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Fue una cadena de errores, sin duda.
Sin ninguna duda. Nunca vi nada igual.
Nunca pensé
que vería soldados estadounidenses
tan deprimidos y con la moral tan baja,
y era increíble. Todo.
Tienes que considerarte muerto.
Y, si regresas, tienes suerte.
Pero si allí ya te consideras muerto,
puedes hacer tu trabajo.
Yo no recomendaría ir de vacaciones a Iraq
en un futuro próximo.
Procedimiento estándar
Cuando mataron a Uday y a Qusay,
los hijos de Saddam,
se incautó gran cantidad de información.
Fue una operación clave.
Ya no tenemos que preocuparnos
de Uday y Qusay,
pero tenemos que usar esta información
para encontrar a Saddam.
Después del acontecimiento
vino a vernos el Secretario de Defensa.
Quería ver la prisión y el progreso.
Todos los que venían
visitaban la sala de torturas y la horca.
Organizamos varios actos.
La primera parada fue
en la horca de Saddam Hussein.
Nos preparábamos para continuar
la visita a pie
y dijo: " No quiero ir a ningún otro lado.
"Que vengan algunos soldados
y sacaremos fotos.
"No necesito ver nada más en esta cárcel."
Yse fue.
Entró el general Miller,
el gurú de los interrogatorios
y de obtener información concreta.
Llegó el día después
de la visita de Rumsfeld.
Iba a convertir la operación
en un Guantánamo.
Los interrogadores,
militares con experiencia
en Afganistán o en Guantánamo
llegaron después de la visita de Miller.
Dio las instrucciones. No dudó en decir:
"Traten a los prisioneros como perros.
"Que sepan que ustedes están al mando."
El pabellón 1A pasa a estar bajo el mando...
JANIS KARPINSKI
General de Brigada - Policía Militar
...del comandante de información militar,
el coronel Pappas.
Días después, el pabellón 1 B
también está bajo el control
del coronel Pappas y lejos de mí.
Van a usar esos pabellones exclusivamente
para los detenidos de gran valor
para la seguridad.
Abu Ghraib se convirtió exactamente
en lo que el general Miller dijo
que quería hacer del lugar:
el centro de interrogaciones de Iraq.
OCTUBRE 2003
CORREO GRATUITO
"1 de octubre de 2003.
Primer día en la prisión.
"Son las 9 p.m. y oímos disparos.
"No se permite la luz blanca de noche.
"No se puede salir del edificio
después del anochecer.
"Espero que no nos quedemos aquí
mucho tiempo.
"Cuando llegamos,
estaban aterrizando dos helicópteros
"para llevarse prisioneros.
"Los helicópteros me asustan por el sueño.
"La cola oscilaba adelante y atrás.
"Luego salió una llama y explotó.
"Este lugar me da malos presentimientos.
"La prisión se llama Abu Ghraib.
Aquí mataron a 30.000 personas.
"Hay una sala donde los colgaban.
"No creo en los fantasmas,
pero es espeluznante.
"Espero volver a casa por Navidad,
o un poco después. Te quiero. Sabrina."
Íbamos por la carretera
y vimos una estructura enorme.
Era como seis campos de fútbol.
Luego vimos una señal que decía "Faluya",
justo ahí, la siguiente ciudad.
Estábamos en el centro.
Entramos y sólo había escombros,
edificios destruidos por las bombas,
perros corriendo por todas partes,
restos quemados.
El olor era insoportable.
Orina, heces, cuerpos podridos.
Era asqueroso. No queríamos tocar nada.
Luego tuvimos que mudarnos
a las celdas de la prisión.
Vas caminando por el complejo.
De pronto, una explosión.
Todos gritan: "Se acerca".
"¡Se acerca!" Tienes que correr.
Bum, bum. Estás enloqueciendo,
porque sucede una y otra y otra vez.
Después de un tiempo ya no tienes miedo,
sólo estás enojado.
"Diablos, ¿podemos dispararles?"
Una atravesó el techo de la prisión,
pero no estalló.
Cayó al suelo. Todos gritaron: "Caramba".
Bueno, no gritaron "Caramba".
Ya saben lo que gritaron.
Al pasar de la sección principal de la prisión
al 1A1B,
ya tenían a los detenidos para interrogarlos.
Ahí los vi desnudos.
JAVAL DAVIS
Sargento de Policía Militar
Pregunté: " Sargento,
¿por qué están desnudos?"
"Son cosas de Información Militar.
Yo no sé nada."
"¿Por qué estos hombres llevan
medias de mujer?"
Me respondió: "Para hacerlos flaquear."
Hombres desnudos,
hombres con medias de mujer,
hombres esposados
en posturas incómodas,
en celdas de aislamiento,
sin luz ni ventanas.
Abren la puerta, prenden la luz.
"Dios mío, Alá."
Apagan la luz, cierran la puerta.
¿Qué fue eso?
Te dicen: " Son cosas de Información Militar.
No te metas en lo que hacen."
De ahí en adelante pensé
que algo andaba mal.
Yo trabajaba en operaciones.
A veces salía a las 10:00.
A veces trabajaba toda la noche.
LYNNDIE ENGLAND
Soldado de Primera Clase - Policía Militar
Depende de cuántos prisioneros entraran.
A veces llegaban 200 en una noche
y me quedaba hasta las 6:00 de la mañana,
luego tenía turno de guardia a las 6:00 a.m.
y salía del turno,
dormía un par de horas y volvía al trabajo.
Solía ir al edificio
después de acabar mi jornada.
Solían estar Megan, Graner y Freddy,
viendo una película en la computadora.
A veces subía
y había prisioneros en posturas incómodas
por todas partes.
Los ponían en cuclillas
sobre cajas de comida
o subiendo y bajando escalones
o cosas así.
Nos parecía inusual.
Era extraño y estaba mal,
pero cuando llegamos
las cosas ya se hacían así.
Es lo que vimos. Estaba bien.
Lo primero en lo que me fijé fueron...
Fue un hombre.
Llevaba la ropa interior en la cabeza
y estaba esposado a una ventana
con los brazos hacia atrás.
Lo estaban interrogando.
Ahí empecé a tomar fotos.
Le escribí una carta a Kelly, mi esposa.
"20 de octubre de 2003.
"No logro sacármelo de la cabeza.
"Bajé y encontré al taxista
esposado con los brazos hacia atrás
"desnudo, con la ropa interior en la cabeza
y cubriéndole la cara.
"Parecía Jesucristo.
Al principio tenía que reírme,
"así que fui a buscar una cámara
y saqué una foto.
"Uno de los hombres agarró mi porra
y le pegó en el pene.
"Qué divertido. Entonces me di cuenta.
"Es una forma de abuso.
"Saqué más fotos
para dejar constancia de lo que sucedía.
"No hay mucha gente que sepa esto.
"Sólo quiero estar aquí para sacar fotos
"y demostrar que EE. UU. no es como creen.
"Pero no sé si puedo aceptarlo.
Y ¿si yo estuviera en su lugar?
"Pensé que podía enfrentarme
a cualquier cosa.
"Me equivoqué."
Si digo que está sucediendo esto
probablemente no me creerían
a menos que les mostrara fotos.
Si digo: " Está sucediendo esto.
Miren, tengo pruebas",
no pueden negarlo.
El interno # 151128 se cayó al suelo
de su celda
24 de octubre de 2003
Gus era el preso que estaba atado
con una correa.
Creíamos que podría ser miembro
del ejército iraquí,
porque siempre decía:
"Saddam volverá y los matará a todos.
Los odio."
Cosas así. Estaba muy enojado.
Pensamos que podría ser
alguien importante.
Luego descubrimos por qué lo arrestaron
y por qué estaba allí.
Se emborrachó y golpeó a alguien.
Era un preso normal,
como el de una cárcel
de cualquier condado.
Cuando lo trajeron al edificio,
dejó de comer.
Había que darle
de cinco a ocho intravenosas al día,
o bolsas de líquido intravenoso
para mantenerlo con vida.
Gus nos amenazaba y no obedecía.
Graner le puso la correa.
Se puso a cuatro patas y salió gateando.
Después le dio la correa a Lynndie.
Entonces él sacó las fotos.
El tipo se levantó solo.
Trataban de decir que ella lo arrastraba,
pero no fue así.
Yo estaba ahí, sé que no fue así.
MEGAN AMBUHL GRANER
Especialista - Policía Militar
Quizá no fuera ortodoxo,
pero salió de la celda
y no lastimó a nadie, ni nadie lo lastimó.
Graner llevaba la cámara en un bolsillo.
Nos pidió a Ambuhl y a mí
que bajáramos con él.
Cuando abrió la puerta,
Gus estaba desnudo.
No quería levantarse, por eso trajo la correa.
Se la puso en el cuello.
Le hizo salir gateando.
Creo que llegó a salir un poco.
Graner me dijo que agarrara la correa,
y lo hice.
Sólo la agarré. Se puede ver que está floja.
Dicen que lo arrastré,
pero no es verdad.
Graner sacó tres fotos seguidas.
Se ve que Megan está parada a un lado.
No me habría hecho ponerme ahí
junto a Gus si no fuera por la cámara.
Soy una mujer de 45 kilos y estatura baja,
agarrando una correa que lo tiene atado
al cuello. Lo estoy dominando.
Quizá eso fuera lo que quería Graner.
Quizá fuera para la documentación,
o para entretenerse.
No sé qué estaba pensando.
Pero sacó la foto.
En todos mis años de policía,
diría que más de la mitad de mis casos
se resolvieron
porque el criminal cometió una estupidez.
Sacar fotos de estas cosas
es una de esas estupideces.
Me dieron 12 CD
y me dijeron:
"Hay miles de fotos de Abu Ghraib.
"Busca las que muestren
abusos a prisioneros
"o gente que estuviera en la zona
mientras se cometían los abusos.
"Necesitamos saber
cuándo se hicieron las fotos."
Las imágenes valen más que mil palabras,
pero si no sabes
de qué día y de qué hora hablan
no sabes cuál es la historia.
Empecé a ordenar las fotos por temas.
Luego las ordené cronológicamente para ver
cuándo empezó
y cuándo terminó el incidente.
Cuánto tiempo pasó entre una foto y otra.
Cuánto se esforzaron por hacerle eso
a los presos.
¿Quién más estaba en la sala
mientras sucedía?
¿Cómo pudo suceder
sin que lo supiera nadie?
Al mirar este caso
como un gran caso mediático
se pierde el norte.
Estas fotos muestran
varios incidentes separados
de posibles abusos
o procedimientos estándar abusivos.
Lo único que se puede hacer es
presentar los hechos.
No se puede llevar emociones ni política
al tribunal.
Cuando estaba en la prisión,
todas las mujeres estaban en prisión
por un hombre.
Por distintos motivos,
pero siempre por un hombre.
Cuando entras en el ejército,
digan lo que digan,
es un mundo de hombres.
Hay que ser igual que un hombre
o te controla un hombre.
Si quieres ser igual que ellos,
tienes que ser fuerte.
Tratarán de controlarte.
Tienes que confrontarlos
y mostrarles quién manda.
"No toleraré eso.
No permitiré que me domines.
"No dejaré que me controles
porque seas hombre y yo mujer.
"No va a ser así." Aunque sea el ejército.
Si estás en el ejército, tienes un arma.
Úsala.
Si lo hubiera pensado entonces,
la habría usado.
Pero estaba ciega
porque estaba enamorada de un hombre.
Graner es encantador.
Si no lo conocieras y te lo encontraras,
te atraería.
En una sala llena, te fijarías en él.
Llama la atención.
Si no es el centro de atención,
se pone en él.
Es lo que hace. Es su estado natural.
Si no le prestas atención,
hace comentarios sobre ti,
y esas cosas.
Dice lo que quieres oír. Y lo sabe.
Lo sabía. Yo tenía 20 años
cuando lo conocí. Él tenía 34.
Tenía 14 años más de experiencia que yo.
Sabía qué decir y qué hacer.
Yo fui una tonta y me lo creí.
Debí haber escuchado.
Todos trataron de decírmelo:
"Es muy mayor para ti. Es mal tipo."
Pero no les creí.
Por alguna razón, le creí a él.
Ahora lo veo.
El número de reclusos crecía
pero nadie tenía un plan para liberar
a quien antes llamábamos " sospechoso
de terrorismo" o " cómplice de terrorismo".
El general Wojdakowski me dijo
después de la primera llegada de presos
que duraría varias semanas
y que al final habría 1.500 o más
presos de seguridad
de los que seríamos responsables.
Le dije: " Debió habérmelo dicho, señor.
"No tenemos recursos para mantener
"a los 200 presos
de las celdas de Abu Ghraib.
"Ahora nos enviarán 1.500 más.
"¿Cuál es el procedimiento de liberación?"
Me dijo: " No liberen a nadie. ¿Comprende?
"Si uno de estos presos sale a la calle,
"vendré a buscarla a usted."
Salían en mitad de la noche
y encerraban a todos los varones
en edad de combatir.
Por eso se oyen historias
de hijos, padres y sobrinos
encerrados. Es lo que hacían.
Imaginen que alguien va a su ciudad
y se lleva a todos los hombres.
Llegan en camiones de ganado
y los tratan como a animales.
Oyes un golpe en la puerta trasera,
llaman a la puerta y hay un camión de carga
lleno de chicos asustados
que van a la cárcel.
Decían: " Vinieron a buscarme
en mitad de la noche.
"¿Estoy en problemas, señor?
¿Qué hice? No soy terrorista."
Eran taxistas, soldadores y panaderos
y estaban en Abu Ghraib.
Había niños.
Si no teníamos al líder
de la insurgencia, nos llevábamos al hijo.
"Akbar, tengo a tu hijo. Está en la cárcel.
Entrégate y lo dejaremos ir."
Para mí, eso es secuestro.
Se llenó tan rápido
que ya no podíamos sacar a los niños
y tenían que quedarse en sus celdas.
Te sientes mal por retener a un niño
sin motivo, sólo por ser hijo de su padre.
Sólo puedes hacer que el tiempo que pasan
en prisión sea aceptable.
Les puedes dar todos los dulces
de las comidas preparadas...
SABRINA HARMAN
Especialista - Policía Militar
...para que se sientan más a gusto.
Pero no puedes hacer más ni sentir más.
"Se apagaron las luces de la prisión
"así que estamos a oscuras.
"Oigo decir '¡Señora! '
Bajo con la linterna e ilumino
"a un chico de 16 años sentado
y matando hormigas.
"Son hormigas iraquíes. Muy grandes.
"Tan grandes que pueden cargar un perro
y hacerte un corte de mangas.
"Todas las hormigas de la prisión fueron
a su celda
"y decidieron tomar el control.
"Yo sólo podía echar insecticida.
Las hormigas se reían de mí y seguían.
"Estábamos a oscuras, con una linterna
"matando hormigas con los zapatos.
La historia de las hormigas... Quién ganó.
"Fue el comienzo de mi turno.
"Habían desnudado a los prisioneros
"y los esposaron a los barrotes.
"Yo me reí de ellos y les lancé maíz.
"Me siento mal por ellos,
"aunque estén acusados de matar
soldados estadounidenses.
"Los humillamos pero no los golpeamos,
y eso ya es bueno.
"Duermen una hora, pasan cuatro despiertos
y vuelven a dormir una hora.
"Esto dura 72 horas,
y mientras nos metemos con ellos.
"La mayoría se asusta tanto
que se orinan encima. Es triste.
"Tienes que ver las fotos que sacaron.
"Les pusieron un saco de arena en la cabeza
empapado en salsa caliente.
"Es horrible,
pero estos hombres tienen información.
"Sólo intentamos que hablen."
La palabra que siempre me viene a la mente
es "surrealista".
Todo lo que vieron, todo lo que pasaba.
Un grupo de idiotas poco profesionales
que no sabía hacer su trabajo.
Los pusieron juntos, los mezclaron mal
y el resultado es lo que las noticias dicen
sobre Abu Ghraib.
TIM DUGAN
Interrogador Civil - CACI Corporation
Es horrible. Me da asco.
Porque todo el tiempo que los molestamos
y no hacíamos el trabajo,
morían soldados estadounidenses.
Lanzaron un mortero sobre Abu Ghraib.
Mataron a dos estadounidenses
e hirieron a unos 16.
Fuimos a interrogar a Wolf,
el líder del grupo que lanzó el mortero
sobre la prisión.
Había dos mujeres especialistas,
una interrogadora y una analista.
Le quitaron la ropa y lo dejaron desnudo,
lo cual no debían hacer.
Cuando acabaron de interrogarlo,
pregunté para qué lo desnudaban.
Quería saber cómo lo explicaban.
En la sociedad árabe,
las mujeres son seres serviles.
Querían cambiar eso.
Para que respondan a las interrogadoras
los interrogan desnudos.
Regresé y se lo pregunté
al sargento de mi sección.
Me dijo: " No deberíamos hacerlo
"pero permitimos que las mujeres lo hagan
"para vencer lo de la cultura árabe."
Contesté: " Acaba de decir
que no deberíamos hacerlo."
Y me dijo: " Ellas tienen permiso,
pero usted no puede hacerlo."
Le dije: "Entonces ¿qué debería hacer?"
Y me contestó: " Si yo fuera usted,
no me metería en esas cosas."
25 de octubre de 2003
17:00
solicitan que todo quede escrito
No tratamos de ocultar nada.
Para mí, eso es lo importante.
KEN DAVIS Sargento
Policía Militar
Si sabes que estás haciendo algo malo,
muy malo,
tratas de ocultarlo.
Harás lo imposible para ocultarlo
y que la gente no sepa nada.
Cuando entré, había un tipo
en pantalón de deporte corto,
camiseta y chancletas
y otro sólo con pantalón y camisa.
Cada uno llevaba a un detenido desnudo.
Alguien dijo: " Somos de Información Militar.
Sabemos qué hacemos."
Yo dije: "Muy bien." Porque no tenía idea.
No sé cuál era su rango,
no llevaban galones.
Los esposaron por encima de la cabeza
y los estiraron así,
y luego a lo ancho.
Empezaron a esposarlos juntos.
No dejaban de gritar: " Confiesa.
"Sabes que fuiste tú.
Dinos qué hiciste. Confiesa."
Luego los esposaron
simulando posturas sexuales.
Creí que no había entendido algo.
Lo que sucedía era
que los habían acusado de violar
a un adolescente en la prisión.
No tenía valor para la información militar.
Cruz le gritaba: "¡Desnúdate!"
El tipo no quería.
Cuando los desnudaron, mojaron el piso
y los hicieron arrastrarse,
rozando los genitales contra el cemento.
Pregunté qué sucedía.
Dije: "¿Así interrogan a la gente?"
Me dijo: "Hay muchas formas de hacerlo."
No aguantaba más y me fui.
La mañana siguiente llegó el teniente.
Le dije: " Los de Información Militar
están en el edificio.
"Hacen cosas extrañas
con detenidos desnudos."
Me dijo que yo no tenía que estar allí
y que no me metiera
en asuntos de Información Militar.
De acuerdo.
El de la derecha, con pantalón ***,
es Cruz.
Especialista Cruz
Información Militar
Junto a él estoy yo.
Especialista Krol
Información Militar
A la izquierda, contra el muro, Graner.
Cabo Graner
Policía Militar
Estamos mirando a dos detenidos
que están esposados en el suelo.
No veo nada más.
No era un interrogatorio.
Creo que sólo gritamos para la cámara.
Para mostrar a quien lo viera
que esto se lo podían hacer a cualquiera
que violara las normas.
Caían morteros sobre Abu Ghraib
casi cada día. Ahí moría gente.
ROMAN KROL
Interrogador de Información Militar
Yo estaba muy frustrado.
Cuando oí que unos detenidos
habían violado a un chico,
enloquecí.
Antes de irme estaba tan enojado
que tenía una botella de agua
y se la lancé para mostrarles mi odio.
Alguien trajo una pelota.
Estábamos jugando a pasárnosla.
Aquí voy a agarrarla.
Una vez lancé la pelota
y le di a uno en una pierna.
Es una pelota de juguete, no hace daño.
Graner quería que sacara fotos.
No me dijo qué fotografiar y qué no.
Yo estaba por ahí y...
"Saca una."
Llegaron los de Información Militar.
También querían molestarlos.
No les gustó que violaran
a un chico de 15 años.
Los golpeaban,
les hacían subir y bajar escaleras,
gatear, golpearse contra el muro
y cosas así.
Luego los esposaron juntos.
Cabo Graner - Policía Militar
Ése es Graner, con las manos en la cadera
y guantes.
Los dos tipos del fondo...
Especialista Krol - Información Militar
... son los de Información Militar.
No querían salir en las fotos.
Estaban enojados.
Yo les decía: " A mí no me digan.
"Sólo estoy sacando fotos."
No voy a hablar de que se hicieran fotos.
En todo el tiempo que pasé allí no vi a nadie
sacar una foto.
Aunque estaba en algunas,
nunca vi un flash ni nada.
De haberlo visto, le habría dicho algo
a los muchachos.
En primer lugar, hay una señal muy grande:
"No sacar fotos".
Y sacarle una foto a algo así es estúpido.
Me condenaron a 10 meses,
me degradaron a soldado raso
y me licenciaron por mala conducta.
Con esa sentencia me sentí más humillado
que castigado.
Ocho meses en la cárcel
por tirarle agua a alguien
y lanzarle una pelota.
Es humillante. La gente se ríe de eso.
Volví a casa, a mi celda
y uno de los intérpretes
estaba esperándome.
Me dijo: " Sr. Dugan, estoy molesto.
Muy molesto.
"El general al que interrogaron
quería decirnos dónde está Izzat."
Genial.
Y dice: " No, el interrogador no le preguntó
dónde está Izzat."
Es el vicepresidente de Iraq,
el número dos de Saddam.
El general dijo 10 veces:
"Les diré dónde está Izzat."
Y nunca lo preguntó.
Estaba frente a su celda, vigilado.
No estaba esposado ni nada.
Se veía como un abuelo. Muy respetuoso.
Por alguna razón le afeitaron las cejas
y no le gustó.
Le dije que no se preocupara,
que así se veía más joven.
Me sentí mal por él.
Cuatro días después íbamos a interrogarlo.
Un soldado le quitó el saco
y parecía Yoda.
No tenía cejas ni pelo.
Pregunté quién diablos era.
Era el general.
No me lo creía.
Pensé que estaban bromeando.
"No quiero bromas.
"Quiero interrogarlo.
Quiero saber dónde está Izzat."
Me dijo: "Es el general, no bromeo."
No lo conseguimos.
Ese general no dijo nada más al respecto.
Decidió que no iba a cooperar más.
Nos ascendieron de niñeras
a los que ponen las condiciones.
Nos hicieron parte del plan.
Los de Información Militar venían
y decían: " Pongan esta música
todo el tiempo. Que suene muy alto.
"Usen el megáfono si hace falta
y pónganlo junto a la puerta.
"Pónganlo al máximo
para que el tipo no pueda rezar
"ni dormir. Desoriéntenlo."
Puse la canción de Hip-Hop Hooray
una y otra vez.
Hip-hop hooray
Ho
Sonaba así.
Al final los iraquíes decían
Hey, ho
Esto no funciona.
Así que cambié la música
y puse heavy metal.
Puse Metallica.
Enter the Sandman, una canción muy fuerte.
Empezaron a gritar que no les gustaba.
Pero al cabo de un tiempo no...
Ya no les afectaba.
Creo que quedaron tan sordos
por la guitarra, el acorde La,
que hasta podían dormir. Quién sabe.
Puse música country. Funcionó.
No la soportaban.
Decían: "Dios mío, Alá, Alá. Que pare."
Para cuando los interrogadores los sacaron
de las celdas
estaban más que dispuestos a salir.
"Por favor, sáqueme."
A veces venían los de Información
y decían: " Hoy vamos a interrogar a éste.
"Sáquenlo y empiecen...
Ablándenlo un poco."
Gritarle, obligarlo a hacer gimnasia.
Esposarlo en una postura extraña
durante un rato.
Que lo desnudara una mujer,
porque así se avergonzaría
o se sentiría más humillado.
No los matábamos.
No les cortábamos la cabeza.
No les disparábamos.
No los cortábamos para que se desangraran.
Hacíamos lo que nos decían:
ablandarlos para el interrogatorio.
Nos dijeron que no los matáramos.
Los hacíamos adoptar posturas extrañas
durante horas para ponerles tensión.
Los hacíamos gatear
y subir y bajar escaleras.
Les echábamos agua fría.
Los señalábamos y nos reíamos
mientras se duchaban desnudos.
Los duchábamos vestidos.
Les cortábamos la ropa con un cuchillo.
Los quemábamos con cigarrillos.
Hacíamos lo que nos ordenaban.
Si nos decían que obligáramos a uno
a hacer gimnasia, lo hacíamos.
Si nos decían que lo mantuviéramos
despierto, lo hacíamos.
Decían: "Quiero que esté despierto."
Luego decían: " Está sucio.
Denle una ducha muy larga."
¿Algo de eso parecía extraño?
No, si se tiene en cuenta que nos decían
que eso ayudaba a salvar vidas
y veías que llegaba gente
del otro lado del perímetro
con miembros amputados
y necesitan saber quién está haciendo eso
para pararlo.
Éstos son tus compañeros de batalla.
Gilligan es el que está sobre la caja
con los cables.
Lo acusaron de matar a dos agentes del DIC.
Era su caja.
Tenía que agarrarla y ponerse encima.
Hacía frío, así que le pusimos una manta.
Yo no vi que lo tocaran.
Estaba muy, muy cansado.
Siempre nos cambiaba el nombre,
así que Graner le puso "Gilligan" a él.
Cuando llegué estaba en la ducha.
Tenía cables en los dedos
y le dijeron que se electrocutaría si se caía.
Los cables no transportaban electricidad,
y le dijeron:
"Si te caes, te vas a electrocutar."
Eso mantiene despierto a cualquiera.
Era parte del plan de sueño.
Había que mantenerlo despierto.
Habría sido peor
si hubiera habido electricidad
y si hubiera podido electrocutarse.
Sólo eran palabras.
Le quitaron los cables
después de sacar las fotos.
Se ve al sargento Frederick.
Ésa es la que saqué yo.
Y la que estoy mirando
hacia la ducha desde afuera
también la tomé yo.
Empezó a trabajar para nosotros,
así que lo dejaban salir todos los días.
Es muy divertido.
Creo que demostraron que era inocente.
Le dábamos comida extra y cigarrillos
por ayudarnos.
Tenía unos 24 ó 25 años.
Era joven. Un tipo muy decente.
Todas las fotos tienen fecha
pero iban de más de un año
a un par de horas.
BRENT PACK - Agente especial del Ejército
División de Investigación Criminal
Cada vez que las copiaban en un CD
de una computadora a otra
la fecha cambiaba
según la de la computadora.
Pero la fecha que se mantuvo constante
es lo que llamamos metadatos.
Metadatos es una palabra rimbombante
para decir información sobre la información.
Las fotos tienen información en el archivo
que te dice cuándo se creó,
con qué software,
la configuración de exposición a la luz
y la fecha y la hora de la cámara
cuando se hizo la foto.
Me alegré al ver
que los metadatos estaban intactos.
Las tres cámaras principales eran de Graner,
Harman y Frederick.
La cámara de Graner, la Sony FD Mavica,
fue la que sacó la mayoría de las fotos.
Había una Sony Cybershot,
que creo que era de Harman.
Y una Deluxe Classic, que era de Frederick.
Me di cuenta de que estaban sacando fotos
del mismo incidente casi al mismo tiempo.
Encontré ocho incidentes de sincronización
en los que podía decir:
"Esta cámara creía que era esta hora.
"Esta cámara creía que era esa otra hora."
Cuando lo ajusté,
las fotos parecieron alinearse.
El interno Civil 152735 trabaja para Al Jezera
Hay un registro de guardia
donde recogían los incidentes
que se producían en la prisión.
Confirmó que la línea temporal era correcta.
La cámara de Sabrina Harman creía
que era 2002.
Tuve que ajustar su cámara un año,
nueve meses, 11 horas y 29 minutos.
Las de Frederick y Graner sólo tenían
siete u ocho horas de diferencia.
Nadie consiguió información.
Sólo unos pocos.
La mayoría de los interrogadores eran
reservistas de 18 años.
Si lo piensas, estaban interrogando a gente
de 45 a 65 años,
generales con una, dos, tres
o cuatro estrellas.
Tienes 18 años, recién acabaste
la secundaria, te uniste al Ejército
y fuiste a la escuela de interrogadores.
¿Qué vas a preguntarle
a un general de 55 años
que ha visto mundo, hizo de todo
y estuvo en todas partes?
Estos muchachos estaban muy intimidados.
Los generales y los coroneles lo saben.
Se ríen de ellos.
Estoy interrogando a un tipo
y no me dice nada.
También capturaron a su hermano con él.
Fui al pasillo
para ver qué pasaba con el hermano.
Hay seis cabinas de interrogación
y cada una tiene un falso espejo
para que puedas ver qué sucede
en la sala de interrogación.
Hay dos soldados,
un hombre y una mujer, flirteando
y no le preguntan nada al detenido.
Un muchacho se acerca a una chica
y ella está receptiva
cuando deberían estar interrogando
a este idiota.
Les dije: " ¿Por qué no intercambiamos
los testigos?"
El nuevo detenido estaba en mi cabina
y le dije:
"Llevo aquí sentado dos horas
"y en realidad llevo dos días,
"porque estaba mirando por el cristal
"viéndote con los otros muchachos.
"Sé que sabes muchas cosas.
"Y sé que les dices mentiras
"a estos soldados.
Yo no toleraré tus mentiras.
"Tardo 3 minutos y 47 segundos
en fumarme este cigarrillo.
"Voy a salir a fumarme el cigarrillo,
"y cuando regrese
"me dirás
todo lo que quiero saber. ¿Comprendido?
"¿Te parezco del Ejército?"
Rompí la mesa de plástico de un puñetazo
y salí a fumarme un cigarrillo.
Un minuto y medio después
alguien lloraba y gritaba en mi cabina.
El intérprete estaba junto a la puerta
y dijo: " Lo asustaste muchísimo.
"No sabe qué vas a hacer.
"Te dirá lo que quieras.
Habla de lo que quieras."
Volví a entrar muy calmado,
me senté en un rincón
y le pregunté: "¿Qué decidiste?"
Centro de observación (200)
Prisión de Badush (1.900)
Cárcel de transporte (300)
Abu Ghraib (6.000)
Mis cárceles estaban dispersas...
... así que pasaba tiempo en la carretera.
Una vez llegué a Abu Ghraib
y el teniente Wood me dijo:
"Señora, estamos interrogando a un preso.
"¿Quiere venir a verlo?"
Me llevó y observé desde el pasillo.
Todo parecía normal.
Me pregunté muchas veces
si no me llevaron ahí específicamente
para que pudiera decir:
"Vi un interrogatorio
y todo era perfectamente normal."
Es extraño cuando el general Karpinski
u otra persona importante
venía a ver la prisión y...
Hacíamos que todo pareciera correcto.
Todos recuperaban sus colchones.
Todos recuperaban su ropa.
En cuanto se iban,
volvían a quitarles las cosas.
Parecía normal quitarle las cosas a alguien
si no cooperaba contigo.
CIA - Agencia Central de Información
CIA, Grupo de Vigilancia Iraquí...
Grupo de Vigilancia Iraquí
... DIA, FBI...
Agencia de Información de Defensa
... Fuerza de Acción 121...
FBI - Oficina Federal de Investigación
... las otras agencias gubernamentales,
las OAG.
Fuerza de Acción 121
No tenían normas.
Servicios de Gobiernos Extranjeros
Les decíamos los fantasmas. Venían
y no sabías quiénes eran.
Sus prisioneros no quedaban registrados.
"¿Cómo va, soldado?
"No registre a este tipo en el libro.
"No está aquí, nunca estuvo aquí.
"Métalo en una celda y no lo marque.
"Cuando llegue la Cruz Roja,
llévelos a otro lugar.
"Cuando la Cruz Roja vaya al otro lugar,
"muévalos donde estaban.
Porque aquí no existen."
Estoy acostumbrado a estar en la carretera.
"Soldados, hagan esto."
"Comprendido, Sargento. Afirmativo.
Hasta luego, ya terminamos."
Pero ahora somos parte
de una gran operación de alto nivel.
Nos mandaban a los tipos de la baraja.
Los deteníamos.
Era un gran trabajo.
¿Ahora tenemos que vigilarlos?
Entonces cambiaron las cosas.
Los llevaban a la ducha,
cubrían la puerta con una sábana
y los ponían bajo la llave del agua.
O los metían en contenedores de basura
con hielo. Luego los torturaban.
Les ponían un saco en la cabeza,
y por la humedad se les pegaba a la nariz
y a la boca.
Les hacía sentir como si se ahogaran.
Abrían una ventana
cuando afuera hacía 40 grados
y los veían desvanecerse.
Horas y horas, sólo se oían gritos y golpes.
Cuando terminaban,
ocho o diez horas después, sacaban al tipo.
Estaban medio inconscientes.
Los llevaban a su celda y les decían:
"Mañana regresaremos a buscarlos."
Sé cómo suena un puñetazo
o cuando golpean la piel.
Sé la diferencia entre un grito
de alguien molesto
y un grito de dolor.
Sé cuál es la diferencia.
el logo de la ducha 1 B no se usará hasta
que el OAG salga 1A 34/5
4 de noviembre de 2003
Era muy temprano,
sobre las 4:30 a.m.,
así que todo estaba en silencio.
Los OAG decían:
"Tenemos otro prisionero especial."
Sólo llevaba una camisa.
Entró, estaba encadenado,
esposado y demás, tenía una capucha.
ANTHONY DIAZ
Sargento - Policía Militar
Cuando entró, no preguntamos,
no le preguntamos a nadie quién era
ni qué había hecho. No era asunto nuestro.
Dos soldados se lo llevaron a la ducha
donde lo interrogó un OAG.
Estuvo ahí bastante tiempo.
Creo que fue más de una hora y media.
De pronto, el OAG abrió la puerta y dijo:
"¿Pueden ayudarme?
"Amárrenlo más alto,
porque no quiere cooperar.
"Supongo..."
Estaba flaqueando.
Había gente de la CIA.
En ese momento no sabíamos
de qué agencia eran.
Nos pidieron que lo esposáramos
a la ventana, así que él tenía que sostenerse
porque fingía estar inconsciente.
Yo lo sostenía del mono.
No lo sostenía por debajo de los brazos
ni nada.
El mono le apretaba la entrepierna...
JEFFREY FROST
Especialista - Policía Militar
...y yo dije:
"Este tipo finge muy bien
estar inconsciente."
Yo habría gritado
si el mono me apretara la entrepierna así.
Todos se rieron y nadie le dio importancia.
Recuerdo que tenía los brazos muy atrás
y era una postura muy rara.
Volví a decir que fingía muy bien,
porque casi se le iban a romper los brazos.
Me sorprendía que no se le hubieran roto.
Estaba esperando a oír el ruido.
De pronto
empezó a sangrar por la nariz y por la boca.
Nos dimos cuenta de que algo iba mal.
Entonces le quitamos la capucha.
Era la primera vez que le veía la cara.
Me sorprendí
porque tenía la cara desconfigurada.
Tenía los ojos negros y enormes
y cardenales por todos lados.
Pregunté qué le había pasado.
Tenía un ojo abierto.
Hice como Pierce
para que pudiera mover el ojo.
Nada. Miraba así.
Dije: "Este tipo no está vivo."
Todo ese tiempo estuvimos ***ándolo.
Lo cargábamos, lo levantábamos
y todo el tiempo el tipo estaba muerto.
Me manché el uniforme de sangre,
porque goteaba.
Me sentí mal,
porque yo no formo parte de esto, pero...
Te hace sentir que sí,
porque estás ahí con el tipo.
El coronel Jordan estaba a cargo
de los de Información Militar.
Entró con los médicos, el capitán Reese,
el capitán Brinson, el primer sargento,
el sargento Snider, vinieron todos.
Ahí estaba toda la cadena de mando
tratando de averiguar qué pasó.
Lo examinamos
y estaba claro que había muerto.
Nosotros...
Salí de la sala y...
Como si no hubiera pasado nada.
Le pregunté a un agente de la CIA.
"¿Qué hacen ustedes normalmente
"en una situación así?"
No estaban asustados,
pero llamaban por teléfono
para ver qué debían hacer y qué no.
¿Qué hacemos con él?
No podemos sacarlo en una bolsa
de cadáveres porque habría un motín.
Lo mantuvimos ahí toda la noche
y conseguimos una bolsa.
Lo cubrimos de hielo.
Lo dejamos en la sala donde estaba.
Cerramos la puerta con llave.
Recuerdo que le dije a un suboficial:
"Busca la llave extra y guárdala,
"o alguien entrará y lo molestará."
Debimos habernos llevado las dos llaves
y guardarlas en vez de dejar una ahí.
Pero supongo que había que dejar una ahí
por si querían llevarse el cuerpo esa noche.
Tenía que ser todo muy discreto.
No queríamos que se corriera la voz.
5 de noviembre de 2003
"Ayer fue un día de locos.
El tipo al que trajeron murió.
"Lo golpearon muy duro. No sé qué pasó."
"Fue en el turno anterior al nuestro.
"Lo metieron en una sala
junto a la que estaba yo trabajando anoche
"y lo metieron en una bolsa con hielo.
Era asqueroso.
"Lleva 24 horas descongelándose."
El capitán Brinson nos convocó a todos
para una reunión en el despacho principal.
Dijo que un prisionero había muerto
en la ducha
de un infarto al corazón.
El sargento Frederick tenía la llave
y lo examinamos.
Había empezado a derretirse y a oler mal.
Cuando llegamos llevaba
al menos 24 horas allí.
Así que estuvo ahí mucho tiempo.
Tenía las rodillas magulladas
y heridas en los muslos por los genitales.
Tenía heridas en las muñecas.
Era obvio a simple vista
que no había muerto de un infarto.
Se metieron en problemas por el pulgar.
Lo entiendo. Se ve muy mal.
Pero cuando poso en las fotos
nunca sé qué hacer con las manos.
En todas las fotos salgo
con los pulgares en alto
porque me sale automáticamente.
Igual que uno sonríe para las fotos,
eso es algo que yo hacía.
Era un detenido fantasma,
así que no debía estar ahí.
No querían que estuviera ahí
cuando viniera la Cruz Roja,
así que había que hacer algo.
A alguien se le ocurrió la idea
de sacarlo de la bolsa,
vestirlo con un mono naranja,
poner el cadáver en una camilla,
ponerle un vial intravenoso
y sacarlo del edificio.
A partir de ahí,
nunca oímos nada al respecto.
El tipo murió, lo metieron en una bolsa,
lo pusieron en una camilla y desapareció.
Ocúpate de tus asuntos, sigue trabajando.
Desapareció. Se disolvió en el aire.
Trataron de acusarme
de destrucción de bienes del gobierno,
algo que no entiendo,
y luego de malos tratos
por fotografiar al muerto.
Pero ya estaba muerto.
No sé si eran malos tratos.
Y de manipular las pruebas
por quitarle la venda para sacarle una foto
y luego volver a ponérsela.
Cuando murió, lo limpiaron
y le pusieron las vendas.
Así que no manipulé pruebas.
Ya lo habían hecho ellos por mí.
Para demostrar las acusaciones
tendrían que traer las fotos
y no querían mencionar al muerto, al OAG,
porque ocultaron un asesinato
y eso los haría quedar mal.
Así que retiraron las acusaciones
sobre el OAG de la ducha.
Motín no informado en Ganci
Hubo un motín en el campamento Ganci.
Era una mujer de la policía militar.
Le golpearon la cara con un barrote
o algo así.
Iban a escapar del campamento
y tomar a los policías militares
como rehenes.
Los llevamos por el pasillo
y los pusimos en el suelo.
Ahí entré yo.
No puedo dormir de noche
pensando que los detenidos
quieren matarme
cuando hay gente afuera
que quiere matarme.
Esto tiene que parar. Tendrán que...
Tienen que saberlo. Perdí el control.
Los tiré al suelo y me caí sobre el montón,
salté sobre ellos como en lucha libre.
Quería hacer más, estaba enloquecido.
Decía: "Hirieron a un soldado nuestro."
Le pisé el dedo de la mano a uno,
y el dedo de un pie.
Quería hacerle daño,
el que golpeó a la mujer con un ladrillo.
Quería hacerle mucho daño.
Había acabado mi jornada de gestionar
vehículos y empezaba con los generadores.
Estar sentado ahí por la noche
es muy aburrido.
Las computadoras son lentas.
Estaba esperando que llegara correo.
JEREMY SIVITS
Especialista - Policía Militar
Entró el sargento Frederick.
Quería imprimir unas cosas.
Empezó a hablar. Lo llamaron por radio
por unos hombres
a los que tenía que inscribir.
Dijo: "Acompáñame a la celda de retención."
Lo acompañé. Ahí estaban los siete tipos.
Dije: " Oye, Freddy,
"¿quieres que agarre
a uno de los detenidos y lo lleve por ti?"
Dijo: "Sí, adelante."
Al acercarme a la zona 1A
oía gritar a Graner.
Pregunté dónde querían que lo dejara
y me dijeron que lo dejara en el suelo.
Lo tiré al suelo con los demás.
Entonces sacaron las fotos.
Entonces fue
cuando Javal les pisó los dedos
y Lynndie también.
Entonces empezaron las fotos
y Graner me pidió que sacara la foto
en la que está meciendo
la cabeza de un detenido
y fingía que iba a golpearlo.
Nunca lo golpeó.
En cuanto saqué la foto, lo soltó.
Luego empezaron a desnudar
a los detenidos
y a sacar más fotos.
Graner se acerca a uno de los detenidos
y lo golpea en la sien,
sin ningún motivo.
Lo golpeó muy duro.
Después de eso Sabrina revisó los números
y dijo: "Éste está aquí por violación."
Así que Graner le rasgó el pantalón.
Sabrina le escribió: "Soy un violador."
VIOLADOR
El tipo no se movió en dos o tres minutos.
Lo miré y dije:
"Grane, a este tipo le pasa algo."
Me acerqué y le quité la bolsa de la cabeza
hasta verle los ojos.
Estaba inconsciente. Dije:
"Graner, lo dejaste inconsciente."
Y sacudió la...
Después de golpearlo le sacudió la mano
y dijo: "¡Ay! Eso dolió."
No parecía muy preocupado.
Volví con Freddy. Estábamos ahí parados.
Freddy me miró y dijo: "Mira esto."
Se acercó al tipo al que escolté,
lo levantó, le marcó una "X" en el pecho
y luego lo golpeó en el pecho.
Yo dije: " ¿Qué?
"¿Quién eres y qué le hiciste a Freddy?"
Luego pusieron a uno de rodillas
mirando a la pared
y pusieron a otro encima de él.
Tenían esposas de nylon,
que son como grapas de plástico.
Le dije a Graner:
"El tipo va a perder las manos
"si no le cortamos las esposas.
Las tiene moradas.
"Tengo una navaja. Puedo cortárselas,
"pero vamos a tener que ponerlo de pie."
Tardamos un rato, pero se las quité
y volvió a fluirle la sangre a las manos.
Que yo sepa, el tipo conservó las manos.
Entonces fue cuando Graner y Freddy
empezaron con la pirámide humana.
Graner me dijo que cumplía órdenes,
que por eso lo hacía.
Como yo me iba del pabellón esa noche,
me dijeron que no había visto nada.
Yo siempre trato
de llevarme bien con todos.
Dije: "¿Ver qué? Yo no vi nada."
Los del DIC siempre me preguntaban
por qué no informé de eso,
si no me parecía que estaba mal.
Dije que sí,
pero en la guerra las cosas cambian.
Nos dijeron que no fotografiáramos
a los prisioneros.
Me pidieron que sacara la foto.
Soy un tipo amable así que lo hice.
Trato de que nadie se enoje conmigo.
Siempre he sido así.
Pero ser amable
no siempre está recompensado.
Ahora hay gente que me pregunta
por qué no soy como antes.
Les digo: " Ponte en mi lugar.
"Pasa lo que yo pasé
en los últimos tres años.
"Verás lo amable que vas a ser."
Sivits pasó por ahí unos cinco minutos.
Nunca le hizo nada a nadie.
Pasó un año en la cárcel por nada.
Por estar ahí.
No debieron condenarlo.
No lo habrían acusado
si no fuera por ese video.
- ¿Quién filmó el video?
- Yo.
Lo último que recuerdo es que había
un tipo de pie
y uno de rodillas.
Uno tenía la mano sobre la cabeza del otro.
Ésa es la foto que saqué.
Luego nos fuimos a llamar por teléfono.
Era el cumpleaños de Kelly,
así que fui a hacer una llamada.
Megan y yo estábamos arriba,
en el despacho.
Salimos y estaban tirándolos a un montón
con los demás
y sacando fotos desde arriba.
Por aquella época, Graner, Davis y Frederick
habían empezado a saltar
sobre el montón de gente.
Entonces bajé con la cámara.
Graner dijo que también quería
que le sacaran algunas allí.
Freddy, Sabrina y yo hacíamos las fotos.
Esa noche usamos tres cámaras.
Estaban en fila contra la pared
y Graner empezó a agarrarlos uno por uno.
No sabíamos qué estaba haciendo.
Nadie lo sabía. No decía nada.
Nos dijo que los estaba apilando
en una pirámide.
Le preguntamos por qué.
Nos dijo: " Para controlarlos,
para que estén todos en una zona."
Nos pareció bien.
Freddy es el que empezó
a obligarlos a masturbarse.
No sé por qué pero lo hizo.
Empezó con uno y quería ver
si los demás también lo hacían.
No sé.
Pero los obligó a todos a hacerlo a la vez.
En cierto momento, seis hombres pararon
y uno siguió durante 45 minutos.
No es broma.
El que siguió masturbándose es
el que está en la foto conmigo.
Quería que estuviera yo, y yo no quería.
Le dije que no iba a ponerme.
- ¿Quién quería que estuvieras?
- Freddy.
Graner se unió. Decía: "Sí, vamos."
Yo decía que no quería estar.
Y él: "Vamos, hazlo por mí." Al final accedí.
¿Era tu cumpleaños?
Los trajeron después de medianoche.
Así que sí.
- ¿Cuántos años cumplías?
- Veintiuno.
Graner dijo: "Es tu regalo de cumpleaños"
o algo así.
No sé por qué lo dijo,
porque yo no quería ese regalo, pero sí.
Me utilizó.
Aunque yo fui una estúpida y me lo creí.
Ahora sé qué esperar.
Al menos él ya es el pasado.
Ésta es la pila infame
de siete iraquíes desnudos.
La expresión de sus caras indica
qué pensaban y qué sentían
en ese momento.
Al mirarlos a los ojos
parece que estén pasándola bien.
Esta escena selló su destino.
Casi todos los que participaron
antes o después están en la foto.
Aquí está Graner
simulando dar un puñetazo.
Dos cámaras lo registraron
en el mismo momento
desde ángulos diferentes.
De nuevo se ve dónde habían apilado
a los siete hombres desnudos
con la cabeza cubierta.
Se ven las dos cámaras
en cada una de las fotos.
No es tanto por cometer los abusos.
Si están en las fotos mientras sucedía,
- tendrán problemas.
- Muchos.
Si hacen que el Presidente se disculpe
ante el resto del mundo, yo diría que sí.
"No dormí en toda la noche. No logro
dormir. Anoche escaparon seis prisioneros.
"Perdimos ocho en tres noches.
Aquí va a pasar algo malo.
"Espero equivocarme,
pero por si acaso, te amo.
"Quizá nos estén investigando.
Hay rumores.
"Sí, golpean a los prisioneros.
No creo que esté bien, nunca lo creí.
"Por eso saqué las fotos,
para demostrar lo que pasó a la gente.
"Nadie creería lo que sucede aquí. Nadie.
"Si quiero seguir fotografiando estos actos,
"tengo que fingir una sonrisa cada vez.
"Espero no tener problemas
por algo que no hice.
"Te amo. Sabrina."
Supongo que nos dimos cuenta
de que lo que sucedía no estaba bien,
aunque lo sabíamos desde el principio.
Pero es tu trabajo. No hay nada.
No puedes levantarte y decir:
"No voy a regresar",
o "No voy a hacer esto."
Porque, en cualquier caso, estás perdido.
Un guardia de prisión iraquí
pasó una pistola de 9 mm
y una bayoneta nueva.
El guardia las envolvió en una sábana
y las metió en una celda.
El detenido buscó bajo la almohada,
sacó una 9 mm
y le dio al sargento Cathcart en el chaleco.
El sargento Elliot tuvo que meter
la escopeta
para que el tipo dejara de disparar.
Sólo le dio en la pierna
porque estaba rezando en un rincón.
"Alá, Alá." Quería morir.
A los guardias iraquíes
que estaban implicados
los convocaron y despidieron a algunos,
pero los iraquíes los contrataron de nuevo.
No sólo arriesgabas la vida por las bombas
que venían de fuera.
Tu vida estaba en peligro
por parte de los guardias iraquíes
a los que no vigilábamos.
Y los detenidos.
Tres golpes y fuera. Uno va a sacarte.
No todos eran malos,
pero la inmensa mayoría sí.
El tipo que pasó la pistola,
yo pensaba que era bueno.
Pensaba que era un buen guardia.
Resultó ser un fedayín. Te sonríe a la cara
y te apuñala por la espalda.
Entraron corriendo y mataron al tipo
que acababa de intentar matarnos.
Pero en las fotos no parece
que sucediera eso.
La imaginación se desboca al ver la sangre.
Las fotos sólo muestran
una fracción de segundo.
No se ve lo de antes ni lo de después.
No se ve lo que hay alrededor.
Ésta es la primera vez que vi
perros de la policía militar.
"Dos perros con dos dueños se dirigen
hacia el hombre que está contra el muro.
"El tipo está asustadísimo.
Los perros se acercan.
"El iraquí empieza a gritar
y se dirige a Graner.
"Uno suelta a su perro lo justo
como para que le muerda la pierna.
"El tipo se pone histérico.
El perro le muerde de nuevo.
"Había sangre por todas partes.
"Las marcas de los dientes se veían así.
"Vino un médico
y me enseñó a coser heridas.
"Era divertido, pero me sentí muy mal
por este hombre.
"Los perros no debían haber estado ahí."
Una de las cosas que hace un interrogador
en el último párrafo de los informes
es evaluar la credibilidad de la información
que te dieron.
Es el último párrafo
de todos los informes que escribes.
Si conseguimos la información con tortura
no puedo verificar nada,
porque supongo que me dirías
cualquier cosa para parar el dolor.
Pero si te doy zanahorias y motivos
para cooperar conmigo,
conseguimos información más útil.
El general Sánchez siempre apuntaba al
coronel Pappas,
lo golpeaba con el dedo en el pecho
y le decía: " Quiero a Saddam. ¡Encuéntralo!
¡Encuentra a Saddam! ¿Comprendes?
"¡Encuentra a Saddam
cueste lo que cueste!"
Si golpeas a alguien con el dedo
en el pecho el tiempo suficiente
harán lo que quieras para que pares.
Es una espiral de decadencia ética.
"Esto no funciona. Prueba esto.
Esto funcionó en Guantánamo.
"Esto funcionó en Bagram. Prueba esto.
Está bien."
No para los morteros,
no logra la información que quieren
y no encuentra a Saddam.
No fue la información que obtuvieron
en un interrogatorio
ni en una entrevista en Abu Ghraib.
Fueron los soldados de campo
los que encontraron a Saddam.
¿Están listos?
La granja en la que se ocultaba Saddam,
una granja pequeña junto al río Tigris.
Saddam llamó a la puerta
y dijo: " Soy Saddam Hussein.
Soy el presidente de Iraq.
"Soy el líder de Iraq
y el pueblo de Iraq es mi pueblo.
"Todas las casas de Iraq son mi casa."
Fue a la cocina y se preparó un huevo.
Se lo comió y se fue.
Regresó cuatro horas después
y dijo: "Me quedo aquí."
La mujer del tipo se asustó.
Capturaron a Saddam el domingo 13,
por la mañana.
El lunes yo tenía que reportar
a la oficina del coronel Pappas.
Me preguntó si queríamos ser voluntarios
para un proyecto de equipos especiales.
Acababa de hablar por teléfono
con Rumsfeld, el secretario de defensa.
Rumsfeld y Sánchez autorizaron
las técnicas para interrogar
a los detenidos de alto valor.
Dijeron que podíamos derrotar
a la insurgencia
por lo que encontraron con Saddam.
En ese momento, lo creí.
Hay que ver exactamente
lo que muestran las fotografías.
Era importante separar los actos criminales
de lo que no eran actos criminales.
El juicio se centraría en eso.
Si lastimaron a alguien,
tienes un acto criminal
ACTO CRIMINAL
Poner a alguien
en posturas sexuales humillantes
es un acto criminal.
Hacer que se abusen sexualmente
es un acto criminal.
Quedarse parado y mirar
cómo se golpean la cabeza contra la pared
y sacar fotos
es negligencia en cumplimiento del deber,
así que es un acto criminal.
El tipo con cables atados a las manos
y parado sobre una caja
parece estar en una postura angustiante.
Lo miro y pienso
que no parecen cables eléctricos de verdad.
Procedimiento estándar
Procedimiento estándar. Eso es todo.
¿Constituye un crimen
o es un procedimiento estándar?
Probablemente sea
un procedimiento estándar.
Las medias en la cabeza son un añadido,
pero sólo le impidieron dormir.
No los estaban torturando.
Los molestaban
para tratar de obtener información.
Llevo 20 años en el ejército.
Estuve en Tormenta del Desierto I.
Pasé cuatro meses en Guantánamo.
La gente que pasó por lo mismo que yo
no puede ver las fotos
del mismo modo que yo.
Procedimiento estándar
Regresé de una reunión muy tarde.
Abrí el correo clasificado.
"Señora, le hago saber que informaré
"al Comandante General
sobre la investigación de Abu Ghraib.
"Esto incluye las acusaciones de abusos
y las fotografías."
Le respondí:
"No sé qué decir.
Es la primera noticia que tengo."
Estaba preparándome
para una mini rueda de prensa
y decir la verdad lo antes posible.
Decir: " Esto es lo que descubrimos.
"Estamos investigándolo
porque tenemos disciplina.
"Somos estadounidenses
y sabemos qué está bien y qué está mal."
El general Sánchez dijo. " De ningún modo.
No hablará de esto con nadie."
El miedo a la verdad
calló a la gente.
Todos lo sabían.
Todos los que estaban en esa prisión,
los que se quedaron, vivieron
y trabajaron ahí tenían las fotos.
Graner les pasaba copias.
Él tenía muchos CD, así que hacía copias.
"Toma, ¿cuáles quieres?"
Todos tenían una copia de las fotos.
Todos lo sabían.
Se publicaron esas fotos infames,
y el día después el coronel Pappas
amnistió a todo el batallón.
Se destruyeron todas las pruebas.
Quémenlas, tírenlas,
bórrenlas del disco duro
y acaben con todo.
Eliminó a todos los testigos de la defensa,
hasta la última persona
que podría haber declarado
y decir: "Esto es lo que sé" en un sólo día.
Después de la amnistía,
¿quién iba a querer declarar?
¿Quién iba a decir que sabía algo?
"Sé qué sucedió." Nadie.
Encontraron un modo de enterrarlo.
Sacrificaron a los menos importantes,
así lo cubrieron.
Soy un estadounidense de 28 años.
Un soldado voluntario.
Me culparán de todo.
"Cariño, te casaste con una criminal.
Se publicaron las fotos
"y hoy a las 10:00 a.m.
estarán investigándome.
"Ya no podré entregar las fotos
cuando llegue a casa.
"Sabía que tendría problemas
sólo por estar ahí.
"Pero ¿de qué otra forma le dirías a la gente
lo que hace el Ejército?
"Creerás que estoy asustada, pero no es así.
"Sabía que caería con ellos.
Estaba en mal lugar en mal momento.
"Lo peor es que casi toda la compañía sabe
qué sucedió,
"vieron las fotos y no hicieron nada."
Ahora mismo mi esposo está en prisión.
No puedo superar esto
hasta que regrese a casa.
Es muy difícil.
Este monstruo político le costó tres años
a Lynndie England,
ocho a Iván Frederick y diez a mi esposo.
Después de Tormenta del Desierto,
nos veían como a héroes.
Nuestra misión era liberar Kuwait.
Era algo honorable.
Esta guerra de Iraq, como la de Vietnam,
probablemente se recuerde
como ésa en la que no fuimos héroes,
no fuimos los salvadores.
Estas fotos tendrán mucho que ver.
La guerra es angustiosa.
Nos bombardeaban con frecuencia.
Un joven sin experiencia en la vida
puede perder la orientación
si lo meten en un sitio así.
A toro pasado, todo parece más fácil.
Seguro que mirarán atrás
y verán que lo que sucedió estuvo mal
y que participaron en algo
que avergonzó al país.
Pero en ese momento estaban
en zona de guerra,
donde las reglas
no siempre están tan claras.
Lo siento mucho por Lynndie England.
Es obvio que era una de esas jóvenes
sin mucha experiencia en la vida.
No había indicios
de que estuviera implicada en algo así.
Pero estaba enamorada.
Ambuhl.
Supo cuándo informaron sobre ellos
y cuándo debía desaparecer.
Estaba presente algunas veces
y otras su ausencia era notable.
Probablemente fuera
una de las más inteligentes.
En las fotos que se publicaron
sólo me vieron a mí.
Soldado primero Lynndie England
Policía Militar
No se ve a Megan...
Especialista Megan Ambuhl
Policía militar
... porque cortaron la foto.
Graner me dijo que no quería
que saliera en la foto
porque no quedaba bien.
Quizá quería protegerla en secreto.
Ahora sé que eran más íntimos
de lo que yo creía entonces,
y quizá quisiera protegerla.
¿Cuándo averiguó él
que estaba embarazada?
Yo lo supe el 20 de febrero,
y al regresar se lo dije al Sargento.
Por supuesto,
querían saber quién era el padre.
Lo sabían y se lo dije a él.
Al principio pareció emocionado
y luego no quiso saber más de mí.
No quiso saber nada del bebé.
Cuando se supo la historia
y se supo que estaba embarazada,
negó que el bebé fuera suyo.
Me acusó de serle infiel,
algo completamente falso.
Si eso es lo que quiere,
yo estoy de acuerdo.
Nunca lo verá.
Es su elección.
Yo estaba en la cafetería. Alcé la mirada
y nos vi a Dan Rather y a mí.
Dijo: "Sargento Javal Davis."
Era yo.
"¿De dónde sacaron esta foto?"
Fueron a la escuela donde estudié.
Sacaron una foto mía del periódico
en la que estaba corriendo
en una pista de vallas.
Me recortaron la cara y me mostraron así.
Pero, en realidad estaba saltando una valla.
Me hicieron parecer un mal tipo.
Mostraban una pirámide de gente desnuda
y luego mostraban mi foto.
Yo dije: " Si miran esas fotos,
"¿ven a algún *** en ellas?"
No estaba ni yo ni ningún otro.
Si no fuera por las fotos,
no habría habido escándalo.
Se habría olvidado y eso habría sido todo.
Las fotos son lo que son.
Se pueden interpretar de muchas formas,
pero muestran lo que muestran.
Se les puede dar cualquier significado
pero uno ve lo que pasaba
en esa fracción de segundo.
Se pueden ver las expresiones del rostro
y los sentimientos en la mirada,
pero no son hechos.
Sólo se puede decir lo que hay en la foto.
Alguien expuso a nuestra administración
en una situación incómoda. Es todo.
Están molestos por eso.
Se puede matar a la gente.
Se les puede disparar, volarles la cabeza.
Si no hay una cámara, no pasa nada.
Pero si hay una foto, estás acabado.
Las torturas no sucedieron
en esas fotografías.
Eso fueron humillaciones.
Era para ablandarlos.
Las torturas sucedían
durante los interrogatorios.
Los tipos pasaban por el interrogatorio
y estaban muertos,
los mataban.
Ahí los torturaban.
De eso no tenemos fotos.
Pensé que sólo eran policías militares
haciendo el idiota.
Ya no creo que fuera eso.
Creo que se lo hicieron pagar
a unos muchachos.
Son tapaderas
y la gente tiene miedo de la culpa
y de las consecuencias de sus actos,
así que nadie dice nada.
Pero están denunciando a otros
para salvarse.
Recibí una llamada
de un reportero del Pentágono que decía:
"La relevaron del mando."
Yo dije: "No lo sabía."
El general Helmly no me lo dijo.
No me llamó.
No me hizo ir a Washington
para verme en su despacho
y relevarme allí.
Es otro tipo de cobardía.
¿Tiene miedo de mirar a Janis Karpinski
a los ojos?
Recibí una carta de su despacho
10 días después
en la que me relevaba del mando
de la brigada 800.
Yo tenía buena reputación en el Ejército
hasta que hice lo que hice.
Mi tío murió en Vietnam
13 años antes de nacer yo.
A mi padre le dieron dos estrellas de bronce
en Vietnam por su valor.
A mi abuelo le dieron una estrella de bronce
en Vietnam.
Luego llegué yo y me vi implicado en eso.
Eso dejó mi nombre a la altura del barro.
Desde el principio te enseñan
que tienes que cumplir órdenes.
Si no, tendrás problemas.
Y si las cumples,
obviamente tienes problemas.
Es fácil para los coroneles retirados,
y para los generales y mariscales
o quienes sea salir y decir:
"Sabían que eran órdenes ilegales
"y debieron enfrentarse
al teniente coronel y a los mariscales.
"Debieron confrontarlos
en ese momento en zona de guerra
"donde su vida estaba en peligro."
Es poco realista pensar
que eso iba a suceder.
Te bombardean y te disparan todos los días.
Los detenidos fabrican cuchillos caseros
y otras armas, se amotinan.
Un tipo hizo estallar a 10 compañeros míos.
Habría que patearle el trasero.
Sé qué puedo hacer y qué...
Creo que sé qué no puedo hacer.
Creo que sé qué no puedo hacer,
pero veo a estos tipos hacerlo
y a los de la CIA que vienen y lo hacen.
Después de un tiempo piensas:
"¿Sabes qué?
"Aquí no hay ley, pero no los mates."
Yo entonces no era el mismo
que el que está aquí sentado
o que el que era antes de ir allí.
No sé qué podría haber hecho
de otro modo.
Podría haber dicho: "No voy a hacer esto."
e ir a la cárcel por desobedecer órdenes.
Pero no lo sé.
Todos pueden hacer otra cosa...
No sé qué habría hecho de otro modo,
estando en la misma situación.
Si pudiera volver atrás,
no me enrolaría en el ejército.
Eso es lo que habría hecho de otro modo.
No vale la pena.
Pasas por todo eso y vuelves a empezar,
quieres volver a ser la misma que se enroló.
Tratar de entrar en la universidad,
tratar de...
No valió la pena.
Sólo quiero seguir con mi vida.
Encontrar un empleo, criar a mi hijo.
Creo que no tengo muchas opciones.
No puedo cambiar nada, así que...
Y si pudiera, no tendría a Carter.
No lo cambiaría por nada del mundo,
así que...
No querría volver atrás para cambiar algo.
Así es la vida, ¿no?
Nos traicionamos unos a otros.
No es justo. Es teatro. Es la vida.
Vívela. Ahora tengo que seguir adelante.