única europea.
No creo que el país esté
preparado para eso aún.
Pero no podemos enterrar
la cabeza en la arena.
Muchos diputados conservadores
y ministros dicen...
que debe haber un cambio
en el estilo de gobernar.
Que la señora Thatcher debe escuchar
más y, en ocasiones, transigir.
La cuestión, Primera Ministra,
es que no creo que podamos vender la idea de un
impuesto que pide a todo el mundo que pague lo mismo.
Nuestras políticas pueden ser impopulares
pero son las que hay que emplear.
Primera Ministra, no creo que podamos pedir
a los más pobres de entre los pobres...
que paguen la misma cantidad de
impuestos que un multimillonario.
¡Otra vez con eso!
¿Por qué no?
Porque...
Porque la gente, en su conjunto, cree
que el impuesto es injusto por completo.
Tonterías. Es una tontería.
Es una propuesta muy sencilla:
si vives en este país,
tienes que pagar por ese privilegio.
Un poco. ¡Lo que sea!
Si no pagas nada,
te da igual todo.
¿Qué te importa dónde
vas a tirar la basura?
O que tu barrio sea una porquería.
Tu ciudad, los graffitis... ¿Qué más te da?
No es tu problema.
Es problema de otro.
¡Es el problema del gobierno!
El vuestro...
es que a algunos de vosotros,
os falta coraje para esta pelea.
No habéis tenido que pelear
por nada en la vida...
porque os lo han dado todo.
¡Y os sentís culpables por ello!
Pues debo deciros, en nombre de todos
los que hemos tenido que luchar para subir
y no nos sentimos culpables por ello,
que nos ofenden los gandules
que cogen, cogen, cogen...
y no contribuyen
nada a la comunidad.
Y veo lo mismo,
la misma cobardía,
en nuestra pelea
en la Unión Europea.
Cobardía.
¡Por la soberanía de Gran Bretaña
y la integridad de la libra!
Algunos de vosotros queréis hacer concesiones.
¡Algunos queréis hacer concesiones!
Y he oído que algunos de vosotros...
comulgáis con las propuestas
francesas de última hora.
¿Y por qué no os vais
en un barco a Calais?
¿Por qué no os ponéis una boina...
y pagáis el 85% de vuestro
salario al gobierno de Francia?
Bien.
¿Qué avances realistas podemos
esperar en esta sesión, Lord Presidente?
¿Y por qué no hemos hecho
más progresos hasta la fecha?
¿Y qué es eso?
Eso parece la agenda.
Yo aún no la he visto.
¿Puedo verla?
Sí, Primera Ministra, cómo no.
Aquí hay una falta de ortografía.
Y aquí.
Si tú lo dices.
- Claro que lo digo.
Sólo es un primer borrador.
Esto es ridículo.
¡'Comité' lleva acento en la 'e'!
Acento en la 'e'.
Esto es una vergüenza. ¡Una vergüenza!
¡No me puedo fiar de ti
ni para una simple agenda!
¿Te encuentras mal?
Sí. Estás muy mal.
Dame tu lápiz.
¡Dame tu lápiz!
Si es lo mejor que sabes hacer
deberías irte al hospital...
y yo haré tu trabajo y el mío
y el de todos los demás.
Caballeros,
como el Lord Presidente ha decidido
venir al consejo sin prepararse,
tendré que concluir la reunión.
¡Buenos días!
¡No podemos pagar!
¡No queremos pagar!
Geoffrey.
Es mi carta de dimisión.
Nuestras diferencias me
parece que son irreconciliables.
A mi entender, he hecho lo que creo
más acertado por mi partido y mi país.
Ha llegado el momento de
que otros consideren...
cuál es su respuesta al
trágico conflicto de lealtades...
en el que yo también me he debatido.
El discurso de Geoffrey en la Cámara
de los Comunes ha sido tremendo.
No podría soportar tanta intimidación.
Casi estaba invitando a que alguien
la desafiase en el liderazgo del partido.
Ella se portó fatal.
Yo no le hablaría así ni a mi guardabosques.
- No creo que aguante tanto.
Buenos días.
Comparezco hoy para anunciar...
mi decisión de presentarme
a líder del Partido Conservador.
Sólo siento admiración por
la Primera Ministra, Margaret Thatcher,
pero creo que...
nuestro partido y nuestro país
necesitan un nuevo líder.
Es algo fuera de lo normal.
Soy la Primera Ministra.
- [...] los estatutos del Partido Conservador...
hagan posible que los diputados conservadores
depongan a un Primer Ministro en activo.
¿Quieres, querido?
[...] y él tiene muchos apoyos.
Mientras los diputados conservadores
se reúnen en Westminster para decidir...
a quién van a apoyar en la lucha por el liderazgo,
la Primera Ministra ha dicho que...
nada la distraerá de temas
internacionales fundamentales.
Esta noche aquí en París, la señora Thatcher
es uno de los 34 líderes mundiales...
que han venido a celebrar el final
de la Guerra Fría y a anunciar...
el principio de una nueva era de
cooperación Este/Oeste en tiempos de paz.
La impresión general es que la señora Thatcher
ganará la primera de las votaciones.
"Zanjaremos el tema mañana por la noche",
ha dicho uno de sus empleados de campaña.
¿No estarías mejor
defendiéndote aquí en casa?
Heseltine está haciendo una campaña feroz.
Aprovecho mejor el tiempo viendo
el fin de la Guerra Fría, ¿no crees?
Después de tantos años esperándolo...
Ellos saben lo que defiendo.
¿Seguirá o no seguirá en su
puesto mañana por la noche?
Margaret, no pueden tocarte.
La señora Thatcher no ha conseguido votos
suficientes para asegurarse una victoria...
categórica en la batalla por el liderato
y ahora debe decidir...
si se va a presentar
a la segunda ronda.
Mientras la señora Thatcher cambia París
por Londres para hacer un último intento...
de reunir apoyos para su liderazgo,
es posible que ese barco haya zarpado ya.
¡Traición!
Jamás ganaremos otras elecciones
liderados por esa mujer.
Necesitamos un líder que escuche.
Esto no es por ella,
es por el partido.
Hay que saber cuándo decir adiós.
Sí, pero la cuestión es:
¿cómo se lo decimos a ella?
Si se presentara, yo votaría
por usted. No le quepa duda.
Yo votaría por usted. No le quepa duda.
- Pero no creo que pueda ganar.
No puede contar con la
lealtad de todos mis colegas.
Pero fue el pueblo
el que me puso aquí.
No puede contar con la lealtad
de todos mis colegas, Margaret.
A él le toca decirme
cuándo decir adiós.
Margaret, no puedes
dejar que te hagan esto.
Por favor.
Te destruirán.
Ríndete ahora, mi amor.
No dejes que esos
cabrones te vean humillada.
No vas a ganar, querida.
Esta vez no.
Oh Denis.
Soy la Primera Ministra.
Orden! Orden!
¡Su señoría, caballeros, tiene miedo!
Está claro que su estrategia es
cerrar algunas minas de carbón...
y decirnos a todos...
- Ellos creen en hacer huelga.
¡Yo creo en trabajar!
- Ésta es la mujer que vio morir...
a 10 hombres en una huelga de hambre y no
movió un dedo para negociar una salida digna!
Despreciable.
Les presento mi dimisión...
después de 11 años y
medio extraordinarios.
Me voy orgullosa de dejar Gran
Bretaña en mucha mejor situación...
que cuando llegamos al poder.
¿Qué es esto?
Una radio.
Muy útil.
Con entereza, Margaret.
La mejor Primer Ministro
desde Churchill...
depuesta por una pandilla
de pigmeos cobardes!
Todos eso años tomando
decisiones difíciles.
¿Algo de eso importa ahora?
¡Todo está destruido!
¡Por esos idiotas!
¡Por esos merluzos sin agallas!
Esos ineptos aplacadores.
- ¡Muy bueno! Esos dubitativos.
Dubitativos. ¡Roba-votos!
- Populistas de tercera.
¡Tan ocupados tomándole
el pulso al público!
Débiles
- Son débiles.
Débiles...
- Todos ellos, débiles.
¡Hombres!
Si tomas decisiones difíciles...
sí, el pueblo te odiará hoy pero
te lo agradecerá durante generaciones.
O te olvidará del todo y
te tirará al cubo de la basura.
Yo quería que mi esfuerzo
hiciera el mundo diferente.
Y lo hiciste, mi amor.
Lo hiciste.
Sólo quería que mis hijos
crecieran sanos y felices.
Desde luego más felices que yo.
Guardaba todas estas cosas.
Oh, sí.
Y quería que tú fueras feliz, claro.
¿Fuiste feliz, Denis?
Dime la verdad.
Denis?
Denis?
Aquí está tu maleta.
Todo doblado. Ordenada.
Denis, espera.
¿Dónde están tus zapatos?
No, ¡no puedes irte sin los zapatos!
Aún no.
- La espalda recta, jovenzuela.
Sí. Espalda recta.
Con entereza.
- Sí, entereza.
No. Aún no. Denis.
Espera!
He dicho que no quiero
que te vayas aún!
Denis. Por favor.
No quiero quedarme sola todavía.
Vas a estar muy bien sola, mi amor.
Siempre lo has estado.
Denis!
Mamá.
Dios santo.
¿Mamá, estás bien?
Sí.
- ¿Qué has hecho?
Mamá, deberías haber pedido ayuda.
Mira que eres tonta, ¿eh?
¿Cómo te acuestas así?
¿Has hecho todo esto?
- Sí, ya está ordenado. Terminado.
Pero no te preocupes por eso.
June y yo podemos ocuparnos de todo.
Me iba a levantar para vestirme.
¿Llamo a alguien para que
venga a arreglarte el pelo?
Oh, no. Hazlo tú.
Oh, déjemelo a mí, Margaret.
No, querida, deja. Friego yo.
Carol ha dicho que quiere ir
a la Cámara de los Lores hoy.
No no. No voy a ninguna parte.